La Tercera | Crisis hospitalaria: ¿se necesitan más recursos o una mejor gestión?
Héctor Sánchez, director ejecutivo del Instituto de Salud Pública de la UNAB, analiza la crisis hospitalaria y la necesidad de mejorar la gestión en salud.
La crisis hospitalaria que enfrenta el país es una de las mayores preocupaciones del sector salud. En una nota para La Tercera, Héctor Sánchez, director ejecutivo del Instituto de Salud Pública de la Universidad Andrés Bello, profundizó en las causas y posibles soluciones a este complejo panorama.
Según Sánchez, uno de los mayores problemas del sistema de salud no radica únicamente en la falta de recursos, sino en la gestión ineficiente de los mismos. “No se trata solo de inyectar más dinero, sino de gestionar mejor los recursos que ya tenemos», afirmó durante la entrevista. Esta reflexión surge en un momento en que la presión sobre los hospitales del país aumenta debido a la sobrecarga de pacientes y a los escasos recursos disponibles para enfrentarlo.
El director del ISP UNAB destacó que los hospitales deben aprender a distribuir de manera más eficiente el personal y las instalaciones. «El problema es la saturación de los hospitales, pero la saturación no es solo un problema de recursos, también lo es de gestión», explicó Sánchez. La clave, según él, está en optimizar las capacidades de los centros de salud y evitar la acumulación innecesaria de pacientes en lugares donde los servicios no pueden cubrir de manera efectiva la demanda.
Cambios en modelos de atención
Si bien reconoció la importancia de la inversión en infraestructura, también señaló que el sistema de salud necesita cambios en sus modelos de atención. “Hay que hacer ajustes en cómo organizamos la atención en los hospitales y cómo logramos que los recursos sean utilizados de forma más adecuada”, agregó.
Para Sánchez, una mejor organización interna y la priorización de los recursos existentes pueden aliviar en parte la crisis hospitalaria, sin necesidad de un incremento drástico del presupuesto. “El desafío está en hacer una reforma integral que considere no solo el dinero, sino también la mejor utilización de lo que ya se tiene”, concluyó.