CONOCE A TU PROFE | La mujer que lidera la Escuela de Kinesiología con 7 años de acreditación nacional e internacional
Con dos décadas en la UNAB, Andrea Riquelme detalla sus logros en lo profesional, sus gustos y metas, pero sobre todo su orgullo y responsabilidad por liderar la Escuela de Kinesiología que cuenta con 7 años de acreditación nacional e internacional.
Andrea Riquelme, directora de la Escuela de Kinesiología de la Facultad de Ciencias de la Rehabilitación de la U. Andrés Bello, sede Viña del Mar, nació en la ciudad de Concepción, pero a muy corta edad, sus padres se mudaron a la Ciudad Jardín.
Comenzando su carrera profesional, estudió Biología. Al terminar, ingresó a Kinesiología, la profesión que sigue desarrollando en la actualidad. Inmediatamente después realizó cursos de postgrado, completando su dedicación como docente y profesional, cursando el Magíster de Cs. Biológicas y el Magíster de Terapia Manual Ortopédica, para luego continuar con el Diplomado de Kinesiología Oncológica.
En su vida personal, disfruta de la compañía de sus tres perritas: su pastora belga Lupe, su bóxer Mika y su maltés Crystal.
¿Cómo y cuándo llegó a la UNAB?
Llegué a la UNAB Viña del Mar, el año 2002 como docente adjunta de las asignaturas Anatomía y Neurofisiología para diferentes carreras de la salud, invitada por el director de carrera de esta época, y 2004 ingresé como docente, al cargo de secretaría Académica de la carrera de Kinesiología. El 2012 tuve la oportunidad de asumir como directora de la carrera en Viña del Mar y, luego en el 2015, de asumir la Dirección de Escuela.
¿Cómo es su relación con los estudiantes?
Es una pregunta compleja y espero que mis estudiantes piensen lo mismo que voy a manifestar. Creo que mi relación es muy buena con ellos y ellas, pues nos basamos en el respeto, la honestidad, la justicia, considerando además la diversidad en el amplio sentido de esta palabra.
¿Cuáles han sido sus máximos logros en lo profesional?
La palabra logros se asocia mucho a éxito, así es que quizá podría señalar algunos hitos que me han permitido sentir que he podido contribuir desde el rol que me ha tocado jugar.
En la actualidad he podido desempeñarme como directora de la Escuela de Kinesiología y junto al equipo, la hemos logrado posicionar de muy buena manera a nivel nacional. Con 7 años de acreditación nacional e internacional y nombrada en el segundo lugar dentro de las carreras de Kinesiología por la Revista América de Economía.
Me ha tocado ser parte del directorio de la Sociedad Científica de Kinesiología Oncológica y este año hemos conseguido el reconocimiento de la especialidad Kinesiología en Oncología, lo que es muy relevante para los procesos actuales que vivimos como profesionales frente a entidades gubernamentales, y esperamos pronto tener a nuestros primeros especialistas en el área.
Tengo la oportunidad, actualmente, de ser parte también del directorio de la Asociación de Sociedades Chilenas de Kinesiología, en la que estamos estableciendo lineamientos para el funcionamiento de estas agrupaciones en beneficio de nuestra profesión.
¿Cuáles son sus planes en lo profesional?
Quisiera poder seguir contribuyendo a nuestra profesión desde lo gremial, la docencia y la gestión académica. Por tanto, estaré siempre dispuesta a ser parte del rol que me permita cumplir este propósito. Me gusta mucho trabajar en gestión académica y particularmente en UNAB, es un espacio grato, donde uno encuentra tremendos amigos y amigas, y a su vez, es un lugar desafiante que te empuja a crear y crecer.
Espero en esta casa de estudios tener la oportunidad de contribuir desde otros lugares en el futuro, poniendo al servicio de la institución la experiencia que he podido alcanzar en estos casi 20 años.
¿Qué le gusta hacer en su tiempo libre?
Disfruto relajarme viendo películas en familia, escuchando música y cantando, sobre todo canciones de los 80. No tengo voz de solista, pero me defiendo en la entonación. Uno de mis sueños que espero cumplir prontamente es realizar un curso de orfebrería. Me encanta construir con mis manos, particularmente crear joyas.
Escrito por Natalia Cabrera