SOY UNAB |José Alcántara, el ingeniero civil industrial que lidera el Primer Terminal Extraportuario Austral
El alumni del Programa Advance de la U. Andrés Bello Sede Viña del Mar, tras haber desarrollado una asombrosa carrera durante su paso por la Armada de Chile y posteriormente en UNAB, logró cumplir con distintas funciones relacionadas con el comercio exterior en los puertos de la Región de Valparaíso. En la actualidad se encuentra liderando el primer Terminal Extraportuario Austral en la Región de Magallanes, un proyecto de 15 millones de dólares que busca mejorar la logística del comercio internacional y de todas las exportaciones e importaciones que se realizan en la zona.
Con 16 años José Alcántara ingresó a la Escuela Naval Arturo Prat para ser Oficial de Marina. Tras 12 años en la institución, se retiró con honores y el grado de teniente. Durante su labor, tomó una de las decisiones más relevantes para el puerto de San Antonio y el país: dar la alerta de tsunami en la Región de Valparaíso el 27 de febrero de 2010.
Decidió dejar la carrera que tanto amaba, para darle una nueva dirección a su vida profesional, para ello ingresó a la U. Andrés Bello, Sede Viña del Mar y se tituló en 2013 de Ingeniero Civil Industrial. Carrera a la que posteriormente sumó, mediante una beca, el Máster en Gestión Portuaria y Transporte Intermodal de la Fundación Valenciaport en conjunto con la Universitat de Valencia, para especializarse completamente en el rubro donde hoy marca la diferencia.
Desde entonces se ha desarrollado en empresas e instituciones ligadas al ámbito del comercio exterior, destacando su labor como jefe de unidad de Competitividad en el Puerto de Valparaíso y como, gerente de Terminal en el Puerto Columbo de San Antonio.
Logros que lo llevaron a liderar uno de los desafíos más grandes de su carrera: implementar en la Región de Magallanes el primer Terminal Extraportuario Austral. Un proyecto muy ambicioso donde se desempeña como gerente general. Su propósito es optimizar e incrementar el nivel de importación y exportación en toda la cadena logística de la zona austral del país.
¿Por qué elegiste la U. Andrés Bello para desarrollar tu carrera profesional?
Elegí la U. Andrés Bello porque tiene el Programa Advance. Entré a este programa porque no tenía diferencias con una carrera diurna, ya que tenía las mismas asignaturas que la que se cursan en la modalidad habitual.
Además, lo que me llamó la atención fue que este programa estaba dirigido principalmente a la gestión. Y, para quienes tenemos una carrera, nos permite estudiar una segunda especialidad para crecer más rápido en el ámbito laboral. Este es el plus más importante que tiene el programa Advance, porque estudiar este tipo de profesiones te otorgan herramientas que son aplicables en el área estratégica, industrial o en la gestión, lo que sin duda es valioso y te permite optar a cargos de mayor responsabilidad.
¿Cómo fue tu paso por la universidad?, ¿cómo fue tu época de estudiante?
Éramos un curso relativamente pequeño, con 12 alumnos, por lo que existía un buen ambiente entre nosotros. Nuestra vida universitaria fue acotada, porque el programa era presencial y todos los alumnos teníamos una fuente laboral, pero sí desarrollábamos trabajos grupales, lo que generó vínculos con los compañeros de ese tiempo, aunque nos dediquemos a diferentes áreas de la Ingeniería.
Durante la época de estudiante, ¿hubo algún profesor que recuerdes, que haya influido de forma positiva en el desarrollo de su carrera?
Hubo dos profesores que marcaron bastante mi desarrollo profesional. En términos de gestión uno de ellos es el académico Alejandro Córdoba, a quien recuerdo muy bien, porque fue exigente porque nos sacó el mayor potencial en la asignatura de Ingeniería Económica, lo que fue muy favorable, por eso lo terminamos apreciando como curso, aunque debemos reconocer que fue uno de los ramos más complejos que tuvimos que desarrollar.
El otro docente que recuerdo es Ignacio Andrada, él nos ayudó a tener una visión más allá del desarrollo de la profesión. Nos incentivó a ver el para qué somos profesionales, qué resultados queremos obtener. A ellos dos, los recuerdo con mucho cariño y profesionalismo.
¿Qué realizas actualmente?
Cabe señalar que mi primera carrera fue Oficial de Marina, y paralelamente estudié Ingeniería Civil Industrial en la UNAB. Cuando egresé de mi carrera profesional tomé la decisión de retirarme de las Fuerzas Armadas y empecé a orientar mi carrera hacia el sector del comercio exterior.
