La Tercera | Un presupuesto para la ciudad
El decano de Campus Creativo, Ricardo Abuauad, repasa la asignación presupuestaria propuesta para el próximo año 2023 , su impacto en la crisis habitacional y en la planificación de la ciudad.
Las últimas noticias en relación con la crisis de vivienda son malas: los permisos de edificación residenciales bajaron un 44% en agosto, la peor cifra desde 2010. Los créditos hipotecarios caen un 40% si se compara con 2021. Faltan incentivos, certezas jurídicas, facilidades en la tramitación, todos asuntos que deben resolverse con urgencia.
Con un escenario así de difícil para las ciudades, hay que mirar con atención la ley de presupuesto 2023 que se acaba de presentar: es el primer ejercicio de esta administración, y debe estar zanjado para noviembre. ¿Qué énfasis deja entrever? En el contexto de un aumento del gasto público de 4,2%, el Minvu aumentará la inversión del suyo en un 14%, muy por sobre el porcentaje general.
Y, aunque era fácil prever que una parte significativa de ese presupuesto iría a lo habitacional (el 86%, con un crecimiento del 17,6 %), preocupa que la inversión en ciudad y desarrollo urbano no abarca sino un 13%, con una disminución del 5,1%. ¿Por qué es relevante? Porque conocemos bien las consecuencias de resolver el problema de vivienda solo en lo cuantitativo, sin actuar en la calidad de los espacios públicos y esas urbanizaciones: es lo que hicimos durante años, y el resultado es malo.