22 Agosto 2023

VOZ DEL EXPERTO | A más de 60 años aún existen mitos sobre los anticonceptivos orales

Dra. Paulina Rojas Domínguez, académica de la Escuela de Química y Farmacia de la U. Andrés Bello, explica las verdades y mitos de los anticonceptivos orales.

En 1960 la «píldora» recibió la autorización para ser dispensada y vendida explícitamente como anticonceptivo oral en Estados Unidos.

“Los anticonceptivos orales (ACO) pueden ser una combinación de estrógenos y progestágenos o solo progestágeno y al entregar a nuestro organismo una dosis determinada de estas hormonas provocamos la inhibición de la ovulación, siendo esto el principal mecanismo asociado a los ACO”, explica Paulina Rojas Domínguez, académica de la Escuela de Química y Farmacia de la U. Andrés Bello.

Paulina Rojas

La Bioquímica y Doctora en Farmacología agrega que “también se consiguen mecanismos secundarios, como la alteración de la movilización espermática y del endometrio.  El moco cervical se vuelve más espeso generando una mayor dificultad para que los espermatozoides se movilicen adecuadamente y logren fecundar un óvulo. Además, el efecto a nivel del endometrio puede impedir que se implante un embrión”.

Han trascurrido más de sesenta años y este método para evitar embarazos aún mantiene una serie de mitos y creencias que la profesional devela.

Provocan aumento de peso: Falso. Lo que se ha observado en un grupo de pacientes con algunos tipos de ACO es la aparición de retención de líquidos, sobre todo durante los primeros meses desde su uso. Este efecto se atribuía antes a los ACO cuando se utilizaban dosis altas en las mujeres. Actualmente, se utilizan dosis más bajas lo que ha disminuido las reacciones adversas asociadas a estos fármacos.

Generan cáncer de mamas: Falso. Hasta la fecha no se ha podido establecer una relación directa. Existen estudios que han mostrado un ligero riesgo con su uso y otros no. Faltan más trabajos que determinen si existe o no esta relación. Además, hay que considerar la predisposición que tiene cada mujer frente a este tipo de cáncer y los potenciales efectos que pueden tener estos tratamientos en algún caso en particular.

Su prolongado consumo puede provocar esterilidad: Falso. No existen estudios que demuestren esta relación. Lo que se piensa es que las mujeres que siguen estos tratamientos y luego los dejan para tener hijos, presentan algunos problemas hormonales que eran enmascarados por los anticonceptivos. Además, la edad es un factor importante, en donde la carga ovárica disminuye considerablemente después de los 35 años, edad en que actualmente las mujeres están decidiendo tener hijos.

Reduce la tasa de dismenorrea y dolor de mama: Verdadero. Existen estudios clínicos que concluyen que los ACO son eficaces para el tratamiento de la dismenorrea. Si no se observa eficacia con ACO o no se desea la anticoncepción, se debe considerar utilizar antiinflamatorios no esteroides.  Además, se deben descartar la existencia de patologías ginecológicas que puedan originar episodios de dismenorrea secundaria. Con relación al dolor de mamas, los cambios en los niveles hormonales durante la menstruación pueden causar dolor de mamas. Es normal experimentar una mayor sensibilidad y también inflamación antes del periodo menstrual. Los ACO pueden ayudar a reducir el dolor en las mamas, pero no hay que desconocer que este tipo de dolor también se puede asociar a una reacción adversas al tratamiento con fármacos anticonceptivos.

Los anticonceptivos orales son uno de los métodos más seguros para prevenir el embarazo: Verdadero. Se consideran seguros siempre y cuando se siga al pie de la letra las recomendaciones de su uso, se debe respetar la dosis y cuando se deben tomar. No existe un método anticonceptivo 100 % seguro, estos métodos pueden fallar si no se utilizan adecuadamente, lo que genera fracaso terapéutico.

Anticonceptivos

Se recomiendan para quistes ováricos: Verdadero. En algunos casos puede resultar útil. El médico tratante debe evaluar en cada paciente su utilización y hacer un seguimiento mediante exámenes ecográficos para determinar si el tratamiento fue efectivo o no en un periodo determinado.

Si se olvida de tomar el anticonceptivo oral por uno o dos días, pueden consumirse dos cápsulas juntas y no pasa nada: Falso. El olvido del tratamiento anticonceptivo afecta su eficacia y, por lo tanto, existe el riesgo de un embarazo no deseado. En general, se recomienda, lo antes posible, continuar con la terapia y utilizar métodos anticonceptivos de barrera, como los preservativos, por un periodo de 7 días. El tomar 2 o más comprimidos juntos puede generar reacciones adversas asociados por ejemplo a náuseas y dolor de cabeza. Al existir distintos tipos de tratamientos con ACO, se debe leer bien las instrucciones del proveedor de la terapia y por supuesto consultar al médico tratante.

Cualquier anticonceptivo oral funciona para cualquier mujer. Falso. Existen contraindicaciones para su uso. No todas las mujeres responden de la misma manera a este tipo de tratamiento anticonceptivo. Al tener distintas opciones, se debe elegir el más adecuado para cada mujer considerando siempre, como en todo tratamiento farmacológico, la seguridad y eficacia del ACO. El médico tratante, en base a la edad de la paciente y aspectos relacionados con su estado de salud, si presenta o no enfermedades concomitantes, debe seleccionar el Anticonceptivo más seguro en cada caso. Se han descrito varios tipos de reacciones adversas con el uso de estos fármacos y por lo tanto debemos entender que existen mujeres que pueden presentar una mayor predisposición de experimentar estos efectos, convirtiéndose en riesgoso o simplemente ineficaz para los distintos objetivos como la anticoncepción y tratamientos en donde el uso de los ACO resulta beneficioso.