VOZ DEL EXPERTO| Cómo enfrentar las altas temperaturas de este verano
La académica de Enfermería UNAB, Sede Viña del Mar, Dra. Déborah Oliveira, entregó recomendaciones para evitar trastornos generados por las altas temperaturas.
El cambio climático ha sido relacionado con diversos eventos y catástrofes ambientales en las ultimas décadas, lo que ha afectado significativamente la vida de las personas, principalmente las más vulnerables. Estos eventos incluyen un aumento significativo de las temperaturas y del número de días con calor extremo, además de una reducción de la cantidad de lluvia. Solo en 2021, por ejemplo, hubo récord de temperatura desde Futaleufú hasta la región de Magallanes, llegando a 3°C de diferencia respecto a su promedio. Además, este se posicionó como el segundo año más seco de la historia, con un 43% de déficit.
La Dra. Déborah Oliveira, académica de la Facultad de Enfermería, de la Universidad Andrés Bello, brindó desde la Sede Viña del Mar, una serie de recomendaciones para evitar trastornos generados por el calor.
La docente recomendó que “se debe evitar la exposición al sol en las horas de mayor temperatura junto con la ingesta de bebidas azucaradas, alcohólicas o con cafeína. Por otro lado, es ideal mantener los espacios ventilados y beber mucha agua, manteniendo una correcta hidratación. Además, es un fundamental una alimentación liviana, rica en frutas y verduras. Así mismo, las ropas y calzados deben ser ligeros, sueltos y de color claro para permitir mayor ventilación. Junto a ello, se puede optar por tomar duchas frías o aplicar toallas húmedas en la piel en situaciones críticas”.
Los riesgos del calor extremo para las personas mayores
El número de personas mayores en Chile crece cada año, y actualmente representan un 18% de la población del país. Si bien las temperaturas extremas pueden afectar a cualquier persona, este grupo es más vulnerable a problemas de salud relacionados con el calor ya que tienen mayor dificultad de adaptarse a los cambios repentinos de temperatura comparado con personas más jóvenes. Esto puede ser debido a ciertos medicamentos, enfermedades crónicas, o por una menor cantidad de masa muscular y de grasa corporal, principalmente en las personas de 80 años o más.
La exposición continua al calor extremo genera deshidratación, quemaduras, y otras consecuencias a la salud, lo que requiere atención médica dependiendo del estado de la persona, ya que puede hasta llevar a la muerte. Los síntomas de un sobrecalentamiento pueden incluir el desmayo o mareos, náuseas, calambres, hinchazón en las piernas y los tobillos, reducción de la cantidad de orina, agotamiento, sudor extremo, piel fría y húmeda, y un pulso rápido. Un estado grave de deshidratación puede generar una falta total de orina, confusión, agitación o apatía, piel seca, pulso fuerte y rápido o débil y lento, dejar de sudar por la deshidratación extrema, y la muerte.
Se sugiere enfriar el hogar, abriendo todas las ventanas durante la noche y cerrándolas durante el día, además de poner recipientes de agua en el ambiente de dormir para ayudar a enfriar el espacio. Al hacer actividad física y salir de casa, preferir horarios más frescos como antes de las 7 y después del atardecer. Las ropas y calzados deben ser ligeros, sueltos y de color claro para permitir mayor ventilación, y duchas frías o toallas mojadas en la piel son recomendadas si la temperatura sobrepasa los 35 grados. Se sugiere aún utilizar gorro que proteja del contacto directo con el sol y anteojos con filtro de protección solar, además de utilizar bloqueador solar con FPS al menos 30, y replicarlo cada 2 horas, en el caso de exposición directa al sol.