Trabajo Social UNAB contribuye al fortalecimiento de comunidades con las personas mayores

La carrera de Trabajo Social de la Facultad de Educación y Ciencias Sociales (FECS) de la Universidad Andrés Bello (UNAB) presentó los resultados del proyecto de Vinculación con el Medio «Trabajo Social: Fortaleciendo comunidades a través del diálogo con personas mayores», desarrollado por estudiantes y docentes de la asignatura de Práctica de Intervención Social I, con apoyo de la Gobernación del Maipo.

En la iniciativa que dio inicio en agosto de 2023, se llevó a cabo una encuesta dirigida a 94 personas mayores, la cual fue enriquecida con análisis cualitativos mediante la aplicación del método del árbol de problemas.

En ese sentido, la directora de la carrera Trabajo Social, Carmen Rita Lamilla, explicó que estas estrategias metodológicas identificaron áreas críticas que requerían intervención, resaltando particularmente debilitamientos en las redes locales y señalando aspectos relevantes relacionados con el autocuidado y la salud mental.

«Con estos hallazgos, en octubre se desarrolló la propuesta metodológica para la intervención grupal en cuatro comunas: Calera de Tango, Buin, Paine y San Bernardo», agregó Lamilla.

Por su parte, la encargada jurídica de la Delegación Presidencial de la Provincia de Maipo, Marianela Apablaza, señaló que este proyecto no solo es una experiencia académica, sino también una oportunidad para sumergirse en la realidad a menudo invisibilizada de las personas mayores.

«Me parece súper bien que la UNAB propicie esta instancia con áreas directas y específicas donde él o la trabajadora social van a intervenir, incluso en sus primeros trabajos en el aspecto municipal, en organismos no gubernamentales, en establecimientos vocacionales, en varios ámbitos públicos y privados, donde es transversal las personas mayores», dijo Apablaza.

Impacto y resultados

Durante la presentación de resultados, los profesores Jéssica Orrego Contreras y Alexis Carmona Bustamante compartieron sus valiosas perspectivas sobre el impacto y los resultados de las intervenciones realizadas por los estudiantes.

La profesora Orrego Contreras subrayó el aprendizaje intergeneracional y el desafío que implica para los estudiantes involucrarse con un grupo vulnerable, destacando la importancia de prepararse para el envejecimiento de la población.

«Los resultados revelaron la vulnerabilidad física, económica y emocional de la población adulta mayor, resaltando sentimientos de soledad no deseada y el maltrato recibido por la invisibilización de la sociedad», acotó.

Mientras que el profesor Carmona Bustamante, destacó el impacto positivo en las personas mayores, resaltando el sentido de acompañamiento y la oportunidad de aprender sobre comunicación efectiva como miembros de una organización social.

«Ellos pudieron aprender un poco más acerca de la comunicación efectiva, como partes o como miembros de una organización social, y eso tiene un impacto positivo para cada una de las personas que participó en este taller y que valora positivamente el hecho de haber trabajado algunos temas que cotidianamente no trabajan en su organización», precisó.

Ambos profesores coincidieron en la importancia de seguir trabajando en la inclusión de las personas mayores en espacios académicos, destacando el interés y la demanda de esta población por continuar participando activamente en distintas iniciativas.

Aprendizajes y desafíos

Los estudiantes de Trabajo Social de la UNAB subrayaron la diversidad de aprendizajes y desafíos enfrentados durante la intervención con personas mayores, destacando la importancia de la flexibilidad, la comprensión intergeneracional y la preparación para futuras responsabilidades profesionales.

Fernanda Valdeabellano, estudiante de tercer año de Trabajo Social, compartió su experiencia enriquecedora al intervenir en Paine, un lugar apartado donde pudo mejorar la comunicación entre las personas mayores.

«Personalmente, fue muy enriquecedora a nivel personal y profesional. Aprendí a conocer distintos contextos con las personas mayores, siendo gratificante tanto para mí como para ellos», destacó.

La también de tercer año de Trabajo Social, Yulisa Araneda, resaltó la gratitud de enfrentarse a algo completamente nuevo. «El poder relacionarse con estas personas y saber qué hacer con ellas, cómo intervenir, qué necesitan, conocer sus necesidades para poder aplicar lo que nosotros sabemos en ellas, fue un aprendizaje invaluable», compartió.

Finalmente, Benjamín Garrido, alumno de tercer año de Trabajo Social, expresó su comodidad y satisfacción en este primer proceso de práctica.

«A pesar de todas las adversidades, creo que fue un buen trabajo, tanto como personal como de mis compañeros. Estoy ansioso por el próximo año y por la próxima práctica», aseveró.

La UNAB celebra este cierre de proyecto y mantiene su compromiso de seguir fomentando experiencias educativas que inspiren cambios significativos y perdurables en nuestra sociedad.