Emotiva ceremonia marca la entrega del reconocimiento Profesor Honorario 2024 en UNAB
Este año el galardón recayó en Georgina Toro, directora del programa de Especialización en Odontopediatría; Mariano Rocabado, exdecano de la Facultad de Ciencias de la Rehabilitación; Carmen Sandoval, exdirectora de la Escuela de Química y Farmacia; y Carlos Hirschberg, profesor visitante de los programas de Doctorado en Biociencias Moleculares y Doctorado en Biotecnología.
Amigos, familiares, autoridades académicas y estudiantes se reunieron en Campus Casona de Las Condes, de la Universidad Andrés Bello (UNAB), para celebrar a los docentes que fueron reconocidos con el título de Profesor Honorario 2024. Esta es una de las mayores distinciones que cada año entrega la institución desde 1993, con el fin de reconocer a miembros de su cuerpo docente que han contribuido de manera significativa al conocimiento en sus campos de especialización y a la universidad.
En esta ocasión, los galardonados fueron Georgina Toro, directora del programa de Especialización en Odontopediatría; Mariano Rocabado, exdecano de la Facultad de Ciencias de la Rehabilitación; Carmen Sandoval, exdirectora de la Escuela de Química y Farmacia; y Carlos Hirschberg, profesor visitante de los programas de Doctorado en Biociencias Moleculares y Doctorado en Biotecnología.
Iniciando la ceremonia, el rector de la Universidad Andrés Bello, Julio Castro, destacó el lugar que ha alcanzado la UNAB gracias a la trayectoria que los docentes ponen al servicio de la institución:
Hoy somos la universidad más grande del país y una institución de excelencia. Estamos acreditados por 6 años, y aparecimos nuevamente en el último Ranking de Shanghái. Buena parte de lo que somos y hemos conseguido se debe a académicos que han trabajado en esta universidad mucho antes que nosotros.
Le siguió el presidente de la Junta Directiva de la Universidad Andrés Bello, señor Juan Antonio Guzmán, quien destacó las cualidades de los cuatro docentes premiados. “Esta es una distinción que nosotros apreciamos mucho, que se entrega solo a personas que han aportado un gran trabajo, no solo a la institución, sino que muy especialmente a los alumnos, quienes reconocen la calidad humana y profesional de los docentes que hoy distinguimos como Profesor Honorario 2024”.
Cabe destacar que quienes reciben este premio son nominados por la propia comunidad académica de cada Facultad, otorgándole aún mayor valor al reconocimiento. La ceremonia continuó con breves presentaciones realizadas por los decanos y decana de las respectivas Facultades, seguido de la entrega de las condecoraciones y las palabras de agradecimiento de Georgina Toro, Mariano Rocabado, Carmen Sandoval, y Carlos Hirschberg.
Para el vicerrector Académico de UNAB, Dr. Nicolás Bronfman, los cuatro galardonados “han sido un pilar fundamental en el crecimiento de la universidad y en el posicionamiento que hoy ostenta, es muy relevante reconocerlo”. Pero a ello agrega su calidad humana, que fue ampliamente destacada durante la ceremonia. “Es parte del sello de la institución, que ellos han dejado en la universidad y que permanece—la preocupación de nuestro cuerpo docente por el estudiante, por la persona. Quienes hoy fueron distinguidos como Profesor Honorario 2024 son un ejemplo para todos”.
El camino recorrido
La directora del programa de Especialización en Odontopediatría de la Facultad de Odontología de UNAB, Georgina Toro, es cirujano dentista y especialista en Odontopediatría de la Universidad de Chile, donde además obtuvo un Magíster en Educación Superior. A la UNAB llegó el año 2002, como profesora asociada y miembro del equipo fundador de la Facultad de Odontología.
En su presentación, la decana de la Facultad de Odontología, Joyce Huberman, exalumna de la Dra. Toro, la describió como una profesional extraordinaria, “cuya dedicación y pasión por su profesión ha dejado una huella imborrable en nuestra Facultad”.
Tuvo especiales palabras para destacar su trabajo como directora del programa de Especialización en Odontopediatría, al que entregó un sello único mediante la atención sanitaria a niños, niñas y adolescentes con discapacidad.
“En reconocimiento a esa labor fue distinguida internacionalmente como una de las siete líderes mundiales en equidad sanitaria, recibiendo el prestigioso galardón de los premios globales Golizano en reconocimiento al liderazgo en salud de América Latina, el año 2023”, señaló Huberman.
La profesora Toro agradeció el título de Profesor Honorario, recordando el camino recorrido y destacando el trabajo conjunto:
Recibo esta distinción como una muestra de cariño, porque como profesor uno no camina solo, camina de la mano de los estudiantes y de los profesores con los cuales uno va formando equipo. Uno aprende de ellos, se enriquece y se va haciendo más hermosa la misión.
El aprendizaje como actitud de vida
Mariano Rocabado, fundador y exdecano de la Facultad de Ciencias de la Rehabilitación de UNAB, es doctor en Terapia Física de la Universidad San Agustin (EEUU) y especialista en terapia manual ortopédica, del Institute of Health Science Atlanta (EEUU). Su vasta trayectoria y experiencia a nivel mundial le ha permitido ser reconocido como un experto en trastornos cráneo-cérvico-mandibulares y columna vertebral en general.
