VOZ DEL EXPERTO | Alza del precio de la carne: ¿Cómo reemplazar este producto? 

Todos hemos notado el alza de los alimentos, situación que golpea fuerte no solo los bolsillos, sino que puede afectar la salud.

Uno de los productos que más han subido de precio es la carne. Pero, no consumirla ¿puede tener un riesgo para el organismo? Janet Cossio, académica de la Escuela de Nutrición y Dietética de la U. Andrés Bello, sede Viña del Mar, aclara que “la salud no se verá afectada, siempre que se sustituya sus ‘proteínas’ por la de otros alimentos, ya que estas son importantes porque actúan en distintos procesos: formación de tejidos, de hormonas, enzimas, sistema inmune y un largo etcétera, y aportan también el hierro y vitamina B12”.

Según la nutricionista, “en primera instancia se debe optar por comprar carne blanca como el pollo que es más económica para consumir una o dos veces a la semana”.

¿Por qué alimentos se puede reemplazar la carne en los otros días? La académica de la UNAB sugiere:

a.         Consumo de huevo: es un alimento con un alto valor nutritivo. Los estudios han demostrado que no existe ningún riesgo para la salud si se come un huevo al día o incluso más. Aporta aminoácidos esenciales, yodo, niacina, rivoflavina, B12, vitamina D, ácidos grasos esenciales. Se pueden elaborar tortillas, guisos de verduras donde se incorporen, hacerlo cocido, al agua y un largo etc.

b.         Incorporar la carne de soya, rica en contenido de proteínas e isoflavonas, solo se debe dejar remojando, luego estrujar, a incorporar a guisos o salsas, se puede saltear en sartén con tomate, cebolla, zanahoria e incorporar como acompañante para unos fideos, arroz o guiso de papas o mote.

c.         Las legumbres, ricas nutricionalmente. Tratar de cocinarlas una vez a la semana, pero para dos días, así se disminuye el gasto también de gas, estas no solo se pueden comer como los tradicionales guisos de lentejas con arroz, porotos con tallarines o garbanzos con arroz, también pueden incluirse molidas combinando con verduras y huevo en hamburguesas, croquetas, o hacer pastas para el pan.