29 Septiembre 2025

El Mercurio de Valparaíso | Carta al Director: Día del Donante

Rocío Zúñiga, académica de Enfermería UNAB, sede Concepción, ponderó diversas cifras en el marco del Día Nacional del Donante de Órganos y Tejidos.

Hace casi 30 años se instauró en Chile el Día Nacional del Donante de Órganos y Tejidos, con el objetivo de sensibilizar a la sociedad sobre la importancia de la donación y motivar a las personas a conversar con sus familias y manifestar su voluntad de donar.

La legislación actual establece que todas las personas mayores de 18 años sondonante tejidos sociedad Chile potenciales donantes, a excepción de aquellos que hayan manifestado expresamente lo contrario mediante una declaración notarial.

Es importante destacar que hoy el registro no es de quienes desean donar, sino de quienes han optado por no hacerlo.

En 2024 se alcanzó la mayor tasa de trasplantes efectivos de forma histórica en nuestro país, permitiendo que 675 personas accedieran a un órgano.

Un llamado a la sociedad

En esta misma fecha, el año pasado, se habían realizado 405 trasplantes; hoy la cifra ha aumentado a 432, lo que representa un avance y abre la esperanza de superar nuevamente el número de trasplantes efectivos.

Sin embargo, la principal dificultad sigue siendo la lista de espera, que supera las dos mil personas.

En este contexto, la academia tiene una responsabilidad fundamental.

Ser donante

Como institución formadora de profesionales integrales con pensamiento crítico, debe contribuir a desmitificar los temores que aún persisten en torno a la donación, especialmente en la formación de futuros profesionales de enfermería.

Es necesario comenzar desde la educación escolar, para que niños y niñas comprendan desde temprana edad qué es la donación y por qué es importante.

Además, es necesario fortalecer la educación a la sociedad de forma general, mejorar la infraestructura hospitalaria, establecer una comunicación efectiva con las familias que atraviesan este proceso, junto con el fortalecimiento de los recursos humanos y financieros.

Solo así podremos ver cambios sostenibles a mediano y largo plazo, aumentar el número de donantes efectivos y reducir la lista de espera.

Cada acción cuenta para convertir esa espera en vida.

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