Psicopedagogía: el compromiso social de sostener la educación virtual y fortalecer la formación de las nuevas generaciones
Este año continuará el apoyo a distintas organizaciones y a la comunidad UNAB, un compromiso que fue marcado el 2020 por más de dos mil atenciones psicopedagógicas a niños, niñas y adolescentes, trabajo conjunto entre académicos y estudiantes de universidad.
La llegada de la pandemia al país generó una compleja sobrecarga en las rutinas familiares, tornándose muy difícil para los padres responder a las demandas laborales y a las necesidades académicas de sus hijos, sobre todo en el caso de niños y niñas que presentan dificultades para el aprendizaje. Ante esto, el 2020 se llevó a cabo un proceso de apoyo virtual que consistió en atenciones psicopedagógicas, organizado por la carrera de Psicopedagogía y la Facultad de Educación y Ciencias Sociales.
Para este primer semestre fueron convocados establecimientos educativos, red Sename, e hijos de funcionarios de la UNAB, quienes ya participaban del proceso en 2020 y cuya atención se extenderá hasta mediados de junio, para ser retomada entre agosto y noviembre. Ante la gran demanda de atenciones en el primer semestre, se abrirán nuevos cupos en el mes de agosto.
Sumado a los otros proyectos, en abril se lanza un programa específico de apoyo psicopedagógico denominado Acompañamiento a Estudiantes y Carreras (AES) para cursos superiores de la UNAB.
Este apoyo virtual , pilar a la hora de hablar de educación a distancia, partió en 2020 ante la necesidad de padres y apoderados, y los propios estudiantes, quienes se vieron enfrentados a nuevas formas de educación, en medio de un contexto hostil e incierto.
“Esta realidad interpela a los profesionales de psicopedagogía a concretizar el fuerte compromiso social de su formación UNAB como es ponerse al servicio de aquellos que lo necesitan. Este compromiso reta a los profesionales a analizar las complejas situaciones de aprendizaje y responder con excelencia y una mirada potenciadora. A partir de estos poderosos sellos formativos, la carrera de Psicopedagogía reacciona ante esta demanda, conformando un equipo de académicos de todas sus sedes, que diseña una serie de iniciativas para brindar apoyo psicopedagógico virtual a diferentes instituciones y grupos familiares, entre las cuales, el 37% correspondía a la comunidad UNAB”, explica Magdalena Pizarro Varas, coordinadora de Prácticas.
Carrera Psicopedagogía
El apoyo psicopedagógico virtual fue coordinado por el Centro de Potenciación de Aprendizaje de la carrera de Psicopedagogía, y logró beneficiar a 81 familias que presentaban alguna necesidad de apoyo educativo específico, entre los cuales se encontraban funcionarios y académicos que desempeñan labores en las sedes de Concepción, República, Casona Las Condes y Viña del Mar. Los anterior se materializó en 2.194 atenciones psicopedagógicas entre abril y noviembre del año 2020 a niños, niñas y adolescentes que cursaban desde pre kinder hasta 4° medio.
En la atención psicopedagógica participaron directamente 32 estudiantes de prácticas intermedias y profesionales, 3 docentes y 4 coordinadores de prácticas; así como también, se contó con el apoyo de directoras y académicos de asignaturas de áreas formativas específicas, quienes orientaron en la virtualización de herramientas de evaluación y potenciación psicopedagógica para acotarlos a los requerimientos prioritarios de diferentes grupos etarios y contextos familiares.
Pizarro detalla que el trabajo profesional ejecutado permitió visibilizar la relevancia de la virtualización en el futuro laboral de los psicopedagogos, pero también se fortalece la formación profesional, ya que un 96% de los estudiantes logra un nivel destacado (rendimiento entre 6.0 y 7.0) en procesos de evaluación y potenciación psicopedagógica. Además, a raíz de la experiencia se levantaron conceptos, se destacan estrategias y se genera una multiplicidad de recursos metodológicos que vienen a enriquecer la formación profesional.
“El foco de acción se centró en el desarrollo de habilidades cognitivas, lingüísticas, lectoescritas y de razonamiento matemático que transversalmente incorporaron competencias emocionales y sociales y que, en su conjunto, potenciaron el aprendizaje. Lo anterior, produjo también un impacto en el aprendizaje de los niños y adolescentes participantes, registrándose un 95% de asistencia y un 99% evidencia logros en al menos una de las áreas potenciadas”, indica la coordinadora.
Apoyo a padres y apoderados
El programa de apoyo contemplaba no solo una atención individual a niños y adolescentes, sino también orientación psicopedagógica a los padres, madres y apoderados, destinada a resolver consultas y entregar estrategias para optimizar el aprendizaje en el hogar. “Las opiniones de padres y apoderados, evidenciadas en una encuesta de finalización del apoyo, reflejaron que el 100% considera fundamental el apoyo entregado, destacando el profesionalismo y especificidad de la labor psicopedagógica, la obtención de logros en el aprendizaje de sus hijos, así como también la importancia de recibir apoyo en el ámbito educativo, la vinculación e interacción teñidas por altos niveles de empatía, comprensión. Para los niños y adolescentes, lo más relevante fue el carácter lúdico y dinamismo de las sesiones, pudiendo, además, identificar claramente sus aprendizajes”, agrega Pizarro.
Durante el año 2021 la carrera continuará brindando apoyo psicopedagógico en modalidad online a las familias que son parte de la comunidad UNAB, extendiendo esta atención a estudiantes de establecimientos educativos vulnerables y de organismos colaboradores de la red Sename, así como también a jóvenes de educación superior de la universidad y de otras entidades públicas y privadas, considerando el contexto y la necesidad de realizar este apoyo en la formación de las nuevas generaciones.