Las universidades de todo el mundo son parte del esfuerzo urgente para investigar el virus SARS-CoV-2 y la enfermedad que causa el COVID-19, coloquialmente llamado coronavirus, así como contribuir a frenar los efectos de su rápida propagación. En esa línea, académicos e investigadores, analizan y mapean -a diario- los diversos escenarios, se mantienen al tanto de su evolución y comparten información vital, a través de sus distintos centros de estudio.

Héctor Sánchez, Director del Instituto de Salud Pública de la Universidad Andrés Bello (ISP UNAB), Claudia Morales, Decana de la Facultad de Medicina, Mónica Canales, Decana de la Facultad de Enfermería, Dra. Annabella Arredondo epidemióloga y académica del ISP Viña del Mar y Ana María Pavez, Directora General de Comunicaciones, forman parte del Comité Técnico que ha coordinado la respuesta de la UNAB ante el nuevo coronavirus.

Esfuerzo que ha reunido todo el liderazgo y experiencia que la casa de estudios posee en el área de la salud, a fin de mapear el avance del virus SARS-CoV-2 y alinear la respuesta institucional ante la pandemia con las funciones esenciales de la universidad. Objetivos que han mantenido a la institución trabajando de manera conjunta con la Red de Instituciones Formadoras en Salud Pública, la Asociación de Facultades de Medicina de Chile (ASOFAMECH), los colegios profesionales y sociedades científicas como la Sociedad Chilena de Epidemiología (SOCHEPI).

En una sesión de preguntas y respuestas, la Dra. Anabella Arredondo, médica epidemióloga y docente de epidemiología de pre y postgrado de la UNAB con más de 3o años de experiencia en Salud Publica, describe el enfoque de la universidad y cómo el comité de emergencia sigue de cerca la emergencia sanitaria que hoy afecta a Chile y el mundo con vista en la comunidad interna, estudiantes, académicos, colaboradores, comunidad circundante y el país.

­_ ¿Desde lo epidemiológico como han estudiado e investigado el curso de la pandemia? ¿Cómo lo mapean?

_ Hay suficiente información de lo que ocurre a nivel global.  Datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y los análisis que de estos datos realizan instituciones como la Universidad Johns Hopkins y organizaciones de Naciones Unidas. Sin embargo, el problema ha sido la información nacional, debido a que sólo desde el 24 de marzo, las fuentes oficiales se comprometieron a entregar la información diariamente con mayor desglose, es decir, por región, edad, sexo, exámenes totales realizados, hospitalizados y síntomas.

_ ¿Está situación incentivará el interés de investigadores por estos nuevos virus que afectan al mundo y la precaución que se debería tener en cuanto a la apertura de las fronteras?

 _ Siempre ha habido interés por las enfermedades emergentes, especialmente las zoonosis, pues las últimas pandemias y los brotes de SARS y de MERS se han relacionado con fuentes animales para los virus.  El tema de fronteras siempre ha sido discutido, pues hay posturas xenófobas que transfieren las responsabilidades en los extranjeros.  Es cierto que estos brotes o las últimas pandemias han tenido origen en un país, pero lo vimos con la influenza H1N1 y lo estamos viendo con el COVD-19 que las personas se desplazan cada vez más, y los casos importados esta vez correspondieron a nacionales que lo adquirieron en varios países y no a extranjeros residentes.

_ ¿Cuál es el rol que le corresponde a las universidades en contextos como este?

_ Ser un espacio de análisis de la situación global y nacional, apoyar a las autoridades tanto en la toma de decisiones como en la aplicación de las medidas adecuadas a cada etapa de la epidemia.  Como institución tenemos obligaciones con toda la comunidad universitaria, cautelar la salud de nuestra comunidad, ayudarla en las decisiones que deberán implementar, mantener la docencia y el trabajo usando los medios que hoy día brinda la tecnología.

_ ¿La campaña que ha llevado a cabo la UNAB medios sociales responde a esta responsabilidad?

_ Los mensajes en la campaña que está llevando a cabo la UNAB, han priorizado información relativa a cómo prevenir el COVID-19, con mensajes, infografías y videos, cuándo sospechar se sufre de COVID-19, qué hacer al retorno del país, en qué consiste el aislamiento domiciliario (cuarentena). Es decir, el foco ha sido entregar información relevante para aplicar las medidas que se están tomando a nivel nacional.

_ ¿Cuál es el enfoque de UNAB para abordar los desafíos planteados por COVID-19?

­_ Ayudar a que la comunidad universitaria se mantenga sana, mantener la actividad académica, tanto desde la perspectiva de los académicos como de los estudiantes y personas que apoyan este trabajo, difundir y explicar las decisiones que imponga la autoridad sanitaria.

_ ¿Qué es importante que la comunidad UNAB sepa sobre los pasos que está tomando la universidad?

_ Es apropiado que tengan presente que las medidas que se adoptan están considerando todos los escenarios que se van produciendo, y cautelan su vida y la continuidad del estudio y del trabajo.

­_ ¿Cuál es la enseñanza que como sociedad e institución de Educación Superior podríamos sacar de esta situación?

_ Esta es una situación inédita y las instituciones deben ser capaces siempre de dar respuesta a desafíos como este. Es necesario prepararse para pandemias, pues son un fenómeno cada vez más frecuente. Recordemos que sólo en este siglo hemos enfrentado dos pandemias, la de influenza H1N1 entre 2009 y 2010 y la que hoy nos afecta.

_ ¿Qué has aprendido a medida que se desarrolla esta situación?

_ Que la UNAB ha demostrado gran capacidad de análisis y oportuna toma de decisiones, que se han implementado muy rápido, lo que es notable para una institución privada tan grande como es esta Universidad.

_ ¿Existe alguna central de datos donde se pueda adquirir información sobre el curso de la pandemia?

En The Center for Systems Science and Engineering (CSSE) de la Universidad Johns Hopkins se sube diariamente  la información de la OMS por países, incluyendo los casos totales, los recuperados y los fallecidos, con mapas y además lo señalado para cada país. A nivel nacional, es el Ministerio de Salud (MINSAL), quien sube información diaria, respecto a casos acumulados, nuevos, recuperados y fallecidos por región.

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