Conoce los nuevos proyectos que impulsarán el quehacer académico hacia la comunidad
El Fondo DEA de la Universidad Andrés Bello ya seleccionó sus ganadores para el año 2020, resultando beneficiadas 17 iniciativas de académicos y académicas de las sedes de Santiago, Viña del Mar y Concepción.
Un amplio interés hubo este año en participar en el proceso del Fondo Concursable para el Desarrollo de Iniciativas de Extensión Académica (DEA), contando con 41 postulaciones provenientes de académicos y académicas de las tres sedes de la Universidad Andrés Bello, de las cuales 17 lograron la adjudicación.
Destaca en esta ocasión Concepción, ya que 7 del total de los ganadores son de esta sede, seguidos por Santiago con 6 seleccionados y luego Viña del Mar con 4. Cabe destacar que todas estas iniciativas – financiadas por la Dirección General de Comunicación Estratégica y Vinculación con el Medio UNAB – tienen como foco la proyección del quehacer académico hacia la comunidad.
Acceso a la información pública
Una de las iniciativas ganadoras 2020 fue “Coloquios sobre acceso a la información pública en casos vinculados a violaciones de derechos humanos” de la docente de la Facultad de Derecho, Carmen Droguett, quien, además, ya realizó un proyecto DEA anteriormente llamado “Yo Ciudadano”.
Sobre cómo se sintió al lograr la adjudicación, la académica UNAB aseguró estar feliz, pero no sólo por ella sino también por todos los involucrados. “Existe un trabajo previo y posterior conjunto de muchos docentes de distintas áreas de Derecho, de ayudantes, estudiantes, egresados y del personal administrativo. Todos ellos han manifestado siempre su preocupación por la comunidad y nuestro deber de apoyarlos jurídicamente”, señaló.
Mientras que sobre los coloquios que desea hacer este año, explicó que están orientados a estudiantes que ya han cursado las asignaturas de derecho público (de 3° a 5° año), para que conozcan tanto la regulación del derecho de acceso a la información en materias vinculadas a graves violaciones a derechos humanos, como aquellos casos jurisprudenciales que han sido relevantes en cada una de las materias a tratar como, por ejemplo, medioambiente, migración, economía, etc.
Problemáticas no resueltas
Por su parte, el director del Centro de Transporte y Logística UNAB, Julio Villalobos, obtuvo financiamiento para su propuesta “Lo social en el transporte y la logística: el pilar olvidado de la sustentabilidad”, seminario que busca dar una mirada amplia y con visión de futuro a la idea que todo desarrollo sustentable supone abordar desafíos en el ámbito social.
“Si bien los sectores de la logística y el transporte son fundamentales para el progreso económico de los países, la forma de su desarrollo conlleva implícita consideraciones y dinámicas en lo social que, hasta hoy, poco se han discutido y considerado”, explicó el académico.
Asimismo, aseguró que lo fundamental es discutir cómo abordar los temas que como país no se han respondido definitivamente, tales como las horas de conducción y descanso de conductores, la infraestructura de zonas de descanso en carreteras, los tiempos de espera y su impacto en los conductores, entre otros. Pero también aquellos que son emergentes en la industria como la temática de género, la llamada “economía gris” o cómo integrar el fenómeno inmigratorio a las necesidades laborales.
Una perspectiva necesaria
Paulina Varas, directora del Diplomado de Especialización en problemas de salud mental de la Facultad de Educación y Ciencias Sociales UNAB, desarrollará el “Workshop Sexualidad y Afectividad de Personas con Discapacidad Intelectual (PcDI)”, que explora un tema poco conocido, “principalmente porque se ha mantenido como tabú”, aseguró.
“La aproximación al abordaje de esta temática da cuenta de una mirada centrada principalmente en la prevención del embarazo y abuso, desconociendo las particularidades de los sujetos. Y, por otra parte, se observa que prima una visión asexuada de las PcDI, lo que evidencia la falta de espacio y tiempo para vivir su sexualidad plenamente”, explicó la académica, agregando que la experiencia del trabajo directo con estos jóvenes y sus familias durante años permitió identificar esta necesidad.
Por ello, dijo que “es un gran logro haberme adjudicado este fondo por segunda vez, ya que permite continuar realzando y visibilizando las necesidades de las PcDI. En nuestro país, aún nos encontramos en deuda en diversas áreas en su abordaje, lo cual nos desafía a seguir aprendiendo y formándonos como profesionales”.
Derribando brechas
Una de las ganadoras de la sede de Concepción fue Karen Correa, docente de la carrera de Geología, quien postuló el “II Encuentro de Mujeres en Ciencia y Tecnología”, que tiene como fin motivar y fomentar el interés por la ciencia y el desarrollo del pensamiento científico en jóvenes de 3° y 4° medio de la región.
Además, durante el evento – que tuvo gran éxito el año pasado – se realizarán talleres en diversas áreas como geología, física, química, robótica, entre otras, para que las jóvenes exploren sus intereses vocacionales.
Así, la académica UNAB indicó que “en el contexto nacional, la amplia brecha de participación de la mujer en estas áreas es una problemática que se está abordando desde todos los ámbitos y sectores de la sociedad. Diversos factores del entorno llevan a que la participación, inscripción y retención de mujeres en carreras del área científica y tecnológica sea muy baja”, de ahí que esta iniciativa busque contribuir al fortalecimiento y promoción del papel de la mujer.
Actualización de conocimientos
Finalmente, la directora de la carrera de Fonoaudiología de Concepción, Yolanda Maldonado también resultó beneficiada con el Fondo DEA para llevar a cabo una “Jornada de actualización en evaluación vestibular”, la cual es gratuita y abierta a profesionales fonoaudiólogos, otorrinos laringólogos, médicos generales, tecnólogos médicos y estudiantes de último año de estas disciplinas.
La docente UNAB señaló que “la jornada busca formar a la comunidad de profesionales de la salud y a estudiantes en formación vinculados al abordaje de pacientes con patología vestibular, en técnicas de evaluación que hoy constituyen el gold standard y que hacen uso de tecnología avanzada con cual la carrera cuenta en sus laboratorios”.
La idea es que los profesionales puedan hacer uso de las tecnologías vigentes y recomendadas para objetivar los diagnósticos y, en consecuencia, plantear un abordaje más apropiado, ya que, según expresó la directora de carrera, no muchos son capaces de realizar una evaluación y una aproximación pertinente de los síndromes vestibulares.
Revisa aquí el listado completo de los proyectos DEA 2020 adjudicados