09 Diciembre 2025

Director de Entrenador Deportivo UNAB es miembro fundador de alianza internacional para elevar calidad de la educación física

El director de Entrenador Deportivo UNAB, Frano Giakoni, manifestó que “esta alianza tiene una parte social muy potente, porque nos permitirá aplicar el QPE en países donde la educación física y las ciencias del deporte simplemente no existen. Ya estamos en conversaciones con naciones africanas y asiáticas que ven en este modelo una oportunidad de desarrollo educativo y comunitario".

En un mundo donde la actividad física enfrenta desafíos urgentes, sedentarismo infantil, brechas de acceso, sistemas educativos que aún relegan el movimiento a un segundo plano, una noticia nacida en el extremo sur del Pacífico promete marcar un antes y un después. Durante la 23rd Biennial Conference de ISCPES, realizada en Auckland, Nueva Zelanda, siete investigadores y actores clave en el campo de la actividad física y el deporte firmaron la creación de la Quality Physical Education Global Network (QPEGN), una alianza que busca elevar la calidad de la educación física a escala mundial.  

Y entre ellos, aparece un chileno: Frano Giakoni Ramírez, director de la carrera de Entrenador Deportivo de la Universidad Andrés Bello (UNAB), quien se convirtió en uno de los miembros fundadores de esta red internacional que une a representantes de cuatro continentes.  

La QPE Global Network nació con una misión clara: promover y asegurar la Educación Física de Calidad (QPE) en escuelas, comunidades y sistemas educativos alrededor del mundo. Su trabajo se basa en el Quality Physical Education Index, un modelo que incorpora ocho factores esenciales para evaluar y mejorar programas formativos, desde la pertinencia curricular hasta la inclusión, la infraestructura y la calidad pedagógica.  

A diferencia de muchas iniciativas que se quedan en el plano teórico, QPEGN unirá investigación, práctica y políticas públicas. Sus fundadores, provenientes de Nueva Zelanda, Estados Unidos, Japón, México, Italia, India y Chile, acompañarán a gobiernos, instituciones y organizaciones en el diseño, evaluación y mejora de sus programas de educación física, con el fin de fomentar hábitos de actividad física y bienestar para toda la vida.  

Pero quizá el elemento más transformador sea su alcancesocial. Giakoni lo resume de esta manera: “Esta alianza tiene una parte social muy potente, porque nos permitirá aplicar el QPE en países donde la educación física y las ciencias del deporte simplemente no existen. Ya estamos en conversaciones con naciones africanas y asiáticas que ven en este modelo una oportunidad de desarrollo educativo y comunitario». 

En muchos territorios del mundo, las clases de educación física siguen siendo inexistentes, improvisadas o profundamente desiguales. La falta de capacitación docente, infraestructura precaria y ausencia de políticas sostenidas generan una brecha que impacta directamente en la salud, el bienestar y el desarrollo cognitivo de millones de niños y jóvenes. Llevar estándares de calidad a esos contextos implica no solo enseñar deporte: implica abrir puertas a experiencias formativas que construyen hábitos saludables, cohesión social y oportunidades futuras.  

La creación de QPEGN es también un reconocimiento a la importancia de repensar la educación física como un derecho y no como una asignatura secundaria. La red aspira a conectar proyectos internacionales, impulsar investigación aplicada, acompañar reformas educativas y formar profesionales capaces de transformar sus comunidades desde la actividad física.  

La presencia de un chileno como fundador no es un detalle simbólico. Es la señal de que el país también puede aportar liderazgo técnico en conversaciones globales donde la evidencia, la innovación y la colaboración internacional son clave. Es, además, una invitación a mirar con más ambición la educación física nacional, sus políticas, sus brechas y sus oportunidades.  

La semilla se plantó en Auckland, pero su impacto podrá sentirse en escuelas de todo el mundo. En un escenario global donde la salud, el bienestar y el movimiento están más amenazados que nunca, esta alianza aparece como un recordatorio poderoso: mejorar la educación física no es solo mejorar una clase; es mejorar la vida misma.