Por ello, empecé a potenciar esta área y con mi profesión terminada, tuve la posibilidad de ser becado para estudiar un Magíster en Gestión Portuaria y Transporte Internacional en la Universitat de Valencia en España. Esta fue una gran oportunidad para mí, el haber enmarcado mi carrera hacia el área Industrial, relacionada con el comercio exterior, lo que sin duda contribuyó a trabajar en la empresa que me becó con otras herramientas entregadas.
Estos pasos me permitieron desarrollar mi labor en el Puerto de Valparaíso. Desde un comienzo comencé a trabajar en múltiples áreas, como medioambiente, seguridad y mantenimiento. Posteriormente, desarrollé la labor de auditor interno y luego desarrollé la Unidad de Inteligencia de Negocios. Después, me trasladé al área Extra Portuaria, donde me desempeñé como gerente de terminal de Puerto Columbo, cargo que ejercí durante dos años y me dio la posibilidad de administrar un terminal y poder crear otro en la Región de Magallanes.
Tomé el desafío de dirigir un ambicioso proyecto como gerente general en el extremo sur, lugar donde estoy formando el primer Terminal Extraportuario Austral de Magallanes, ya que no existía este modelo de negocio en la Región. Este proyecto se está realizando desde cero, incluso, ya está funcionando y hoy ya estamos exportando e importando a través del terminal.
Ya somos una zona primaria y contamos con las certificaciones y los permisos de las aduanas de salud y del SAG y Sernapesca, lo que permite que este terminal opere como cualquier sistema extraportuario.
Ver estos avances me hace pensar que se está cambiando un esquema de cómo llevar a cabo el comercio exterior en la Región de Magallanes y que estamos entrando en una sistematización de los procesos de importación y exportación en la zona, además de competir en infraestructura, costos y servicios de calidad en la industria.
Además, este proyecto se caracteriza por tener más metros cuadrados de frigorífico en Chile, hasta ahora no se cuentan con antecedentes que indiquen que hay otro puerto igual para las cargas refrigeradas. Ya que, en Magallanes se exporta mucho producto del mar como salmón y bacalao, proceso que cumple con la normativa exigida.
Nos puedes contar ¿en qué consiste el trabajo de un terminal extraportuario y cuántos existen en el país?
En el país me parece que existen 10 terminales extraportuarios y, con el tiempo, se deberían sumar unos tres o cuatro más. Básicamente, la mayoría se centralizan en Arica y Parinacota, Tarapacá, Ñuble y ahora en la Región de Magallanes, que tendrá lo que tiene todo recinto portuario, pues cualquier puerto necesita un buffer para hacer su proceso de importación y exportación, con todo lo que exige la legislación.
En estas áreas se desarrollan negocios relacionados con el cumplimiento de las funciones de los servicios públicos y que son con inversión privada, las que cuentan con una resolución por parte de Aduanas al ser zona primaria, lo que les permite operar por 20 años, pues tienen un lugar donde pueden desarrollar sus funciones, para ello deben cumplir con lo que la legislación exige en los procesos de importación y exportación. Que es básicamente todo lo que entra y sale del país, considerando las exigencias tributarias y operativas para mover cualquier tipo de carga.
¿Qué herramientas entregadas por la U. Andrés Bello durante tus años de estudio te han servido para desarrollar tu carrera?
Para mí la gestión en el manejo del sector público y privado es fundamental en este tipo de proyectos y es importante tener esa capacidad. Recuerdo que en la universidad teníamos las asignaturas de Recursos Humanos, Manejo Público-Privado, Control de Gestión, Control de Inventario, Control de Costo, las que han sido sumamente útiles en mi profesión.
El desarrollo de procesos es una competencia que, en cargo de gerente general, en el cual debes realizar y supervisar diferentes áreas del terminal, es un aporte que me ha permitido dirigir un proyecto de 15.000.000 de dólares. Y, esa herramienta se formó en mi desarrollo universitario, donde tenía que trabajar con situaciones muy similares a las que vivo hoy. El lograr dirigir un negocio y que un inversionista pueda confiar en ti y en lo que puedas desarrollar es gratificante.
El manejar una proyección de demanda, llevar un control de costos operativos que defina tarifas orientadas a la rentabilidad que dan respaldo a los planes de inversión para conseguir financiamiento con las distintas entidades es muy valioso. Poseer todas estas aptitudes marca mucho la diferencia en mi campo, pues creo que define bastante, siendo estos cargos de confianza, pero esa confianza se termina cuando tus análisis son erróneos y se observan parámetros que pueden sacarte de ese cargo.
