Con emoción se despidió una nueva generación del Diploma en Habilidades Laborales de UNAB

Con sentimientos encontrados, pero todos muy orgullosos del proceso, se despidió una nueva generación del Programa Diploma en Habilidades Laborales de la UNAB, que se destacó por su constancia, el desarrollo de herramientas para ser más autónomos y sus capacidades deportivas.

En un desayuno de camaradería donde el Equipo ProDHL junto a su directora general, M. Theresa von Furstenberg, despidió a los ahora Alumni, no lograron guardar su emoción ante el egreso de 22 jóvenes, que se prepararon en las distintas Especialidades que se ofrecen durante este proceso de formación universitaria: Apoyo a la Función Administrativa, Apoyo a la Producción Gastronómica, Apoyo a la Educación Parvularia, Apoyo a la Función Veterinaria y Apoyo a la Educación Deportiva.

El vicerrector de Vinculación con el Medio y Alumni, Ignacio Guerrero, tuvo palabras para los nuevos egresados diciendo que “como Universidad estamos muy orgullosos de lo que han realizado en estos tres años de estudio y los queremos seguir acompañando, apoyarlos en su búsqueda de empleo y también felicitar al equipo que ha permitido que ustedes egresen y darles las bienvenidas como Alumni”.

En tanto la directora del Programa del Diploma en Habilidades Laborales, María Fernanda Ordenes, no pudo guardar la emoción al ver a sus pupilos dejando la etapa estudiantil. “Ha sido un lindo proceso verlos crecer, mejorar y ser cada día más autónomos. Estamos muy contentos de lo que han logrado, de las buenas prácticas que tuvieron, al punto que uno se quedó trabajando en el lugar”, expresó la directora.

También compartió con los jóvenes Alejandra Ríos, directora del Observatorio para la Inclusión UNAB. “Son la prueba de que cuando hay oportunidades, en las capacidades no hay límites y que nadie les puede decir lo que no pueden hacer y ahora pueden salir a conquistar el mundo”, dijo Ríos.

El agradecimiento de los egresados

Como representantes de sus compañeros, Matías Sauterel, tuvo emotivas palabras. El también deportista dijo que “esperemos que sigan aplicando esta enseñanza a otros estudiantes de las siguientes generaciones para motivarlos a seguir adelante, que nunca se dejen vencer, y nunca se rindan, que tengan esperanza, valor y futuro. Solo recuerden que pase lo que pase, no importa en qué carrera o lugar diferente estemos, siempre seremos los mejores amigos y siempre formaremos parte de esto, porque somos más que grandes amigos, somos familia UNAB”.

En tanto Verónica Díaz, quien llegó hasta el programa desde Republica Dominicana, esta oportunidad de estudio le sirvió incluso, para aceptarse a ella misma. “En mi familia no hay personas con discapacidad y me costó mucho relacionarme y aceptar a mis compañeros, pero con el tiempo los acepté y me acepté a mí también. Me voy a quedar en Chile un tiempo más, para poder trabajar aquí”, dijo la ahora Alumni.