21 Marzo 2024

El Mercurio | El número de nacimientos en el planeta está sufriendo un «dramático» descenso

Según un informe publicado en The Lancet, de un total de 204 países, incluido Chile, un 97% no tendrá tasas de fertilidad mínima para sostener el recambio poblacional en el 2100, lo que tendrá grandes impactos económicos y sociales.

Este drámatico declive en la tasa de fetilidad, pubicado ayer por la revista estadounidense The Lancet, comenzó a hace décadas, pero se ha intensificado durante este siglo.

Una realidad que ya vive más de la mitad de los países, según advierte el informe elaborado por investigadores del Instituto de Métricas y Evaluación de Salud (IHME), de la U. de Washington en Seattle, y financiado por la Fundación Bill & Melinda Gates.

Chile es uno de ellos: la tasa es de 1, 3 hijos por mujer, la menos tasa registrada en su historia y la más baja de la región. Al igual que en países desarrollados, las mujeres han postergado la maternidad para desarrollarse profesionalmente.

Alejandra Araya, directora Doctorado en Ciencia de Enfermería UNAB

En las décadas venideras, se pronostica una reducción adicional en la fertilidad a nivel mundial, con una proyección de 1,8 hijos por mujer para el año 2050 y de 1,6 para el 2100. Para el final del siglo, se anticipa que únicamente seis países (Samoa, Somalia, Tonga, Níger, Chad y Tayikistán) mantendrán tasas de fertilidad superiores a 2,1 nacimientos por mujer.

Alejandra Araya, directora del Doctorado en Ciencias de Enfermería UNAB e investigadora asociada del Instituto Milenio para la Investigación del Cuidado (MICARE), destaca en El Mercurio que la disminución de los nacimientos implica un aumento del envejecimiento de la población.

Seremos países cada vez más envejecidos, incluso con población de 80 y más años, lo que trae muchos desafíos

Al respecto, advierte que ya se está viviendo «una crisis de cuidado de personas mayores» en donde la fragilidad y la soledad asociadas a esta etapa requieren de medidas necesarias para envejecer con una mejor calidad de vida.

Lee la nota completa de El Mercurio a continuación:

 

 

Escrito por Felipe Salazar