10 Enero 2025

UNAB realizó capacitación en accidentes y primeros auxilios a personal de Fundación Integra Biobío

Sergio Durán, secretario académico de Enfermería, explicó los alcances de esta iniciativa que tiene como objetivo preparar a los equipos en atención de emergencias.

Se estima que el 55% de los accidentes que afectan a los niños pequeños están relacionados con caídas, mientras que cerca del 30% involucran golpes o contusiones.

Por eso, un grupo de académicos de la carrera de Enfermería de la Universidad Andrés Bello, sede Concepción, brindó una capacitación en primeros auxilios al personal de la Fundación Integra Biobío, encabezada por su directora regional, Karina Villarroel.

accidentesLa actividad se realizó el miércoles 8 de enero en el Centro Español de Concepción, y contó con la participación de más de 100 personas provenientes desde Los Ángeles, Concepción y Lebu.

Esta misma capacitación se repetirá de manera online para un mayor número de funcionarios de la Fundación Integra, ampliando así el alcance de la formación.

El secretario académico de enfermería de la UNAB, Sergio Durán Monares, junto con otros docentes de la carrera de Enfermería, Priscilla Inostroza, Evelyn Ramírez y Carolina Amaya, explicaron que la mayoría de estos accidentes ocurren en el hogar.

Aunque también son comunes en establecimientos educativos como salas cunas, jardines infantiles y colegios. Esta formación fue diseñada para preparar al personal en la atención de emergencias.

Cabe recordar que Durán lideró el proyecto «Seguro en mi Jardín», una iniciativa que organizó el 2024 junto a un equipo de Fundación Integra, dirigido por Sonia Aravena, profesional de prevención de riesgos.

“Este proyecto incluyó capacitaciones para los establecimientos de Integra sobre manejo de heridas, traumas, prevención de accidentes, reanimación cardiopulmonar básica», dijo Durán.

Además, uso de desfibriladores externos automáticos y la cadena de supervivencia para niños”, explicó Durán, que recalcó que en 2025 continuará este proyecto.

Accidentes: cómo prevenirlos

Sergio Durán, secretario académico de Enfermería UNAB Concepción, explicó que “las heridas superficiales, como los cortes, son comunes, y aunque las quemaduras ocurren con menor frecuencia, se consideran graves debido a su posible impacto en la salud del niño y la niña, lo que hace fundamental enfocarse en su prevención”.

En ese sentido, explicó que es fundamental observar los espacios donde los niños juegan o realizan actividades cotidianas.

Asegurándose de que estén libres de objetos o estructuras que puedan permitirles trepar o escalar.

“Aunque esto parezca evidente, está comprobado que la altura es una de las principales causas de lesiones graves en caídas».

«Cuanto mayor es la altura, más grave puede ser el accidente”, explicó.

El académico sostuvo que “también es importante eliminar elementos peligrosos como metales, maderas, piedras o desniveles que podrían causar caídas, golpes o pérdida de equilibrio”.

Además, Durán manifestó que los adultos deben supervisar de cerca los juegos bruscos para evitar caídas o contusiones, y en algunos casos, ciertos accidentes son inevitables debido a la edad de los niños.

¿Cómo reaccionar?

Las heridas, a menudo consecuencia de caídas o cortes con objetos peligrosos, requieren atención inmediata.

“Si se presenta una herida y no se tiene acceso a insumos médicos, lo primero es lavar la herida con abundante agua corriente, luego limpiarla con una solución estéril, como suero fisiológico, y cubrirla con una gasa”, explicó Sergio Durán.

Advierte el docente que “si la herida es grave, con sangrado excesivo o un cuerpo extraño incrustado, debe ser evaluada por un profesional médico lo antes posible. No intente retirar el cuerpo extraño por su cuenta».

Accidentes por quemaduras

En cuanto a las quemaduras, Durán recomienda mantener los objetos peligrosos, como hervidores y planchas, fuera del alcance de los niños.

“Los cables deben estar ocultos, y si hay niños cerca de estufas, se deben tomar precauciones adicionales.

«En caso de una quemadura, se debe colocar la zona afectada bajo agua fría, preferiblemente de una fuente directa, durante el tiempo necesario”, sostuvo.

Las ampollas no deben reventarse, y es importante que la quemadura sea evaluada por un profesional de la salud, apuntó Durán.

Durán destacó que, ante cualquier accidente, es crucial mantener la calma para transmitir seguridad a los niños.

“El manejo adecuado de la ansiedad es esencial para que la experiencia no resulte traumática para el niño”, finalizó el académico.