Viñas del Mar viajó a Nueva Zelanda para conocer el trabajo vitivinícola maorí
La visita se centró en Marlborough, zona que produce el 70% del vino de Nueva Zelanda, así como algunos de los mariscos más emblemáticos y exitosos comercialmente.
El fondo Endowment UNAB 2023 llamó a concurso para la postulación de proyectos de investigación orientados al cuidado de los océanos. En este contexto, el Dr. André Beaujanot de la Facultad de Economía y Negocios, y el Dr. Pete Leihy de la Facultad de Educación y Ciencias Sociales de la Universidad Andrés Bello presentaron y adjudicaron el proyecto «Viñas del Mar: Fomentando una producción de vinos de la costa sustentable en sinergia con la pesca, cultivos marinos, turismo y descentralización» el cual contempla estudios de caso de la región vinícola chilena de Aconcagua, específicamente valle de San Antonio, el emergente desarrollo vitivinícola de Los Lagos, y la experiencia internacional exitosa de la región neozelandesa de Marlborough.
Viñas del Mar explora Nueva Zelanda
En julio y agosto de este año, el Dr. Leihy visitó Marlborough, donde pudo levantar información relevante para el proyecto de investigación. En esta zona se produce el 70% del vino de Nueva Zelanda, así como algunos de los mariscos más emblemáticos y exitosos comercialmente. Durante su visita tuvo la oportunidad de reunirse con dueños de viñedos, comerciantes minoristas de vino, bares y restaurantes urbanos, caletas de pescadores y pequeños emprendedores gastronómicos (picadas). Además del contacto con el ecosistema productivo local, se entrevistó con lideres del sector públicos y del ámbito de la formación e investigación.
El Dr. Leihy destaca entre las prácticas levantadas el desarrollo de nuevos proyectos vitivinícolas liderados por la población maorí, donde se conecta la cultura y tradiciones con la comercialización y comunicación. Llama la atención el uso de los colores, figuras y nomenclaturas originarias para el posicionamiento de sus marcas. También, releva la articulación que existe entre los agentes productivos y el sector público del territorio, logrando una experiencia turística distintiva donde el vino es un actor más de la experiencia, pero no la única. Por último, el investigador destaca la notable adopción de la sustentabilidad por todos los agentes entrevistados, lo que ya forma parte de la función de producción y experiencia del visitante, según indica “la sustentabilidad se vive, no solo se comunica”.
Las buenas prácticas y conocimiento levantando en el estudio de caso de Marlborough permitirá identificar nuevas líneas de trabajo para el equipo de investigación de la UNAB con el fin de apoyar el desarrollo de la industria vitivinícola nacional y en el caso particular de este proyecto, al desarrollo e integración de las viñas costeras en sus territorios.