La Tercera | La difícil realidad escolar de las niñas y niños neurodivergentes
Si bien hay dos leyes que garantizan y promueven la inclusión e integración de estos estudiantes a la educación escolar, en la práctica muchos padres y madres viven un calvario para encontrar un colegio que se adecue a las necesidades de sus hijos. Claudia Figueroa, académica de Fonoaudiología UNAB habla del problema actual.
Pese a que en la actualidad en Chile existen dos leyes que garantizan y promueven la inclusión e integración de estudiantes neurodivergentes a la educación escolar, en la práctica y lamentablemente, muchos padres y madres viven un verdadero calvario para encontrar un colegio que se adecue a las necesidades de sus hijos.
En marzo del 2023 se promulgó en Chile la ley 21.545, conocida como Ley TEA; sin embargo, hasta ahora la piedra de tope es la falta de formación de profesionales en el área en los colegios.
Según Claudia Figueroa León, fonoaudióloga, magíster en desarrollo cognitivo y académica de la Escuela de Fonoaudiología de la Universidad Andrés Bello, “en Chile la Ley 20.845, de acuerdo con sus modificaciones más recientes, cuenta con una clara mirada de inclusión e integración explicitada en la afirmación y requerimiento ‘Integración e inclusión’. El sistema propenderá a eliminar todas las formas de discriminación arbitraria que impidan el aprendizaje y la participación de los y las estudiantes”.
“En este sentido, por tanto, cualquier niño o niña que acceda al sistema escolar, sin importar sus niveles de desempeño actual, debiera poder acceder a un sistema de aprendizaje que le permita el acceso al desarrollo de sus habilidades y competencias de manera gradual hasta el logro de los objetivos curriculares o en su defecto a la adaptación de los mismos, para asegurar su desempeño escolar de manera positiva”, señala Figueroa.