12 Julio 2024

Alumnos del Diploma en Habilidades Laborales UNAB Concepción vivieron su graduación

Siete alumnos completaron sus tres años de estudio e iniciaron su camino en el mundo laboral. El programa de inclusión cumple 11 años en el Biobío preparando a personas con discapacidad intelectual.

Este 11 de julio se realizó la graduación, tras 3 años de estudios, de los alumnos y alumnas del Diploma en Habilidades Laborales UNAB (DHL), programa de inclusión que prepara a personas con discapacidad intelectual para el mundo laboral.

La ceremonia se efectuó en el Auditorio Gonzalo Rojas del campus sede Concepción. Contó con la presencia de autoridades universitarias, encabezadas por el vicerrector de sede, doctor Carlos González Correa, y la decana de la Facultad de Educación y Ciencias Sociales de la UNAB, doctora María Gabriela Huidobro.

Asistieron padres, familiares y amigos de los graduados.

Graduación con orgullo y esfuerzo

Algunos ya cuentan con trabajo donde pueden demostrar lo aprendido; otros ya salen en su búsqueda, con ilusiones y su currículum en la mano.

Este es el destino que cambiaron los siete alumnos y alumnas del Diploma.

Una de ellas fue Celeste Jerez (24) quien dijo estar “muy ansiosa”, porque trasGraduación la graduación “ya puedo empezar a enviar mi currículum para trabajar. Estoy preparada para ingresar al mundo laboral, porque las profesoras siempre nos apoyaron en todo, a mí y a mis compañeros, siempre con mucha alegría”.

No solo es meritorio conseguir el Diploma, sino también en conseguir un empleo antes de graduarse. Es el caso de Víctor Sierra (33) que tras la intermediación laboral realizada por el programa Diploma en Habilidades Laborales consiguió empleo en la empresa Mundo Pacífico.

Además, se convirtió en el primer estudiante con discapacidad intelectual en recibir la beca de Excelencia Académica Endowment UNAB, lo que le permitió estudiar sin costo alguno.

“No pensé que tendría ese reconocimiento tan maravilloso. Tengo discapacidad intelectual y auditiva, y eso no me he impedido llegar hasta donde estoy, Me atreví y todo lo he logrado gracias a Dios. No es fácil, se requiere aprendizaje, pero en el Diploma encontré las herramientas para desenvolverme bien. Nunca olvidaré de donde salí”, dijo.

Inclusión y entusiasmo

El Diploma de Habilidades Laborales de la UNAB se imparte desde 2006 en Santiago. En la sede Concepción se realiza desde 2013, donde se han graduado 85 alumnos de este programa. Son siete generaciones de estudiantes que egresan de la Enseñanza Media regular con modalidad de educación inclusiva o su equivalente en la educación especial.

El vicerrector de la sede Concepción de la UNAB, Carlos González, aseguró tras esta ceremonia que “es un día especial para los nuevos graduados. Para nosotros, este Diploma significa ponerse en el lugar del otro, nos tratamos todos como uno más de la sociedad y esta universidad ha contribuido mucho a que esto ocurra”.

Agregó que con los años ha sido testigo de cómo los empleadores valoran a los alumnos del Diploma. “Porque son muy concentrados en el quehacer y eso da confianza, son incluso mejores que otros que no le dan tanta importancia al trabajo”, aseguró.

Por su parte, la doctora María Gabriela Huidobro, decana de la Facultad de Educación y Ciencias Sociales UNAB, despidió a los estudiantes recién graduados.

“Son el motivo de orgullo, de celebración, y de emoción para todos los que los acompañamos. Su graduación confirma que son personas muy valiosas”, expresó.

“Ustedes son el mejor testimonio de que el esfuerzo, el entusiasmo y las ganas conducen a grandes y hermosos logros. No solo porque durante estos años han aprendido una especialidad, sino porque en el camino también han forjado amistades, han conocido a distintas personas, han descubierto nuevos mundos, han desarrollado sus capacidades y han sacado provecho a sus distintos talentos”, agregó.

Finalmente, la directora del Diploma de Habilidades Laborales UNAB sede Concepción, María Florencia Iriarte, dijo que “celebramos un año más de desarrollo de un programa que hace casi 20 años derribó la barrera de acceso a la Educación Superior para estudiantes que presentaban discapacidad intelectual y del desarrollo, garantizando un derecho fundamental señalado en leyes y convenciones”.

“Como programa, hoy ponemos término al trabajo diario por otorgar una formación universitaria de calidad a lo largo de 3 años de significativos aprendizajes que buscan transformar la vida de cada participante”, finalizó.

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