Estudio chileno revela los beneficios de la meditación en estudiantes universitarios
Un estudio dirigido por el académico de la carrera de Tecnología Médica de la U. Andrés Bello, sede Viña del Mar, Ricardo Ramírez Barrantes, reveló los efectos positivos que tiene la meditación en los estudiantes universitarios.
Un grupo de investigadores chilenos quiso responder una pregunta clave: ¿puede la meditación basada en Yoga ayudar a los estudiantes universitarios a manejar el estrés y mejorar su rendimiento mental?
Para averiguarlo, un equipo dirigido por el Dr. Ricardo Ramírez Barrantes, académico de Tecnología Médica de la U. Andrés Bello, sede Viña del Mar, y conformado por académicos y estudiantes de las universidades Andrés Bello, Adolfo Ibáñez y Santo Tomás, realizaron una investigación interuniversitaria con 40 estudiantes, todos entre 18 y 27 años.
Durante dos meses, los participantes practicaron meditación regularmente. Ninguno había meditado antes ni tenía trastornos mentales que impidieran su participación.
El estudio, que fue aprobado por un comité de ética y contó con el consentimiento informado de los estudiantes, arrojó resultados prometedores, que fueron presentados en la Sociedad Chilena de Medicina del Estilo de Vida. Así lo explica el Dr. Ramírez Barrantes, académico de la UNAB y uno de los líderes del estudio.
Menos estrés y ansiedad. “Después de la intervención, los niveles de estrés bajaron significativamente. También disminuyó la ansiedadde estado, esa que sentimos en situaciones específicas como una prueba o una presentación”, detalla el experto.
Más bienestar: “Los estudiantes reportaron sentirse mejor consigo mismos y con su vida en general. Su bienestar psicológico aumentó con una intervención de tan solo un mes”, explica Ramírez-Barrantes.
Mejor atención y memoria: “Aunque no todos los aspectos cognitivos cambiaron, sí mejoró la precisión en tareas de atención sostenida y la capacidad de recordar información a corto plazo, habilidades críticas para el aprendizaje”, dice el académico de la UNAB. Además también mejoraron en tareas meta-atencionales es decir en la capacidad de monitorear sus estados atencionales, habilidad clave para la autorregulación, también esencial en contextos académicos.
Cambios en el cerebro: “Mediante pruebas cerebrales, se observó que la meditación ayudó a mejorar el control atencional, lo que podría mejorar el control de impulsos y la toma de decisiones, activando zonas del cerebro relacionadas con estas funciones”, añade.
Experiencia subjetiva: Los estudiantes también reportaron sus estados mentales mediante la declaración de sus sentimientos y emociones durante todo el tiempo de la intervención, como en el momento tras la práctica. Interesantemente el 60.2% del sentimiento dominante durante el día sin práctica tuvieron connotación negativa, como me siento cansado, ansioso, frustrado, etc… Mientras que el 80% de los mismos presentaban una connotación positiva en los días de práctica, tales como en calma, motivado, esperanzado.
¿Qué significa esto?
Aunque los resultados son preliminares, el estudio sugiere que la meditación puede ser una herramienta poderosa para estudiantes que enfrentan altos niveles de estrés. “Es una práctica sencilla, sin efectos secundarios, que no requiere medicamentos y que puede mejorar tanto el bienestar emocional como algunas funciones mentales clave para el aprendizaje”, explica el investigador, concluyendo que “meditar no solo calma la mente, sino que también puede ayudar a estudiar mejor”.