22 Junio 2022

El Mercurio | “Se normaliza el cierre de la escuela como reacción frente a situaciones ajenas al proceso pedagógico”

Raúl Figueroa, anterior titular de la cartera y hoy director del Instituto de Políticas Públicas de la U. Andrés Bello, se muestra crítico de la resolución del Gobierno. “Creo que lo más complejo es la extensión de las vacaciones, que en la práctica se transforma en una suspensión de clases.

  • Cuestiona extensión de las vacaciones y critica que no se haya optado por clases online para mitigar los efectos de la medida.

Diversas reacciones ha generado la decisión del Ministerio de Educación de adelantar y extender las vacaciones de invierno, ante el alza en los casos de virus respiratorios. Pendiente de la contingencia, Raúl Figueroa, anterior titular de la cartera y hoy director del Instituto de Políticas Públicas de la U. Andrés Bello, se muestra crítico de la resolución del Gobierno. “Creo que lo más complejo es la extensión de las vacaciones, que en la práctica se transforma en una suspensión de clases.

Además, llama mucho la atención que, habiéndose tomado esta medida, se hayan restringido otros medios que permiten, al menos, mitigar sus efectos, como llevar adelante clases a distancia, lo que hace que sea aún más gravosa la situación”, afirma a “El Mercurio”.

—¿ Qué opina de adelantar las vacaciones ante el alza de casos de virus respiratorios?

“El problema de adelantar las vacaciones es que se hizo sin tener en consideración las necesidades de los establecimientos, y generando también, desde ese punto de vista, dificultades en la gestión del proceso académico.

Lo ideal habría sido que, si se iba a tomar esa medida, se hiciera con una mayor coordinación, cuestión que evidentemente no ocurrió”.

—¿ Cómo ve el que no se haya optado por las clases remotas o híbridas?

“Sabiendo que la suspensión de clases genera efectos negativos, lo mínimo que se le puede exigir a la autoridad es que proponga mecanismos para mitigar esos efectos, En este caso, esos existen y los colegios, además, los conocen.

Por lo tanto, no se entiende por qué se optó por impedir las clases a distancia, así como tampoco hay razones suficientes para suspender las actividades”.

—¿ Cree que es una situación que se pudo haber previsto o incluso evitado?

“Desde el punto de vista sanitario, según lo han señalado expertos en la materia, esta situación no solo era predecible, sino que además existen mecanismos para adecuar el sistema sanitario, y ese tendría que haber sido el es principal, en un contexto en que, además, el Presidente de la República tenía un compromiso de quelas escuelas iban a ser lo último en cerrar. Para poder cumplir ese compromiso se requerían esfuerzos en diversos ámbitos, en particular, en lo sanitario. Lo que ha ocurrido es que esos esfuerzos o no se hicieron, o no se consideraron”.

—El ministro Marco Antonio Ávila dijo que este receso les permitiría retomar con fuerza la presencialidad en el segundo semestre. ¿ Cómo valora aquello?

“Hay cierta inconsistencia en esas declaraciones, porque lo que estamos viendo hoy, en la práctica, es que las clases se están suspendiendo. Por lo tanto, ose suspenden o se realizan, pero no podemos decir que se van a hacer “con más fuerza’ las clases presenciales si acaso lo que se da al final es que se están suspendiendo”. Podrían ser los efectos de esta medida en los estudiantes? “Toda la evidencia indica que los esfuerzos deben estar puestos en la recuperación de los aprendizajes y el desarrollo socioemocional de los jóvenes. Esta medida va en una dirección contraria. Además, es preocupante porque se normaliza el cierre de la escuela como una reacción frente a situaciones que son ajenas al proceso pedagógico.

Esa normalización de medidas extremas, que además pueden evitarse si se ponen los esfuerzos adecuadamente, creo que genera una señal equivocada, y que puede tener consecuencias complejas”.

— ¿ Qué medidas habría aplicado usted en esta situación?

“Suspender clases es siempre una medida de última razón; ahora, sino queda ninguna alternativa, creo que es fundamental hacerlo considerando la pertinencia territorial y siempre buscando mecanismos para mitigar los efectos complejos de la suspensión de clases. Habría sido fundamental, primero, determinar en qué territorios era adecuado tomar la medida, y en aquellos donde no hubiese otra alternativa, favorecer las clases telemáticas o mecanismos de presencialidad compatibles con el objetivo sanitario.

—¿ Qué opina sobre el aumento de licencias y ausentismo de profesores en ciertas comunas de la Región Metropolitana?

“Hay aspectos que pueden tener su origen en la circunstancia sanitaria, pero, de nuevo, la medida a tomar no puede ser absoluta, que abarque todo el territorio nacional, si las situaciones complejas se dan en algunos ámbitos muy específicos. Lo fundamental es abordar las soluciones con una mirada territorial y que identifique con claridad las necesidades delas diversas comunidades. Soluciones absolutas, centralizadas, en este momento, creo que no van en la dirección correcta”.

Raúl Figueroa (47 años) lideró el Mineduc desde febrero de 2020 hasta marzo de 2022.

Escrito por Valeska Muñoz