UNAB y Fundación Cardoen firman un acuerdo para rescatar el patrimonio histórico del Museo de Colchagua

La Facultad de Educación y Ciencias Sociales (FECS) de la Universidad Andrés Bello (UNAB) y la Fundación Cardoen recientemente firmaron un acuerdo para rescatar y difundir el patrimonio histórico y documental del Museo de Colchagua.

La decana de la FECS UNAB, María Gabriela Huidobro, explicó que la iniciativa surgió de la mano de la directora del Magister en Historia, Solène Bergot, quien ha desarrollado una trayectoria en el ámbito de patrimonio histórico, especialmente pictórico, a partir del cual entró en contacto con la Fundación Cardoen. En tal sentido, indicó:

Desde ahí surgió la oportunidad de conversar acerca de posibilidades para proyectar un trabajo conjunto que se oriente a la conservación del patrimonio de archivo que se conserva en el Museo de Colchagua y que ofrece una oportunidad única para nuestros estudiantes, egresados e investigadores.

Esta alianza entre la FECS UNAB y la Fundación Cardoen también busca contribuir con la valoración social del patrimonio de archivos, mediante la generación de nuevo conocimiento y su difusión en medios digitales y estrategias de promoción cultural. Por lo cual, sostuvo:

Hemos comenzado con un trabajo diagnóstico para catalogar y clasificar la colección de documentos del Museo de Colchagua, que nos permita, a futuro, planificar acciones de investigación y difusión cultural.

Huidobro explicó que este convenio permite a los estudiantes y egresados adquirir y desplegar conocimientos metodológicos de trabajo con fuentes primarias, así como proyectar temas de investigación exploratoria con archivos originales y no trabajados hasta ahora.

En ese sentido, Eduardo Gutiérrez, egresado del Magíster en Historia, compartió su experiencia en el marco del convenio entre la UNAB y la Fundación Cardoen. Ante lo cual, dijo:

Mi labor se enfoca en la revisión y catalogación de los documentos del Museo de Colchagua, lo que implica tanto comprender su contenido como situarlos temporal e históricamente.

Asimismo, Gutiérrez destacó la importancia de la paleografía como principal conocimiento aplicado, necesario para abordar documentos de diversas épocas y escrituras.

Además, resaltó que el tratamiento y organización de los documentos requieren un conocimiento previo sobre el funcionamiento de las instituciones coloniales y republicanas.

La firma de este acuerdo representa un compromiso sólido entre la academia y la preservación del patrimonio, marcando un hito significativo en la historia de la UNAB y su contribución a la cultura y la educación en Chile.