CiperChile | Informalidad laboral: ¿trampa o refugio?
El profesor asociado del Instituto de Políticas Económicas de la Universidad Andrés Bello, Benjamín Villena, explica, en una columna de opinión para el Centro de Investigación Periodística, qué implica el aumento de la informalidad laboral, que, según cifras del INE, se sitúa en 28,1%
Parece habitual que la informalidad sea vista como algo negativo para el mercado laboral. Y los motivos sobran. En primer lugar, los empleos informales no aportan recursos al sistema de seguridad social, y se desarrollan en empresas de baja productividad que usualmente pagan menos y ofrecen condiciones precarias a sus trabajadores.
Sin embargo, el académico e investigador del Instituto de Políticas Económicas de la UNAB, Benjamín Villena, explica, en una columna de opinión escrita para CiperChile, que «un empleo informal muchas veces está más al alcance de una persona desempleada, especialmente cuando es más vulnerable. Por ello, además de considerar si alguien es informal o no, es necesario tener una noción de cuánto tiempo en promedio permanecerá en esta condición».
En ese sentido, afirma que una reciente investigación, a partir de los datos del panel rotativo de la Encuesta Nacional de Empleo, arroja que la duración de la informalidad en Chile tiene una duración media de 16 semanas, y que esa cifra es considerablemente más baja que en Argentina, Brasil y México. «La razón más importante de la baja duración promedio es la transición relativamente alta del desempleo a la informalidad, especialmente antes de octubre de 2019».
Otro antecedente que aporta este texto de opinión es que «si los empleos informales son un refugio temporal del desempleo mientras encuentran mejores puestos de trabajo y posiblemente formales, entonces la reducción de la informalidad debe ser mucho más cauta»; en cambio si «la informalidad es una trampa de la cual es difícil escapar, las políticas públicas deben orientarse a prevenir el ingreso a la informalidad».
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