Lo más potente que me ha entregado la UNAB en mis estudios ha sido el Control de Gestión, la creación de indicadores, porque siempre ocurre que los inversionistas preguntan ¿cuánto vas a vender este mes? ¿cuántos costos tuviste? ¿cuánto fue el porcentaje de rentabilidad del negocio? ¿cuántos clientes cerraste?, ¿con qué tarifa vamos de aquí al próximo trimestre?, ¿cómo recuperamos la inversión? Si no contara con esta base, no podría lograr todo lo que he hecho en mi vida profesional.
Con todo lo que has realizado durante este tiempo, ¿Qué desafíos son los que te enfrentas en este nuevo proyecto de Magallanes?
Hasta el momento mi desafío más grande ha sido generar confianza. Adquirir la confianza de mi equipo, la de los exportadores e importadores de la Región de Magallanes y presentarles un modelo de negocio que no conocen y que se debe enseñar desde cero.
Mi objetivo hoy es convencer a los clientes con argumentos sólidos, explicarles por qué funciona este proyecto y exponer sus principales características, que son un sistema más ágil y expedito. Asimismo, el profesional encargado es más visible, por lo tanto, más trazable y ese es el desafío más grande que estoy llevando a cabo. En este campo, los negocios no se cierran con palabras, se cierran con acuerdos comerciales, donde se incluye un manual de servicio de cómo funciona el terminal.
La llegada a Magallanes con ese modelo de trabajo, teniendo en cuenta que como región en el país, aún son independientes o regionalistas, lo convierte en un gran desafío, especialmente para que las entidades públicas y privadas confíen en este modelo de negocio y que consideren la experiencia que tenemos en la región central.
¿Cuánto tiempo te proyectas en Magallanes?
Cumplo año en un tiempo más. No obstante, este proyecto tiene una resolución por 20 años y en ese contexto puedo decir que estoy solo con pasajes de ida, no tengo certeza de cuándo vuelva. Ahora estoy a cargo de la primera etapa, que es la de proyección, hoy tenemos 2000 metros cuadrados de frigoríficos y pretendemos abarcar cuatro hectáreas de operación con distintos servicios.
Actualmente, se está proyectando el inversionista y se está analizando la posibilidad de hacer crecer este proyecto, así que, por lo pronto, definir mi proyección es algo muy complejo de definir. Por el momento, solo estoy concentrado que me den los números para que sigan las inversiones y este proyecto siga creciendo.
¿De qué forma consideras que contribuyes a las sociedades desde lo que estás haciendo?
Hoy la mayor contribución que estamos realizando es la generación de más fuentes laborales. Aportar con trabajo y dar a conocer un modelo de comercio exterior que funciona a través de nuevos protocolos abre la posibilidad de trabajar con los servicios públicos y el mundo privado profesionalmente.
Fuera de ello, estamos ampliando los conocimientos del comercio exterior a la comunidad empresarial y general de Magallanes, ya que lo están comprendiendo de otra forma, al conocer que existen más formas logísticas de trasladar sus productos. Ahora pueden ver que existe una forma más asertiva de exportar, que es desde un terminal donde llega su carga, la que luego se almacena en un contenedor y se sella. Con este proceso se puede exportar de buque a buque. Y la empresa, lo envía al puerto que necesita enviar sus productos, ya sea San Antonio o la Región del Ñuble y luego al país que deseen.
¿Cómo se beneficiará el país con un terminal extraportuario en Magallanes?
Al ser este el primer terminal extraportuario de esta categoría mejora las condiciones de fiscalización en los procesos de importación y exportación. Antes todas las operaciones se hacían por la Región de Valparaíso o la Región del Ñuble, y a través de la empresa Portuaria Austral y de una manera distinta.
La apuesta que estamos haciendo con este terminal extraportuario es cumplir con los estándares de la legislación, es decir, estamos al mismo nivel de Valparaíso, entonces el aporte para Magallanes es estar al mismo nivel que la zona central.
Al implementar una infraestructura similar a la Región de Valparaíso, la Región de Magallanes tendrá la oportunidad de mover su carga con un excelente nivel de servicio, donde la visibilidad, trazabilidad de toda la operación logística será respaldada basándose en sistemas, teniendo el mismo nivel que la Región de Valparaíso, que es el puerto que mueve la mayor carga de Chile.