El Mercurio | Incremento de subvención escolar aumentaría ingresos laborales en primeros años en hasta casi 15%
Un estudio de la Universidad Andrés Bello concluyó que un alza de 100 dólares anuales por alumno en la SEP implicaría un aumento de $40 dólares en el ingreso promedio mensual del alumno al incorporarse al mercado laboral formal y aproximadamente $100 dólares mensuales al cabo de 3 y 5 años.
Un estudio realizado por la Universidad Andrés Bello midió el efecto de las subvenciones escolares en los ingresos laborales de sus beneficiarios en los primeros años de incorporación al mercado laboral.
La ley de Subvención Escolar Preferencial (SEP), vigente en Chile desde el año 2008, busca mejorar la calidad y equidad de la educación en los establecimientos educacionales mediante la entrega de recursos a los establecimientos particulares subvencionados o municipales que tengan matriculados a alumnos identificados como prioritarios, es decir, que provengan de familias cuyas condiciones socioeconómicas pueden afectar su rendimiento escolar. Así, para recibir estos recursos, los establecimientos deben suscribir un convenio con el Ministerio de Educación que incluya un plan sobre la utilización de dichos dineros y el impacto esperado.
El análisis del académico de la Facultad de Economía y Negocios de la UNAB, Juan Luis Correa, determinó que un incremento de US$ 100 por estudiante en los recursos anuales de un sistema de subvenciones focalizado como la SEP aumentaría el ingreso inicial promedio de los estudiantes en un 6,1% en comparación al que hubiesen tenido sin el programa. Esto equivale a un alza cercana a US$ 40 mensuales.
Adicionalmente, a los primeros 3 y 5 años de incorporación en el mercado formal del trabajo, este incremento llegaría a un 14,6% y 13,7%, respectivamente, lo que equivaldría a engrosar el ingreso promedio en cerca de US$ 100 mensuales, aproximadamente.
De esta forma, el análisis concluye que dado que, en promedio, los estudiantes de colegios SEP obtienen ingresos inferiores al de aquellos que egresan de colegios subvencionados no SEP, los resultados sugieren que la Subvención Escolar Preferencial permite estrechar la distancia de ingresos entre estos tipos de establecimientos.
Para la realización del estudio se utilizaron datos administrativos de 2,3 millones de estudiantes que completaron cuarto medio de alrededor de 3 mil colegios subvencionados. El informe, a su vez, observó el efecto del programa sobre las diferencias de ingreso entre alumnos del mismo colegio.
Así, se determinó que un aumento de 100 dólares por estudiante en los recursos SEP incrementaría en 0,17, 0,21 y 0,22 puntos el ratio 20/20 –cociente entre el ingreso promedio del 20% de estudiantes de mayores ingresos y el ingreso promedio del 20% de los estudiantes de menores ingresos-del ingreso inicial y en los primeros 3 y 5 años, respectivamente (ver gráfico). Es decir, en el caso de dos alumnos con las mismas características socioeconómicas familiares y del colegio, pero entre un colegio SEP y no SEP, al primer año de egreso, el estudiante SEP tendría un ingreso de $ 607.072 versus $561.205 que tendría un alumno no SEP.
En tanto, a los tres años de egreso, el estudiante SEP obtendría un ingreso promedio de $775.904, y de $805.309 a los cinco años, en contraste con los $681.509 y $705.535 que obtendría un egresado que no recibió la SEP, respectivamente.
Dado que el ingreso promedio del 20% de los estudiantes subvencionados de mayores ingresos es de alrededor de 3 veces el promedio de ingresos del 20% de los estudiantes subvencionados de menores ingresos al interior del colegio, un aumento de 100 dólares anuales de SEP incrementaría la dispersión de entradas en alrededor de 7% entre estudiantes del mismo colegio.
Sin embargo, el informe señala que el grupo de estudiantes que aprovecha mejor la subvención no serían necesariamente aquellos provenientes de familias con mayores ventajas socioeconómicas, puesto que el ingreso laboral del 20% de estudiantes provenientes de grupos con mayores ingresos familiares es solo 1,1 veces las entradas laborales del 20% de estudiantes con menores ingresos familiares.
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