VI Encuentro CIADE UNAB fortalece estrategias de acompañamiento estudiantil

La VI versión de la jornada Transición a la Educación Superior: Encuentro de Experiencias, organizada por el Centro Integral de Acompañamiento y Desarrollo al Estudiante (CIADE) de la Universidad Andrés Bello (UNAB), reunió a profesionales y académicos de diversas instituciones para intercambiar modelos de acompañamiento, estrategias de inclusión y prácticas que promueven el bienestar estudiantil.

Verónica Águila, directora del CIADE, subrayó la importancia de fortalecer un trabajo colaborativo que trascienda las acciones internas y se sostenga en una red activa con otras universidades que enfrentan desafíos similares.

“Yo rescato la vinculación con las otras instituciones; son vínculos que permanecen, son redes de apoyo, especialmente cuando hablamos de inclusión y de estudiantes en situación de discapacidad. Ver acá personas que trabajan en lo mismo y compartir esa experiencia, yo creo que es la forma de seguir avanzando”, sostuvo.

Águila agregó que estos encuentros permiten contrastar experiencias, ajustar procesos y avanzar hacia formas de acompañamiento más coherentes con la diversidad real del estudiantado.

Desde el ámbito formativo, María Celeste Mora, directora de la Carrera de Derecho sede Santiago, enfatizó que la inclusión no puede entenderse solo como un principio declarado, sino como una práctica que debe permear la docencia, las evaluaciones y la relación cotidiana con los estudiantes.

“Para nosotros es fundamental seguir colaborando. Estas instancias permiten compartir experiencias reales que transforman el quehacer académico y nos recuerdan que el acompañamiento es responsabilidad de toda la comunidad educativa”, acotó.

Entornos que transforman

Durante la jornada, Ximena Rosas, especialista en Acompañamiento y Progresión Estudiantil de la UNAB, dictó la charla magistral “Acompañar la transición, impulsar la transformación”, en la que destacó la importancia de diseñar entornos formativos capaces de responder a la diversidad de experiencias, habilidades y contextos con que ingresan los estudiantes.

“Acompañar a los estudiantes en su transición no significa solo brindarles contenidos académicos, sino también ofrecerles herramientas que fortalezcan su autonomía, resiliencia y capacidad de adaptación”, afirmó.

Agregó que “la transformación educativa requiere repensar los métodos de enseñanza: no basta con transmitir información, es necesario generar espacios donde los jóvenes puedan experimentar, equivocarse y aprender de manera activa”.

La académica subrayó además que la innovación pedagógica es una respuesta urgente a un mundo en constante cambio, que demanda graduados capaces de enfrentar desafíos inéditos con pensamiento crítico y creativo.

En esa línea, invitó a docentes y autoridades a asumir un rol proactivo, señalando que “cada interacción con los estudiantes es una oportunidad para sembrar curiosidad, motivación y confianza; el impacto de ese acompañamiento perdura mucho más allá del aula”.

Modelos y experiencias de acompañamiento estudiantil

La instancia incluyó presentaciones que abordaron modelos de acompañamiento, estrategias de permanencia y respuestas institucionales ante los desafíos de inclusión. La Universidad Diego Portales (UDP) presentó su “Estrategia de Enriquecimiento para la Vida Universitaria”, enfocada en la inserción de estudiantes con discapacidad en contextos académicos y extraacadémicos, a cargo de Ángela Veloso y Felipe Rojas.

Desde la UNAB, Lorenz Carrasco y Emilie Linzmayer compartieron la experiencia “Navegando la Universidad como Persona Neurodivergente”, destacando cómo las instituciones pueden adaptarse a distintos estilos de aprendizaje y necesidades cognitivas.

La Universidad Santo Tomás expuso “El Modelo de Mentoring Inclusivo”, liderado por Juan Pablo Gómez, mostrando cómo el acompañamiento personalizado puede fortalecer la inclusión educativa. Por su parte, la Universidad Técnica Federico Santa María presentó “Inclusión Educativa más allá de las Fronteras del Aula”, a cargo de Alfredo Navarro, reflexionando sobre estrategias integrales que trascienden lo académico.

Finalmente, la UNAB dio a conocer su “Taller de Habilidades para la Vida Universitaria”, coordinado por Rosse Espinoza y Natalia Vargas, un programa que acompaña trayectorias estudiantiles, promoviendo la integración, el bienestar y la permanencia.

Acompañamiento y retención

El impacto del CIADE en el acompañamiento estudiantil se evidencia con fuerza en sus cifras más recientes. A la fecha, más de 4.000 estudiantes han participado en tutorías académicas; cerca de 1.600 se han integrado al Programa de Complemento de Ciencias Básicas; 9.990 han asistido a los talleres de habilidades para la vida universitaria; y 9.242 han sido parte de procesos de mentoría. En total, estas acciones suman 24.826 inscripciones, beneficiando a miles de estudiantes que avanzan con más herramientas, orientación y confianza en su trayectoria universitaria.

Estos resultados confirman el compromiso de la Universidad Andrés Bello con una educación inclusiva y de alta calidad, garantizando que cada estudiante cuente con las herramientas necesarias para desarrollarse plenamente. La institución continúa impulsando estrategias que fortalecen el acompañamiento, el bienestar y el éxito de toda la comunidad universitaria.