26 Noviembre 2024

El Mercurio | En Chile se usan 44 kilos de plástico de un solo uso por minuto y se recicla poco

Mario Sánchez, investigador y director del diplomado en Economía Circular de la Universidad Andrés Bello, advierte que es urgente regular la producción y uso de plásticos.

En la búsqueda de un tratado mundial contra la contaminación por plástico, esta es “una semana crucial”, según los expertos,

Ayer comenzó en Busan, Corea del Sur, la quinta ronda del Comité Intergubernamental de Negociación sobre Contaminación Plástica de Naciones Unidas.

“Es urgente abordar el tema porque la producción y uso de plásticos se encuentra francamente desregulada”, advierte Mario Sánchez, investigador y director del diplomado en Economía Circular de la U. Andrés Bello.

“En experiencias de laboratorio, por ejemplo, hemos detectado una cantidadplástico impresionante de microplásticos en bebidas, a nivel microscópico. Es un producto que acomoda a todo el mundo () pero no hemos sabido utilizarlo como corresponde”.

Además, el problema radica en la forma de combatirlo. Mientras unos países desean un tratado que limite drásticamente la producción, otros piden objetivos que se centren en el reciclaje y la gestión de los residuos.

Plástico: su uso en Chile

En 2019, el mundo produjo unos 460 millones de toneladas de plástico, una cifra que se duplicó desde 2000, según la OCDE.

Más del 90% del plástico nunca se recicla y más de 20 millones de toneladas acaban cada año en la naturaleza.

A nivel local, las cifras oficiales también preocupan.

La utilización de plásticos de un solo uso (como algunas botellas plásticas, cubiertos, vasos, embalaje de alimento, etc.) en Chile asciende a 44 kilos por minuto, es decir, unas 63,7 toneladas diarias.

En total, se consumen 990 mil toneladas de plástico al año, pero solo el 8,5% se recicla.

“Chile está mal en el manejo de residuos de plásticos”, enfatiza Sánchez.

“No es diferente o peor que otros países más desarrollados. Sin embargo, hay que regular su uso de una manera drástica”, dice.

A su juicio, “el reciclaje soluciona en alguna medida el problema, pero se necesitan incentivos que obliguen a productores y consumidores a usar mayores cantidades de plásticos reciclados y, además, encontrar envases alternativos no contaminantes”.

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