El ejemplo de una estudiante de Geología UNAB en “Servir con Amor”: Entrega a los desprotegidos en pleno Barrio Puerto de Valparaíso

Carol Solange Figueroa Canales es capitán deportivo costero en navegación en vela y también es estudiante de quinto año de la carrera de Geología de la Universidad Andrés Bello, sede Viña del Mar.

Durante 2024, levantó la iniciativa “Servir con Amor”, agrupación de estudiantes que va en ayuda de las personas en situación de calle y que les entrega alimentos y compañía los días sábado en el Comedor Solidario 421, en Valparaíso.

Asimismo, por medio de este proyecto ha motivado el desarrollo de la responsabilidad social en el estudiantado y la institución, potenciando herramientas como la comunicación, empatía y sensibilidad, a la vez que promueve la formación de estudiantes como agentes de cambio en la sociedad.

Es por ello que esta obra de entrega y servicio le valió el reconocimiento de su casa de estudios con el premio en la Categoría Joven Agente de Cambio de los Premios UNAB, de la Dirección General Desarrollo Estudiantil (DGDE) 2024.

¿Cómo nace en ti participar en la agrupación Servir con Amor? “Durante el 2024 nace la idea de crear la agrupación Servir con Amor en una conversación que tuve junto a la subdirectora de la DGDE de la UNAB, sede Viña del Mar, y mi compañero Matías en la cual estábamos hablando sobre de un tema completamente diferente, ya que era la primera reunión del año en que fui electa presidenta del Centro de Alumnos de la carrera de Geología”.

Recuerda que consultaron sobre la posibilidad de formar una agrupación estudiantil, “ya que en ese período nos estábamos realizando un voluntariado los sábados en el Comedor Solidario 421, en el cual participaban mis hermanas de Veterinaria y Tecnología Médica, una amiga de mi hermana de Tecnología Médica y 3 compañeros de la carrera de Geología”.

Personalmente llevaba 2 años en el voluntariado y quería compartir esta linda experiencia con los alumnos de la UNAB, la cual nació cuando sentí que tenía mucho cariño para entregar y sentí el llamado a servir.

Fue así como retomó mi participación en la Parroquia La Matriz, a donde asistía cuando era pequeña. “Sin embargo, mi familia se mudó a Puerto Williams. Luego regresé a estudiar en la UNAB y desde entonces volver ahí fue como volver a mis raíces”.

A su juicio “servir a los necesitados es un acto que enriquece como persona, todos tenemos algo lindo que entregar. En este sentido, la labor social es algo que se debe compartir y masificar”.

¿A quiénes atienden y cómo funciona Servir con Amor? “Atendemos a gente de la tercera edad, familias y gente en situación de calle principalmente. Realizamos el voluntariado los sábados en el Comedor Solidario 421 de la Matriz. Nos organizamos por nuestro Instagram, @sabadoservirconamor, en donde nos escriben directamente los estudiantes interesados en participar. Les preguntamos en qué tarea les gustaría ayudar, ya que se pueden cumplir distintas labores de acuerdo con lo que se sientan capaces de ayudar”.

El voluntariado consiste en preparar almuerzos, son 250 raciones, para lo cual se puede colaborar picando verduras, lavando bandejas, sirviendo a la gente y limpiando. También recibimos cooperaciones en las campañas para colaborar.

“Además del servicio en sí también compartimos entre nosotros, tomamos el desayuno juntos y conversamos de distintos temas. Durante el año en el que se encuentra vigente la agrupación hemos formado un grupo grande, donde nos hicimos muy cercanos, participamos estudiantes de 7 carreras distintas”, relató.

La agrupación ganó el proyecto Impulsa UNAB (alimentos para el alma) en el cual preparan y entregan 300 desayunos en invierno, los cuales consiste en café, té, leche, jugo, aliados, magdalenas, chocolate caliente, pan con huevo.

“También realizamos una campaña navideña de recolección de regalos y recolectamos regalos para los niños, adultos y ancianos. Todos estaban muy contentos y emocionados por recibir un regalito en estas épocas tan importantes y significativas”, mencionó.

¿Qué significa para ti recibir la distinción como Agente de Cambio?

“Para mí la distinción Agente de Cambio me tomó por sorpresa. La verdad es que hasta el día de hoy me emociona el reconocimiento que me entregaron. Hay cuestiones que valoro más que el desempeño académico y sin duda esta distinción es diferente ya que es un reconocimiento a mi persona, a lo que entrego”.

Carol reconoce que el trabajo social desplegado en el Barrio Puerto de Valparaíso “me hace sentir que estoy haciendo las cosas bien, que estamos motivando a nuestros compañeros a realizar una labor hermosa, que llena el alma y que nos hace ser conscientes de una realidad que algunas veces pasamos por alto. Además, nos hace valorar la vida que tenemos y como profesionales nos permite entregar un granito de arena a la sociedad”.

También me gustaría agradecer a Dios por poner a la gente adecuada en mi camino, a la DGDE, a Esteban y Tanika (quién ha participado con nosotros en el comedor).

¿Cómo se vincula esto a tu formación académica?

“Yo siempre he pensado que un buen profesional debe ser primero una persona consciente y amable con su entorno, lo que se vincula directamente con la formación académica. El voluntariado nos hace ser constantes, responsables y autosuficientes, ya que aprendemos en las labores diarias y a trabajar en equipo, que es una gran dificultad dentro de la formación académica”.

¿Qué rescatas del trabajo realizado, lo aprendido de esta experiencia?

“Rescato la constancia, el compañerismo y la entrega de todos los miembros de la agrupación. Ha sido sin duda una experiencia hermosa. He aprendido que, si bien somos todos muy diferentes, en este sentido la agrupación es laica, todos entregamos lo mismo que nos une como seres humanos: el amor”.