VOZ DEL EXPERTO| VIH en Chile: la pandemia invisibilizada
En su columna de opinión, Romina Bustos, secretaria académica de la carrera de Obstetricia de la Universidad Andrés Bello sede Concepción comenta sobre la importancia de la prevención, el diagnostico y tratamiento del VIH en el día que conmemora el combate de la enfermedad.
El número de nuevos casos de VIH en Chile ha ido en aumento durante la última década. El año más álgido se creía iba a ser el 2017 con 4.927 casos nuevos, sin embargo, el año 2018 decidió lo contrario, en donde hubo 6.948 nuevos contagios de VIH.
La realidad del VIH en la región el Biobío es preocupante. El año 2017 la provincia de Concepción lideró los contagios en la región. Sin embargo, al año 2019 existían 2.678 personas VIH (+), de las cuales, 2.585 se encontraban en tratamiento.
Es fundamental dejar claro que la mayoría de los nuevos casos se han presentado en personas de nacionalidad chilena, sin embargo, también se ha visto un aumento en la proporción de nuevos casos en personas de nacionalidad extranjera, en donde el año 2015 contemplaban solo un 9.19%, pero el 2018 un 37.13%. Esta relación se puede deber a que la migración ha aumentado.
Chile debe enfocarse en la prevención de la infección por VIH incentivando desde la infancia la educación en salud sexual y salud reproductiva ad hoc a sus necesidades y ya en la adolescencia implementar medidas de prevención de infecciones de transmisión sexual, enseñar sobre sexualidad saludable, aumentar las campañas de promoción de hábitos beneficiosos y prevención de infecciones en adolescentes y adultos, además de incentivar el uso del preservativo de pene y vagina, asegurando que sea gratuito el acceso a este método anticonceptivo de barrera fundamental en la vida de las personas. Importante destacar que las campañas se aborden desde una perspectiva integral y no desde un enfoque punitivo – prohibitivo que es el actual modelo educativo que existe.
Resulta imprescindible ir en la búsqueda de aquellos infectados que desconocen su diagnóstico, de manera de iniciar tratamiento adecuado, oportuno y de esta forma evitar la transmisión a terceros.
Una de las grandes medidas que ha abordado el Ministerio de Salud para combatir esta pandemia es la aplicación de test rápidos de VIH a lo largo del país en los centros de atención primaria y también, a través del método búsqueda activa en sitios claves como universidades, plazas, playas, centros de eventos, etc.
El tratamiento para el VIH existe, es efectivo, gratuito y la atención es 100% confidencial en los centros de salud sexual que posee Chile, tales como el CAISS y UNACESS. Hoy en día, gracias a los nuevos fármacos y las tecnologías, una persona VIH (+) puede hacer su vida completamente normal, siempre y cuando tenga una adecuada adherencia al tratamiento, por lo tanto, he ahí la importancia de que las personas se comprometan con su salud. Hoy en día, una persona VIH (+) que se trata adecuadamente no va a morir de SIDA.
Siguiendo la corriente actual respecto a la prevención del contagio por virus Sars-Cov-2, en donde obligatoriamente a nivel nacional e incluso mundial, debemos utilizar la mascarilla de manera obligatoria y habitual, deberíamos tener el mismo enfoque y responsabilidad al hablar del uso del preservativo porque evidentemente hay pandemias que existen desde hace mucho antes que el coronavirus, como la pandemia del VIH.
La única gran diferencia en el control de la pandemia VIH es que los profesionales de la salud, la población portadora del virus y la población general tenga responsabilidad y alturas de miras al tratar este tema. La educación y la cultura son los recursos más importantes que se necesitan para combatirla.
Hoy, en el día mundial de la lucha contra el SIDA, se puede estar orgullosos de que a nivel nacional las personas que se traten correctamente el VIH no van a morir de este síndrome. Por tal motivo, es necesario transmitir fehacientemente este mensaje.