Por tercer año consecutivo, Escuela de Terapia Ocupacional UNAB colabora en Lollapalooza en inclusión y accesibilidad

Durante el mes de marzo, el Parque Bicentenario de Cerrillos fue testigo una vez más del festival Lollapalooza, uno de los eventos musicales más emblemáticos a nivel mundial.

En esta edición, la Escuela de Terapia Ocupacional de la U. Andrés Bello se destacó por su compromiso con la accesibilidad e inclusión, en colaboración con la productora Lotus y su área de accesibilidad liderada por la terapeuta Ocupacional y alumni, Constanza Allende.

En esta ocasión, se mantuvieron y mejoraron diversos ajustes razonables, como plataformas de visión accesible, áreas de protección frente a la multitud, rutas accesibles para personas en silla de ruedas, pausas sensoriales, baños y mesones adaptados, ejemplificando buenas prácticas para fomentar una cultura inclusiva y el ejercicio del derecho a la participación cultural y de esparcimiento en igualdad de condiciones.

Para este 2024, la carrera renovó su convenio con la productora del evento con el objetivo de llevar a cabo dos acciones relevantes.

Investigación y Lollapalooza

Por un lado, se continuó con un estudio sobre la percepción de la accesibilidad del festival por parte de los asistentes con discapacidad o movilidad reducida, dirigido por académicos de la Escuela de Terapia Ocupacional de la UNAB. Entre los profesionales involucrados se encuentran los terapeutas ocupacionales Constanza Allende, Felipe Zapata y Mauricio Quidel.

Estudiantes de Terapia Ocupacional también participaron en el proyecto, aplicando encuestas a los asistentes con discapacidad o movilidad reducida para recopilar sus opiniones y evaluaciones sobre su experiencia en el festival.

El objetivo principal del estudio es generar una publicación que aporte al cuerpo teórico de la disciplina y que sirva como referencia para futuros eventos masivos musicales.

Voluntariado

Asimismo, participarón 25 estudiantes de Terapia Ocupacional, junto con estudiantes de las carreras de Fonoaudiología y Kinesiología, como voluntarios de accesibilidad e inclusión. Estos voluntarios apoyan el uso adecuado de los ajustes razonables disponibles y ayudan en el desplazamiento de todos los asistentes.

Con el respaldo del Centro de Estudiantes de Terapia Ocupacional (CETO), se logró reclutar a un total de 50 estudiantes voluntarios, quienes mostraron un alto nivel de motivación y compromiso con sus funciones.

Sobre esta colaboración, el director de Terapia Ocupacional UNAB Sede Santiago, Mauricio Quidel, expresó:

Esta colaboración entre la Escuela, la terapeuta ocupacional Constanza Allende y su equipo, contribuye a la formación de futuros terapeutas ocupacionales, fortalece la disciplina y resalta la importancia de crear espacios donde todas las personas puedan acceder y disfrutar sin preocupaciones sobre sus características.