Tercer Seminario de Buenas Prácticas de VcM evidenció el compromiso de la UNAB con las comunidades y la sociedad civil
A través de este encuentro, académicos y autoridades presentaron valiosos proyectos que han contribuido a impactar significativamente a la comunidad cercana a la U. Andrés Bello. Asimismo, cada iniciativa hace partícipe a los estudiantes y, además, integra dentro de sus acciones los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Con el objetivo de difundir, compartir y presentar buenas prácticas de Vinculación con el Medio (VcM) de la U. Andrés Bello, se desarrolló el Tercer Seminario de Buenas Prácticas. Una actividad en la que académicos de diferentes sedes visualizaron el valor de la academia en las comunidades y la sociedad civil a través de proyectos colaborativos.
Para el director general de Vinculación con el Medio y Sostenibilidad de la U. Andrés Bello, Héctor Hidalgo, el crucial aporte del por qué y para qué se realizan estos proyectos es “porque otorgan la oportunidad de compartir iniciativas y ver justamente para lo que estamos realizando Así aprendemos entre pares con todo lo que se ha logrado”, expresó.
Las iniciativas presentadas corresponden a proyectos sociales que se implementaron en comunidades o instituciones cercanas a las sedes de la U. Andrés Bello y, fueron 100 % financiadas por la Dirección de Vinculación con el Medio de la UNAB.
Esta iniciativa respalda el trabajo efectuado por el área con la academia en conexión con el aprendizaje de los estudiantes, la casa de estudio y los territorios, ya que el objetivo de cada proyecto es solucionar un problema o dificultad a través de acciones emanadas de la docencia e investigación, para generar un impacto positivo en la comunidad a intervenir.
1. “Experiencias positivas de natación en la comunidad”
Este proyecto, a cargo del director de las carreras de Educación Física y Entrenador Deportivo de la sede Concepción de la UNAB, Dr. Humberto Castillo, destaca la importancia de la Vinculación con el Medio en ambas carreras, ya que trabajar en entornos que permitan el acceso a la formación de estudiantes es fundamental para su desarrollo.
Este programa se enfocó enseñar natación a niños de colegios, pero con el tiempo, abordó la importancia de conectar la educación física y el entrenamiento deportivo con problemas de salud más amplios, como la obesidad infantil, a través de proyectos interdisciplinarios y colaboración con el entorno.
De igual modo, se detectó que los infantes tenían malnutrición por exceso estrés en el colegio. Los universitarios que participaron en este proyecto aplicaron pruebas fisiológicas para evaluar mejoras en la capacidad aeróbica de los niños, y se destaca cómo lograron nadar distancias más largas y ganar confianza en sí mismos.
A través de la colaboración interdisciplinaria con campos como la nutrición, psicología y el trabajo social se lograron las mejoras.
Ejemplos de buenas prácticas:
- · Cambios en el enfoque: Inicialmente, los proyectos se centraban en enseñar natación a niños de diferentes colegios. Con el tiempo, se dieron cuenta de la necesidad de abordar problemas más complejos y multidisciplinarios, como la obesidad infantil.
- Enfoque multidisciplinario: Se describe la transición hacia un enfoque multidisciplinario, colaborando con carreras como nutrición, psicología y trabajo social para abordar el problema de la obesidad y el sobrepeso.
- Resultados positivos: Se destaca cómo los niños mejoraron su capacidad en el agua, pasando de flotar por un corto tiempo a nadar distancias más largas, y cómo ganaron confianza en sí mismos.
2. Educación en Alimentación y Nutrición en Agentes Comunitarios de la Quinta región: Experiencias de intervención y trabajo con Colegio Miguel de Unamuno
La secretaria académica de la carrera de Nutrición y Dietética de la sede Viña del Mar de la UNAB, Oriana Monsalve, presentó el proyecto en colaboración con el Colegio Miguel de Unamuno, institución en la cual realizaron una serie de intervenciones para aportar al fortalecimiento educativo de sus estudiantes.
La expositora indicó que este proyecto educativo buscó diseñar e implementar la alimentación y nutrición de niños de séptimo y octavo año básico del colegio Miguel Unamuno para que desarrollaran un estilo de vida saludable.
Etapas del Proyecto:
- Diagnóstico de la situación alimentaria y nutricional en la comunidad.
- Desarrollo y validación de instrumentos.
- Intervención educativa participativa.
- Elaboración de materiales didácticos digitales.
- Presentación formal de proyectos a la comunidad.
Dentro de las problemáticas destacadas se encontraron: baja promoción de estilos de vida saludables, desinformación y falta de instancias de promoción de salud, inclusión de determinantes sociales en la promoción de salud.
Implementación y Actividades:
- Tres intervenciones educativas participativas.
- Enseñanza de selección y preparación de alimentos saludables.
- Uso de herramientas como el marco lógico y la teoría del cambio.
Resultados del Diagnóstico:
- Acceso a ferias y mercados de alimentos frescos.
- Consumo de frutas y verduras varía entre séptimo y octavo básico.
- Consumo insuficiente de legumbres y pescado.
- Importancia del autocultivo y cuidado del medioambiente.
Continuidad del Proyecto:
- Plan de implementación a lo largo del año escolar.
- Objetivo de impactar y cambiar comportamientos alimentarios.
- En línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Conclusiones y Perspectivas:
- Compromiso de los estudiantes con la intervención.
- Interés en bienestar, desórdenes alimenticios, entre otros.
- Continuidad y seguimiento del proyecto en el segundo semestre.
3. Presentación de Proyectos de Impacto Social de la U. Andrés Bello por la Facultad de Ingeniería
La académica, de la Facultad de Ingeniería, Carmen Paz Muñoz, presentó un proyecto interdisciplinario para mejorar la calidad de vida de las comunidades.
Este programa contó con la colaboración de la Fundación Súmate y la Municipalidad de Macul. A través de él se buscó involucrar a jóvenes en riesgo social y jefas de hogar en situaciones de vulnerabilidad. Durante cuatro años, se trabajó en capacitaciones y talleres prácticos relacionados con la construcción y el hogar.
El proyecto contó con varias fases: en un inicio se certificaron jóvenes en oficios de la construcción, pero los resultados iniciales no fueron satisfactorios en términos de impacto. Luego, se trasladó a un formato en línea debido a la pandemia, con resultados desafiantes.
Ejemplos de buenas prácticas:
Asimismo, la expositora resaltó la importancia de tener socios comunitarios comprometidos para el éxito de los proyectos. En la última fase, se trabajó con jefas de hogar, ofreciéndoles capacitación en temas básicos de mantenimiento y electricidad, con el objetivo de empoderarlas y fomentar la igualdad de género.
Este proyecto permitió a los estudiantes ampliar su perspectiva y compromiso social, y valoraron la oportunidad de aplicar conocimientos en situaciones reales. Se mencionó que la colaboración interdisciplinaria y la adaptabilidad son claves para abordar desafíos sociales y generar un impacto positivo en la sociedad.
En la presentación, se destacó la importancia de seleccionar socios colaboradores adecuados y de mantener un alto nivel de compromiso por parte de estudiantes y docentes para lograr resultados exitosos en proyectos de impacto social.
4. Vinculación con el territorio, una experiencia de articulación desde el Trabajo Social
A cargo de la directora de la carrera de Trabajo Social, Rosa Villarroel, se gestó el proyecto “Vinculación con el Territorio, una experiencia de articulación desde el Trabajo Social”, un impulso que buscó establecer lazos con las realidades regionales a través de las inversiones sociales que involucraron a académicos, estudiantes, egresados y actores locales.
Cabe señalar, que este proyecto promovió intervenciones sociales en sintonía con las necesidades y contextos regionales, impulsando colaboración de estudiantes, académicos y actores locales.
En 2020, según comentó en su exposición Villarroel, este trabajo “ha sido una amalgama de colaboración, innovación y empoderamiento”. Cuyo enfoque interdisciplinario audaz, se ha trascendido las fronteras de las aulas tradicionales, involucrando no solo a estudiantes de Trabajo Social, sino también a mentes brillantes de disciplinas tan diversas como Psicología, Medicina Veterinaria, Tecnología Médica y más.
Los estudiantes y académicos han trabajado con los residentes, involucrándose en el proceso de regularización de campamentos y en la generación de iniciativas que promuevan el bienestar comunitario, ha sentado las bases para un impacto sostenible y duradero.
Finalmente, el programa representa los valores esenciales de justicia y equidad y se alinea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) demostrando el compromiso de la universidad con la reducción de desigualdades y la construcción de una sociedad más justa.
Según reportó la expositora, fueron más de 70 los estudiantes que han participado en esta tarea a través de sus prácticas e intervenciones sociales.
Ejemplos de buenas prácticas:
El proyecto “Vinculación con el Territorio, una experiencia de articulación desde el Trabajo Social”, se ejecutó gracias a la U. Andrés Bello, sede Viña del Mar y realizó un enfoque multidisciplinario entre las carreras de: Trabajo Social, Psicología, Medicina Veterinaria, Tecnología Médica, entre otras.
Desde el 2020, este programa ha colaborado con clínicas jurídicas y psicológicas de la UNAB para aportar al desarrollo de sus comunidades.
El proyecto fortalece la formación de estudiantes aplicando conocimientos teóricos y metodológicos en contextos reales.
5. Olimpiadas de Física: 11 años acercando la ciencia a jóvenes y Niños
A cargo del director de Programas de pregrado de la U. Andrés Bello, el Dr. Rodrigo Aros, ha logrado promover la ciencia en jóvenes y niños a través de las Olimpiadas de Física por 20 años. Un proyecto que ha dejado huella en la educación y el desarrollo de cientos de estudiantes chilenos.
