Día Mundial del Síndrome de Down | Los beneficios de la actividad física y el deporte para estas personas
Según Claudia Figueroa, académica de la Facultad de Ciencias de la Rehabilitación UNAB, la participación en actividades deportivas permite a las personas con SD interactuar con sus pares, fomentando las relaciones sociales y el sentido de pertenencia.
En el mundo del ejercicio y la actividad física, la inclusión es una pieza clave que a menudo se pasa por alto. Sin embargo, cuando hablamos de personas con Síndrome de Down, la importancia de integrar el ejercicio en sus vidas no solo se vuelve evidente, sino que también se revela como una gran herramienta para su desarrollo físico, cognitivo y emocional.
Sin embargo, según Claudia Figueroa, académica de la Facultad de Ciencias de la Rehabilitación UNAB y especialista en desarrollo cognitivo, lo primero que se debe considerar para estas personas son particularidades, así, los profesionales pueden diseñar programas de ejercicio específicos centrados en fortalecer el sistema cardiovascular, controlar el peso, mejorar la coordinación y desarrollar la fuerza muscular, entre otros objetivos.
El ejercicio también desencadena efectos positivos en el ámbito cognitivo y emocional. De acuerdo con la docente, la actividad física promueve habilidades cognitivas como la memoria, la atención y la planificación, lo que se traduce en un mejor rendimiento académico y una mayor autonomía en la vida diaria.
“Además, al participar en actividades deportivas, las personas con Síndrome de Down tienen la oportunidad de interactuar con sus pares, fomentando así las relaciones sociales y el sentido de pertenencia”, añade.
Por otro lado, a nivel musculoesquelético, el ejercicio puede contrarrestar algunas de las características comunes del Síndrome de Down, como la hiperlaxitud y la disminución del tono muscular. Figueroa indica que, mediante ejercicios específicos, es posible mejorar la coordinación y fortalecer los músculos, lo que contribuye a una mejor postura y un desarrollo óseo más saludable.
En última instancia, la especialista subraya que el deporte y la actividad física va mucho más alla de lo puramente físico:
Sse trata de promover un estilo de vida saludable, fortalecer el bienestar emocional y fomentar la inclusión en la sociedad. Al entender que la actividad física es un derecho de todos, contribuimos a construir una comunidad más equitativa y comprensiva, donde cada persona, independientemente de sus capacidades, tenga la oportunidad de alcanzar su máximo potencial”, concluye.