13 Junio 2025

Centro de Resiliencia a Pandemias de UNAB valora aprobación del primer Acuerdo de Pandemias de la OMS

La Organización Mundial de la Salud aprobó un tratado histórico que busca mejorar la prevención y respuesta ante futuras pandemias. El Centro de Investigación de Resiliencia a Pandemias de la Universidad Andrés Bello destaca su relevancia para Chile y llama a una oportuna ratificación.

Acuerdo de PandemiasLos países que integran la Organización Mundial de la Salud (OMS) aprobaron por unanimidad el pasado 19 de mayo el primer Acuerdo Internacional de Pandemias.  “Este acuerdo representa una oportunidad histórica para construir un mundo más preparado, equitativo y resiliente ante futuras amenazas sanitarias”, sostuvo el director del Centro de Investigación Resiliencia a Pandemias de la Universidad Andrés Bello (UNAB), Dr. Claudio Cabello.

Este tratado, adoptado durante la 78ª Asamblea Mundial de la Salud, busca fortalecer la capacidad global para enfrentar emergencias sanitarias de manera más coordinada, equitativa y efectiva. Al respecto, el Dr. Cabello comentó:

Para Chile, país que ha experimentado los impactos devastadores del COVID-19, este instrumento no es solo una opción, sino una necesidad.

La ministra de Salud, Ximena Aguilera, respaldó firmemente esta iniciativa, señalando que promueve la cooperación efectiva, garantiza el acceso equitativo a vacunas y tratamientos, y fortalece los sistemas sanitarios. “Mejora los mecanismos de vigilancia e incorpora el enfoque ‘Una sola salud’, estableciendo los cimientos de una arquitectura sanitaria más justa y resiliente», explicó.

Llamado a las autoridades chilenas

Desde el Centro de Investigación de Resiliencia a Pandemias (CRP), que opera al alero de la Facultad de Ciencias de la Vida y el Instituto de Salud Pública de UNAB, la Dra. María Paz Bertoglia realizó un llamado a las autoridades nacionales: “Chile debe ser uno de los primeros países en ratificar este Acuerdo, demostrando liderazgo regional en preparación sanitaria”, dijo la investigadora.

Agregó que es esencial comenzar desde ahora la adaptación de los planes nacionales de preparación para pandemias según los estándares descritos en esta alianza. En esta línea, el Dr. Cabello explicó:

Es importante aumentar la inversión en investigación, desarrollo y producción nacional de tecnologías sanitarias, además de liderar iniciativas de cooperación regional en las Américas para la implementación coordinada del Acuerdo.

“El tiempo para actuar es ahora. Como la historia nos ha demostrado repetidamente, las pandemias volverán. La pregunta no es si tendremos una nueva pandemia, sino cuándo. Con este instrumento, tenemos la oportunidad de estar mejor preparados”, enfatizó el investigador.

¿Qué es el Acuerdo de Pandemias?

El Acuerdo de Pandemias de la OMS es un instrumento jurídicamente vinculante que establece un marco integral para la prevención, preparación y respuesta ante futuras pandemias.

Fue desarrollado durante más de tres años de intensas negociaciones tras las lecciones aprendidas en la pandemia de COVID-19.

Elementos centrales del Acuerdo:

  1. Acuerdo de PandemiasPrevención y vigilancia: Establece sistemas robustos de detección temprana y vigilancia epidemiológica, integrando el enfoque «Una Salud» que reconoce la interconexión entre la salud humana, animal y ambiental.
  2. Equidad en el acceso: Garantiza que un 20% de la producción en tiempo real de vacunas, tratamientos y diagnósticos esté disponible para la OMS durante una pandemia, con al menos un 10% como donación, asegurando distribución basada en necesidades de salud pública.
  3. Sistemas de salud resilientes: Fortalece las capacidades nacionales y regionales en investigación, desarrollo y producción de tecnologías sanitarias, especialmente en países en desarrollo.
  4. Coordinación internacional: Establece mecanismos de cooperación global incluyendo la Red Mundial de Cadena de Suministro y Logística y un Mecanismo Financiero Coordinador.
  5. Transferencia de tecnología: Promueve la transferencia de conocimientos, habilidades y tecnologías para fortalecer la producción local de tecnologías sanitarias.