Las Olimpiadas de Física, nacieron en la U. Andrés Bello y tienen por objetivo fomentar el estudio de las disciplinas físicas en la comunidad de educación media escolar de todo el país, generando una competencia sana y de colaboración.
Este proyecto comenzó en Concepción y, desde entonces, ha evolucionado y creciendo, estableciéndose como un referente en la promoción de la educación científica. La colaboración entre el Departamento de Ciencias Físicas y la Sociedad Chilena de Física fue un paso crucial en la materialización de las olimpiadas.
Este hito, no solo es una competencia académica; sino un espacio donde los estudiantes desarrollan habilidades, como la resolución de problemas y la comunicación escrita y oral. Los participantes no solo se esfuerzan por alcanzar la excelencia en el ámbito científico, sino que también aprenden la importancia de trabajar en equipo, de respetar las ideas de los demás y de superar desafíos de manera colaborativa.
Un aspecto destacable de las Olimpiadas de Física es su capacidad para unir a estudiantes de diversos contextos y realidades. La competencia no discrimina; es un espacio donde los jóvenes, sin importar su origen socioeconómico, pueden demostrar su talento y pasión por la ciencia.
Además de su impacto en los estudiantes, las Olimpiadas de Física también han ejercido influencia en el sistema educativo chileno. A lo largo de los años, la competencia ha elevado los estándares en ciencias físicas y matemáticas, impulsando un diálogo constructivo con el Ministerio de Educación para elevar la calidad de la enseñanza en estas áreas.
El legado del proyecto se refleja en los participantes de licenciatura en física de la Universidad Andrés Bello. A través de su compromiso en la organización y elaboración de las pruebas, estos estudiantes han adquirido habilidades esenciales para su futuro académico y profesional. La oportunidad de participar en las Olimpiadas de Física
Ejemplos de buenas prácticas:
- Fomenta el estudio de las disciplinas físicas en la educación media escolar del país.
- Incentiva la colaboración entre el Departamento de Ciencias Físicas y la Sociedad Chilena de Física.
- La competencia que reúne a estudiantes de diversos colegios, públicos y privados, fomentando la diversidad.
- Promueve habilidades de resolución de problemas, comunicación escrita y análisis crítico en los participantes.
- Contribuye a elevar los estándares en ciencias físicas y matemáticas en el sistema educativo chileno.
- Espacio de integración que motiva a estudiantes de licenciatura en física a desarrollar habilidades de liderazgo.
- Participación en la organización y elaboración de la prueba, otorga puntaje para becas de posgrado.
- · El legado de las Olimpiadas de Física perdura en la formación de futuros líderes científicos y académicos.
- Proyecto Educativo Transformador: Intervención en Alimentación y Nutrición en Comunidad Escolar
6. KIMMIMTUPEN MAPÜ LAWEN
Guiado por el director de carrera de Química y Farmacia de la sede Concepción UNAB, Mauricio Muñoz, se implementó el proyecto Kimmimtupen Mapu Lawen, una iniciativa que consistió en capacitar farmacológicamente a la comunidad rural de Ralco, en la región del Biobío, Chile.
Este programa tuvo el objetivo de mejorar el manejo de enfermedades prevalentes y prevenir el uso incorrecto de medicamentos en las postas de salud rurales. Los estudiantes que participaron de esta iniciativa desarrollaron materiales educativos como afiches y póster y llevaron a cabo intervenciones directas en el territorio.
Este programa resaltó la importancia de la colaboración entre la universidad y la comunidad, y se espera que abra nuevas oportunidades para futuros proyectos de vinculación con el medio en la zona.
Ejemplo de buenas prácticas:
Capacitación a los trabajadores de la salud en postas rurales para mejorar el manejo farmacológico de enfermedades prevalentes y reducir el riesgo del uso incorrecto de medicamentos.
· Contexto y Territorialidad: Se destaca la ubicación aislada de Ralco en la región del Biobío, lo que dificulta el acceso a servicios de salud y medicamentos. El proyecto se enfoca en capacitar a los profesionales de la salud que trabajan en postas rurales.
Resultados de Aprendizaje: Los estudiantes desarrollaron habilidades para proponer intervenciones de mejora en farmacias asistenciales y para diseñar intervenciones educativas sobre el empleo correcto de medicamentos.
Participación Estudiantil: Estudiantes de quinto año de química y farmacia realizaron intervenciones y capacitaciones en el territorio, contribuyendo activamente al proyecto.
Finalmente, todos estos proyectos, que fueron presentados en el Tercer Seminario de Buenas Prácticas de VcM, se encuentran dentro de los nuevos estándares de acreditación institucional y responden al quehacer educativo que tiene la U. Andrés Bello, y, además, responden al compromiso de vincular, aportar y contribuir al progreso de las comunidades cercanas a la universidad y su bienestar.