El Mostrador | Día de la Tierra: el impacto ambiental del turismo
En columna de opinión, Pablo Rebolledo, director de Administración en Ecoturismo UNAB, Sede Viña del Mar, ahondó en los desafíos que mantiene hoy en día la ciudadanía con el medioambiente, en el marco del Día Mundial de la Tierra. El Mostrador, 22 de abril del 2024.
El Día Mundial de la Tierra, fue nombrado por las Naciones Unidas. Abriendo un espacio para reflexionar sobre el rol del ser humano en el planeta y los objetivos que se enfrentan en base a su preservación.
“En Chile, una nación considerada bendecida por su diversidad geográfica y una riqueza natural incomparables. El desarrollo turístico emerge como una doble oportunidad y responsabilidad. En primer lugar, la de aprovechar nuestros territorios para el desarrollo sostenible y responsable. Por otro lado, proteger la vida en todas sus expresiones. El turismo nacional ha experimentado un crecimiento significativo en las últimas décadas, atrayendo visitantes de todas las latitudes a destinos que van desde el desierto de Atacama hasta los glaciares de la Patagonia. Sin embargo, este crecimiento no puede ser a expensas de la degradación del entorno que lo hace tan atractivo, ni de sus componentes”, expresó Pablo Rebolledo, director de la Escuela de Ciencias Ambientales y Sostenibilidad y director de la carrera Administración en Ecoturismo de la Universidad Andrés Bello, Sede Viña del Mar.
Protección del medio ambiente
Bajo este mismo contexto, el académico declaró que la nación debe adoptar un enfoque turístico que armonice la explotación de sus recursos, con su conservación a largo plazo. De este modo, equilibrar las necesidades de los turistas y la industria, con la protección del entorno, la preservación de la naturaleza y el bienestar de las comunidades locales.
“Es fundamental establecer regulaciones y directrices claras que fomenten prácticas turísticas responsables. Esto implica limitar el desarrollo descontrolado de infraestructuras turísticas en áreas sensibles y promover el uso eficiente de los recursos naturales. Además, la educación juega un papel crucial en la promoción de un turismo consciente. Tanto turistas y residentes deben tener en consideración el impacto de sus acciones y como contribuir a su conservación”, declaró Pablo Rebolledo.
Finalmente, el docente concluyó que “debemos recordar que somos guardianes de este planeta y que tenemos la responsabilidad de protegerlo. El desarrollo turístico en Chile debe ser visto no solo como una oportunidad económica de corto plazo. También debe ser contemplado como un compromiso vital con la preservación de nuestro patrimonio natural, cultural y de la vida”.
Visite la columna de opinión completa publicada en El Mostrador, 22 de abril del 2024.