Psicología capacitó en habilidades emocionales a mujeres de dos comunidades de Viña del Mar

El pasado viernes 01 de julio se realizó una emotiva ceremonia con la que se culminó el proyecto de capacitación en habilidades emocionales a mujeres pertenecientes a las comunidades de Chorrillos y de Esperanza de Viña del Mar. Este proyecto se adjudicó los fondos concursables de Vinculación con el Medio del primer semestre de 2022.

El proyecto, enmarcado en el ramo de Taller de Intervención Psicosocial, consistió en una serie de talleres realizados lunes y miércoles de cada semana, en las comunidades, y orientados hacía el fortalecimiento de la autoestima, la autopercepción y comunicación. Además, se dieron capacitaciones de apresto laboral para incentivarlas a cumplir con sus metas.

El programa, titulado “Fortaleciendo el rol femenino como agende de cambio en la comunidad en contextos de violencia de género”, estuvo a cargo de Cyntia Segovia, jefa de proyecto y docente de la carrera de Psicología UNAB sede Viña del Mar, quien destacó que “ este proyecto es parte de Vinculación con el Medio, y esto es una función clave para nosotros como U. Andrés Bello porque nos permite contribuir en nuestra comunidad, con actividades de comunicación y difusión del conocimiento con un sentido de responsabilidad social, acercar la academia a la realidad de nuestro entorno nos ha permitido como psicólogos y psicólogas formas de ponernos al servicio de los demás, conectar con las personas, tanto en el trato humano como profesional”.

Asimismo, Miriam Pardo, también docente del proyecto, expresó que esta iniciativa buscaba “trabajar la autoestima, el empoderamiento, lo que escuchamos, lo que queremos decir, cómo llegamos a los demás. Sentir confianza en sí mismas es fundamental para la obtención de logros, el conocimiento de las redes de apoyo con las cuales contamos para buscar trabajo, hasta hacer un currículum, todo aquello no sería posible si no confiamos en nuestras propias capacidades”.

Además, agregó que “en esta capacitación pudimos ver cómo cada una fue haciendo una revisión de sí misma, pero también cómo se apoyó en sus compañeras y en los gestores de este recorrido, que tuvieron a su cargo las sesiones de cada taller, nuestros alumnos y alumnas de la carrera de Psicología”.

La ceremonia fue guiada por Fernanda Zavala y Maximiliano Tapia, estudiantes y parte del equipo de trabajo. El evento partió con agradecimientos por parte de las autoridades, voceras de ambas comunidades y estudiantes.

Posteriormente, se dio inicio a la entrega de los reconocimientos a todas las mujeres participantes. Una vez que estuvieron todas sobre el escenario cantaron una emotiva canción que tenían como himno y finalizaron con una fotografía con todo el equipo para recordar siempre este momento.

Rodrigo Cornejo, director de la carrera de Psicología Sede Viña del Mar, dijo que “esto ha significado muchas cosas para nuestros estudiantes y para nuestra carrera, principalmente los talleres nos han permitido aprender de la experiencia y de las historias de esfuerzo de las mujeres de ambas comunidades y reconocer que son un modelo a seguir para muchas mujeres. Agradecemos a las mujeres de las comunidades haber confiado en nosotros y posibilitar este bello encuentro, cuyos primeros frutos comenzamos a ver en el día de hoy a través de la entrega de este diploma, pero que sin duda podremos seguir viendo a futuro”.

En representación de los estudiantes, Cristián Quinteros se dirigió a las mujeres de las comunidades diciendo que agradece “a cada una de las personas que hizo posible este proyecto y a la Fundación Ronda por ser el contacto que les permitió conocer a estas maravillosas mujeres. Quiero darle las gracias a mis compañeros y compañeras por poner a disposición su energía, conocimientos y sabiduría en cada acto y palabras que hicieron de cada sesión un espacio de comunión”.

Cristián finalizó: “agradezco a cada una de las participantes, simplemente por ser lo que son: sabias y poderosas mujeres, capaces de dar todo por la gente que aman”.

Por otra parte, la representante de la comunidad de Chorrillos, Vanesa Molina, entre lágrimas y mucha emoción contó que “Dentro de las cosas que nos enseñaron, que fueron muchas en corto tiempo, nos enseñaron a valorarnos, a comunicarnos, una compañera nuestra comentó en una oportunidad llegó a su casa abrazando a sus hijos, no gritando sino que conversando y su familia pensó que estaba enferma, nos reímos mucho cuando nos contó, pero eso es lo que ustedes lograron en nosotras” y agregó que esto “nos sirvió para saber que tenemos el derecho de ser valorada como el género que somos: mujeres superpoderosas”.

Natalia Villa, del campamento Esperanza 2011, integrante del comedor solidario general agradeció “en nombre de mis compañeras por el taller llevado a cabo en nuestra comunidad, por todos los datos momentos que pasamos en compañía del equipo y estudiantes, por tantas herramientas, empoderamiento y aprendizaje brindados y, sobre todo, por la calidad humana, fueron días de muchas emociones y vivencias, que siempre estarán en nuestros corazones”.