ORGULLO UNAB | Académica se integró al Grupo de Estudio en Historia de Fondecyt
María José Correa, directora del Magíster en Historia y académica del Departamento de Humanidades se integró desde septiembre al Grupo de Estudio de Historia del Fondo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico.
Académica del Departamento de Humanidades y directora del Magíster en Historia de UNAB, María José Correa se ha destacado en su vida profesional y gracias a ese trabajo este año se ha integrado desde septiembre de 2020 al Grupo de Estudio de Historia del Fondo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico (Fondecyt), fondo orientado al desarrollo de la investigación científica y tecnológica en el país. En tanto el grupo de historia corresponde a uno de los 27 comités existentes a la fecha y está integrado por miembros destacados de la comunidad científica. Su tarea es asesorar técnicamente a los Consejos Superiores en la selección de los proyectos que se presentan en los concursos de investigación Fondecyt.
La directora del magíster es doctora en Historia de University College London. Su trabajo se ha orientado a la historia de la medicina y de la ciencia en el siglo XIX e inicios del XX. Es académica en la licenciatura en Historia y en el Magíster en Historia, además integra el claustro de Programa de Doctorado en Teoría Crítica y Sociedad Actual (Tecsa) de UNAB.
Sus publicaciones se han enfocado en temas relacionados con envenenamiento, toxicología y justicia, terapéuticas médicas en el siglo XIX e historia social de las enfermedades mentales.
Entre sus publicaciones destaca su último el libro «Cuando la hipnosis cruzó los Andes. Magnetizadores y taumaturgos entre Buenos Aires y Santiago (1880-1920)» (Ocholibros, 2019).
Actualmente desarrolla un proyecto Fondecyt regular, del cual es investigadora responsable, que investiga la calidad alimentaria en el periodo de la temprana industrialización en Chile (1854-1931). El proyecto propone que las nuevas condiciones de producción y comercialización de los alimentos y bebidas introdujeron tensiones importantes en la sociedad, las que fueron gestionadas, en parte, por las ciencias, particularmente por la higiene, la química y la bacteriología. A partir de esta premisa, estudia la construcción de los criterios de calidad alimentaria explorando cuestiones relacionadas con la gestión de control municipal y las tareas de análisis de los laboratorios, entre otros problemas.
A la hora de hablar de la importancia de ser parte del grupo de estudio de Fondecyt, Correa señala que es relevante y significativa ya que “junto con reconocer el trabajo que uno realiza en términos investigativos, constituye también una valoración de ciertas áreas de la historia, en términos metodológicos y temáticos. En este caso constituye un reconocimiento a la historia de la ciencia y de la medicina, un área que ha crecido bastante en los últimos años, gracias a todos los investigadores e investigadoras que han dado cuenta de la riqueza y necesidad de explorar la conformación de disciplinas científicas, la profesionalización de ciertas labores y saberes, la vinculación de las ciencias con el mercado y los contextos que incidieron en su inserción en el Estado”.
Correa explica que la coyuntura Covid-19 “nos ha recordado, por ejemplo, cómo las enfermedades y epidemias activaron la infraestructura hospitalaria del país y el desarrollo de nuevas políticas sanitarias. En este sentido, esta invitación es un respaldo a esta área de trabajo que hoy no solo es interesante, sino pertinente”.