UNAB reconoce el rol clave de estudiantes Tutores y Mentores para acompañar a los alumnos nuevos y activar otros apoyos
En una ceremonia realizada por el Centro Integral de Acompañamiento y Desarrollo al Estudiante (CIADE) se relevó el trabajo de más de 200 estudiantes que realizaron tutorías y mentorías durante 2022. “Dado el éxito, a partir de 2023 el Programa Mentoría-Huella se va a extender a todos los alumnos de primer año de la UNAB”, anunció el Director de Procesos Académicos y Estudiantiles, Ignacio Andrada.
Con el objetivo de reconocer y destacar la labor que realizan los estudiantes que participan del Programa Académico de Tutorías y del Programa Mentoría-Huella, el Centro Integral de Acompañamiento y Desarrollo al Estudiante (CIADE) de Universidad Andrés Bello (UNAB) realizó una ceremonia de cierre año 2022 de ambas iniciativas.
Veronica Aguila Moënne, Directora de CIADE, entidad perteneciente a la Vicerrectoría Académica, relevó el trabajo desarrollado por el equipo de estudiantes que realizó las tutorías y mentorías durante 2022, compuesto por un total de 127 Tutores y 184 Mentores. “El equipo de Mentoría y Tutoría del CIADE cumple un rol central en el proceso de acompañamiento de estudiantes que cursan su primer año en la universidad. Ambos programas representan un aporte significativo a la permanencia y progresión académica de quienes participan de ellos. Como CIADE agradecemos y valoramos profundamente el trabajo comprometido de tutores, tutoras, mentores y mentoras”.
El acto se efectuó la manera virtual con la participación de tutores y mentores de las sedes de Concepción, Viña del Mar y Santiago. Además, estuvieron presentes las siguientes autoridades universitarias: Gerald Pugh, vicerrector de la Sede Viña del Mar; María Teresa Morales, Directora Académica sede Concepción; Ana María Cid, Directora Académica sede Viña del Mar; e Ignacio Andrada, Director de Procesos Académicos y Estudiantiles de la Vicerrectoría Académica.
“Los programas de Tutoría y Mentoría son una parte súper importante de toda nuestra red de apoyo, sobre todo para los alumnos de primer año. Dado que los tutores y mentores son estudiantes, se ha generado un vínculo de confianza distinto al que se podría dar con los profesores o con otros profesionales de UNAB. Además, tutores y mentores son estudiantes elegidos porque representan el espíritu de superación UNAB que queremos reforzar en nuestros alumnos y alumnas, es especial en aquellos que tienen más dificultades”, señaló Andrada.
El Director de Procesos Académicos y Estudiantiles destacó las características de los alumnos y alumnas que se desempeñan como mentores y tutores: “Tienen un perfil especial, están muy motivados, tienen mucha pasión por ayudar a los demás, representan el espíritu de la UNAB y para nosotros son cruciales, porque es a través de ellos podemos conocer mejor a los estudiantes de primer año, saber qué problemas tienen y activar los mecanismos para apoyarlos más”.
Andrada comentó que ambos programas son también una instancia de crecimiento para mentores y tutores, y en ese marco la UNAB está preocupada de guiarlos en su proceso. “Tenemos todo un sistema de acompañamiento, donde están los mentores junior, mentores senior, las y los coordinadores del CIADE; tienen reuniones periódicas y un seguimiento permanente a su labor”.
En relación a los resultados del Programa Académico de Tutorías y del Programa Mentoría-Huella, el Director de Procesos Académicos y Estudiantiles subrayó que los diversos análisis realizados por la universidad demuestran que “comparando alumnos con un perfil similar -(colegio de egreso, puntaje, etc.-, en general, los alumnos que participan de estos apoyos tienen una tasa de retención más alta, de 10%-12% superior a los que no los tienen, es decir, desertan menos”.
Considerando los buenos resultados, señaló Andrada, el programa de mentoría se ha ido ampliando: “Hasta 2021 estaba acotado a ciertas facultades; el año pasado lo ampliamos a todas las facultades, para los alumnos con más dificultades (como un tercio de los alumnos); y dado el éxito del año pasado, a partir de 2023 va a ser para todos los alumnos de primer año, para todos los alumnos nuevos de la UNAB”.
“Una experiencia muy gratificante”
Carla Saldías, estudiante de quinto año de Medicina, ha sido tutora desde su segundo año de carrera, en 2020, y desde el año pasado es también mentora: “En el caso de las tutorías partí de cero, una experiencia completamente nueva, no sabía mucho cómo exponer, pero a medida que fue pasando el tiempo y fui hablando con los chicos me he ido desenvolviendo, y ya me manejo mucho más. He visto mi progreso, me siento más relajada y me ha servido para mi desarrollo personal, para desenvolverme con otras personas”.
“Para mí ha sido muy gratificante, me gusta mucho y es bueno saber que valoran tu esfuerzo de dar las clases”, cuenta Carla.
Explica que las tutorías consisten básicamente en hacer una clase, “muy parecido a un profesor, pero para repasar lo que se vio en clases y reforzar las materias; cada tutor va viendo cómo hace la clase según las materias y el área”.
En el caso de las mentorías, dice, “son mucho más personalizadas, más amenas, hay más contacto con los alumnos de primer año. Las primeras semanas las mentorías son muy importantes porque los estudiantes ingresan sin saber mucho del mundo universitario, no saben moverse en la universidad o a quien preguntar; el mentor es la persona para preguntarle todo. La palabra clave del mentor es acompañar”.
“Ha sido una experiencia linda”, resume la estudiante de Medicina.
En la ceremonia de reconocimiento estuvieron presentes Directores de Escuela, Directores de Carreras y Secretarios Académicos, junto a Directores y Coordinadores de los Departamentos. Asimismo, las y los coordinadoras de CIADE y sus equipos: Natalia Vargas, del Campus Casona de la Sede Santiago; Carmen Dorn y Rosse Espinoza, del Campus República de la Sede Santiago; Pilar Mir, de Campus Creativo y Bellavista de la Sede Santiago; Felipe Campos, de los Campus Antonio Varas y Los Leones de la Sede Santiago; Laura Sáez, de la Sede Viña del Mar; y Marcela Hormazábal, de la Sede Concepción.
“Apoyar la transición a la vida universitaria”
“En ambas instancias, tanto en tutorías como en mentorías, se genera un proceso de acompañamiento para nuestros estudiantes, principalmente de primer año, donde se espera lograr un apoyo para su transición hacia la vida universitaria, también se busca aumentar su empoderamiento en relación con su proceso académico, además fortalecer sus recursos personales para enfrentar los desafíos propios de esta etapa hasta completar los estudios superiores para el logro de su proyecto profesional”, explicó la Laura Sáez.
Asimismo, la coordinadora de CIADE de la Sede Viña del Mar explicó que en ambos programas “se desarrollan habilidades transversales de manera bidireccional con concepto aprender-aprendiendo y se potencian intereses, contribuyendo al desarrollo profesional de todos los estudiantes (tutor-tutorado/mentor-mentorado) en conjunto con apoyo al éxito universitario”.
Sáez se refirió además a la ampliación del Programa Mentoría-Huella, coincidiendo con lo señalado por Ignacio Andrada en relación a los positivos resultados obtenidos hasta ahora. “El programa de mentorías CIADE ha demostrado ser exitoso desde su implementación, por lo tanto, se quiere ampliar a todos los estudiantes nuevos con el objetivo de entregar una estrategia para favorecer la integración y acompañar los desafíos propios de la transición de la educación media a la educación universitaria”.
Durante la jornada se destacó el desafío que implicó para toda la universidad el retorno a la presencialidad y el importante rol que en ese contexto tuvieron los Tutores y Mentores. Todos ellos recibieron un certificado de reconocimiento a la labor realizada durante el año académico 2022.
El programa Académico de Tutorías consiste en una asesoría personalizada y permanente en asignaturas críticas para alumnos de primer año, es particular para ciencias básicas. Las realizan alumnos de cursos superiores (tutor) a grupos pequeños de alumnos, facilitando el aprendizaje y acompañando en el proceso académico.
En tanto, en el Programa Mentoría-Huella los alumnos y alumnas de cursos superiores (mentores) guían en su proceso de incorporación a la vida universitaria a los estudiantes que ingresas a primer año, generando vínculos entre ellos y desarrollando competencias personales y profesionales valoradas en el ámbito laboral. La iniciativa busca, entre otras cosas, que los alumnos y alumnas refuercen el trabajo en equipo, sentido de pertenencia, flexibilidad y capacidad de adaptación, comunicación efectiva, resiliencia, manejo de la frustración, etc.
El CIADE tiene por objetivo acompañar y orientar integralmente a los estudiantes de forma personalizada en los ámbitos académicos, vocacionales y psicoeducativos, favoreciendo su permanencia y progresión académica, reconociendo y valorando su diversidad.