A la distinguida trayectoria profesional y académica de más de 50 años del Dr. Rocabado, reconocido en Chile y el extranjero, se suma su calidad humana, que fue destacada por el decano de la Facultad de Ciencias de la Rehabilitación, Christian Campos, durante los 11 años en que Mariano Rocabado fue decano:
Fue siempre muy amable, muy receptivo y dando luces del trabajo colaborativo. Y algo que me llamó la atención, él tiene un trato personalizado, muy genuino y sincero. El lado humano, hoy en la academia, va de la mano con el conocimiento y como Universidad es lo que inculcamos en nuestros estudiantes.
Con sentidas palabras de agradecimiento hacia la institución y su familia, Mariano Rocabado aseguró: “El proceso de aprendizaje debemos considerarlo como una actitud de por vida”. Con ello explicó lo que fue su trabajo pionero en la Facultad, con el foco puesto en la modernización del pregrado, y muy especialmente en el innovador desarrollo de programas de educación continua, preparando a expertos en las distintas áreas de la rehabilitación física.
“Formamos, entonces, un verdadero ejemplo académico internacional”, señaló el fundador y exdecano, quien fue fundamental para transformar la Facultad en un centro de postgrado, magíster y diplomado de gran importancia para Chile y Latinoamérica.
Un perfil diferente
Poseedora de una larga y destacada trayectoria, Carmen Sandoval, exdirectora de la Escuela de Química y Farmacia de UNAB, demostró mucha humildad a pesar de ser una distinguida profesional. “Trabajé, sencillamente, orgullosa de mi profesión. Siempre la viví internamente y la proyecté hacia la comunidad. Hice eso que había que hacer: entregar lo que aprendimos a la comunidad”, dijo.
La profesora Sandoval es químico farmacéutico y máster en Educación de la Universidad de Concepción. Obtuvo, además, un máster en Atención Farmacéutica en Farmacia Comunitaria de la Universidad de Valencia y un máster en Seguimiento Farmacoterapéutico en la Universidad de Granada.
En su presentación, el decano de la Facultad de Medicina, Dr. Patricio Burdiles, destacó a Carmen Sandoval por su capacidad de innovar y fortalecer la carrera de Química y Farmacia bajo la mirada moderna del siglo 21. “Esto significa despegar la imagen del boticario, para proyectarlo a las áreas que hoy son parte de su desempeño profesional”.
En todas estas áreas, la profesora Sandoval contribuyó a modernizar la carrera. No solo la creó en la Universidad Andrés Bello, sino que abrió las puertas a profundizar y extender las miradas de la química y farmacia hacia el futuro.
“Estoy muy agradecida de haber pertenecido a esta institución. Qué maravilla, el haber aprendido tanto de la vida y del fármaco, y luego formar farmacéuticos con un perfil diferente, más clínico, más humano”, señaló la profesora Sandoval, destacando que los egresados de esta escuela tienen 99% de empleabilidad.
Un viaje al pasado
“Me siento profundamente honrado de haber recibido este reconocimiento”, señaló el Dr. Carlos Hirschberg desde la ciudad de Boston, EEUU, donde reside desde hace casi 30 años habiendo desarrollado una destacada carrera en prestigiosas instituciones.
Bioquímico de la Universidad de Chile y Doctor en Química de la Universidad de Illinois, realizó un entrenamiento postdoctoral en la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard y en el Instituto de Tecnología de Massachusetts.
En la ceremonia, el decano de la Facultad de Ciencias de la Vida, Felipe Simon, habló acerca de la carrera y los logros –especialmente en el campo de la glicobiología— obtenidos por el profesor Hirschberg, dando cuenta de su estatura como académico y científico, a nivel nacional e internacional.
Lo que nos convoca hoy, más especialmente, es la profunda huella que dejó en nuestra Facultad y en esta universidad, como académico, formador e investigador. El legado de Carlos Hirschberg se siente en las decenas de estudiantes que logró formar.
Por más de una década y hasta el 2022, Carlos Hirschberg fue profesor visitante de los programas de Doctorado en Biociencias Moleculares y Doctorado en Biotecnología de la Facultad de Ciencias de la Vida UNAB. Ya radicado en Estados Unidos, viajaba a Chile para reunirse intensivamente con los alumnos durante dos semanas, donde, cuenta el decano, “los estudiantes y él vivían una experiencia docente única”.
La genialidad del profesor Hirschberg radicaba en que rompía los esquemas, trasladándose 60 años en el pasado. “Elegía los artículos seminales de sus disciplinas, los ladrillos fundamentales, y los discutía con sus estudiantes. Eran viajes a la bioquímica, trasladarse a otra época y así, ladrillo a ladrillo, construir a un científico, que más que información, aprendía a pensar como ser científico”, sostuvo el decano Felipe Simon.
El legado que buscaba dejar a sus estudiantes era muy simple: aprender a pensar científicamente, como los pioneros de la bioquímica, y de esta forma transformarse en excelentes científicos. Al respecto, el profesor Hirschberg dijo:
Mi gran satisfacción fue cuando en la evaluación del curso, estudiantes escribían que al comienzo no entendían por qué tenían que leer papers científicos de más de 60 años de antigüedad, pero que luego entendían que el raciocinio científico no tiene fechas de vencimiento.
El título de Profesor Honorario 2024 no solo celebra la trayectoria y logros de estos distinguidos académicos, sino que también subraya el compromiso de la Universidad Andrés Bello con la excelencia académica, la generación de nuevo conocimiento y su impacto en la sociedad.