09 Septiembre 2024

El Mostrador | Salud sexual: un derecho fundamental

Valeska Morales Quintana, académica de Obstetricia de U. Andrés Bello, sede Concepción, hace una reflexión sobre este tema de importancia para los seres humanos.

Hablar de la salud involucra muchos aspectos. Uno de ellos es lo relativo a la sexualidad de cada persona, que busca su bienestar en varios temas y que son inherentes a su naturaleza.

Por eso, hablar de este tema ya no es un tabú. Hoy en día este asunto va más allá de cuidarse. Valeska Morales, docente de Obstetricia de la UNAB, sede Concepción, afirma que la salud sexual y el bienestar va de la mano de la igualdad de género, los derechos humanos y el acceso a la salud.

La salud sexual no es simplemente la ausencia de enfermedades; es un estado de bienestar físico, emocional, mental y social en relación con la sexualidad.

Esto implica no solo la prevención y tratamiento de enfermedades de transmisiónsalud sexual y la planificación familiar, sino también el derecho a disfrutar de una vida sexual satisfactoria y segura.

El bienestar sexual está íntimamente ligado a la igualdad de género, el respeto por los derechos humanos y la eliminación de la violencia.

Salud: otros aspectos

Una de las áreas cruciales a abordar es la educación sexual integral, esta debe ofrecer un enfoque comprensivo que abarque desde la anatomía y la fisiología hasta las relaciones saludables y el consentimiento.

Además, debe adaptarse a las necesidades de cada grupo etario y cultural.

El acceso a servicios de salud sexual es otro pilar esencial, incluyendo el acceso a métodos anticonceptivos, pruebas y tratamientos para infecciones de transmisión sexual, y apoyo para problemas de salud sexual mental y emocional.

Además, es vital crear un entorno inclusivo y libre de prejuicios, esto es crucial para que todos puedan recibir el apoyo adecuado y vivir una vida sexual plena y saludable.

Es importante destacar la importancia de la salud sexual como un derecho humano fundamental, enfatizar que, a través de la educación, el acceso equitativo y la eliminación del estigma podremos construir un mundo en el que la salud sexual sea verdaderamente accesible para todos.