El Mercurio | EL «COLCHÓN» ANTE IMPREVISTOS: el perfil de quienes ahorran en Chile
El académico de Finanzas de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad Andrés Bello, Jorge Sabat, destaca la importancia de utilizar instrumentos financieros adecuados para iniciar el ahorro. Menciona que las cuentas de ahorro y los depósitos a plazo son opciones altamente recomendadas debido a su simplicidad.
Un estudio reciente realizado por la fintech Destácame revela que, a pesar de que seis de cada diez personas destinan parte de sus ingresos mensuales a un fondo de emergencia, más de la mitad de ellos no podrían cubrir sus gastos por más de dos meses en caso de quedarse sin empleo. Expertos señalan que esta situación se debe principalmente a la falta de conocimiento financiero y baja educación financiera.
En este contexto, Jorge Sabat, académico de Finanzas de la Facultad de Economía y Negocios de la UNAB, destaca la importancia de utilizar instrumentos financieros adecuados para iniciar el ahorro. Menciona que las cuentas de ahorro y los depósitos a plazo son opciones altamente recomendadas debido a su simplicidad. Estos instrumentos permiten establecer plazos y reglas de renovación para generar un fondo de reserva de emergencia.
Sabat también menciona otros instrumentos de inversión como los fondos mutuos y las acciones, que permiten a las personas mantener su dinero en instituciones financieras mientras generan intereses a través de operaciones con el capital invertido. Sin embargo, advierte que estas opciones conllevan riesgos asociados a los movimientos y decisiones que se tomen, lo cual puede resultar en ganancias o pérdidas según las variables del mercado y el ciclo económico.
En términos generales, los expertos coinciden en la importancia de establecer un presupuesto mensual detallado para tener un mejor conocimiento de los ingresos y gastos. Esto facilitará la identificación de áreas donde se puedan reducir las deudas, consolidarlas y reestructurarlas a largo plazo para aliviar la carga financiera mensual. Asimismo, se enfatiza la necesidad de no incluir ingresos excepcionales en el presupuesto, sino destinarlos directamente al ahorro.