Radio Universidad de Chile | Jaime Fillol: “El deporte nace como un juego y debemos recordarlo siempre”
En una conversación con el programa "Herencia y Coherencia", el ex tenista y director del Instituto del Deporte y Bienestar de UNAB, reflexionó sobre la esencia lúdica del deporte Y la importancia del espacio en el desarrollo infantil.
La leyenda del tenis nacional y director del Instituto del Deporte y Bienestar UNAB, Jaime Fillol, en entrevista con Radio U de Chile, abordó cómo el juego se convierte en arte cuando se vive con alegría y pasión. “Hay una belleza evidente en el deporte. No solo en el movimiento, sino en el desafío, en lo que nos hace sentir: alegría, frustración, cansancio, energía. Todo eso ocurre en un mismo partido”, explicó.
En la conversación, Fillol profundizó en la relación entre los seres humanos y el espacio, destacando cómo desde pequeños aprendemos a reconocer distancias y posiciones, y cómo esa habilidad se desarrolla mejor cuando se respeta el proceso natural de cada niño: “No es intervenir, es dejar hacer. Porque nacemos con esa capacidad, solo hay que darle la oportunidad para que se desarrolle”.
A propósito de la incertidumbre propia del deporte, el ex raqueta número uno de Chile enfatizó que disciplinas como el tenis enseñan a convivir con lo inesperado, pues nunca se sabe la hora exacta de un partido o las condiciones en las que se jugará: “Eso es parte de la vida y del juego, y es fundamental aprenderlo”.
La entrevista también abordó un lado más personal: la paternidad y el profundo significado de ser abuelo. “Quería ser padre, sabía que sería lindo tener una relación con alguien de mi propia sangre”, recordó Fillol. Habló emocionado sobre los nacimientos de sus hijos y sobre cómo la experiencia de ser abuelo le ha permitido mirar la crianza desde otra perspectiva: “Mejor sería ser padre con la mirada del abuelo, porque uno tiene más tiempo para observar y disfrutar a la criatura”.
Sobre su nieto tenista, Nicolás Jarry, Fillol reconoció la alegría que le produce ver a alguien de su familia dedicar su vida al deporte que tanto ama, aunque admitió que le gustaría tener más tiempo para transmitirle su experiencia: “Lo importante es que él sepa que soy su abuelo, y yo darme cuenta de que él es mi nieto. Eso es mucho más valioso que el tenis”.
También reflexionó sobre el sentido del deporte como escuela de vida: “El deporte nos enseña a levantarnos después de cada caída, a valorar el esfuerzo y a encontrar alegría incluso en la dificultad».
Finalmente, envió un mensaje a las nuevas generaciones de tenistas y a los entrenadores: “No olviden que el deporte parte como un juego. No es para ser campeón, ganar dinero o fama, sino para disfrutar, aprender y vivir. En esa alegría está el verdadero objetivo”.
Revisa la entrevista completa aquí: