Buscando soluciones con impacto: los proyectos UNAB que se desarrollan con fondos IDeA I+D
Investigadores de la Universidad Andrés Bello se adjudicaron cuatro proyectos en el concurso IDeA I+D del programa FONDEF, con iniciativas que buscan entregar soluciones a problemáticas que impactan la vida de las personas. En dos de ellos, la UNAB es la institución principal.
En la más reciente versión del concurso IDeA de I+D del Fondo de Fomento al Desarrollo Científico y Tecnológico (FONDEF), investigadores de la Universidad Andrés Bello se adjudicaron cuatro proyectos de impacto directo en la calidad de vida de las personas y en el futuro sostenible del planeta. Todos ellos basados en ciencia y tecnología.
Dos de estas iniciativas tienen a UNAB como institución principal y abordan problemáticas del ámbito de la salud. Una es liderada por la directora del Instituto de Tecnología para la Innovación en Salud y Bienestar (ITiSB UNAB), Carla Taramasco y la otra pertenece al profesor investigador de la Facultad de Ciencias de la Vida, Rodolfo Paredes.
Asimismo, UNAB participa como institución asociada en otros dos proyectos que abordan temáticas relevantes para la sociedad, como son la electromovilidad y la crisis hídrica. Esto, a través de los investigadores Luca Tarisciotti, director de la carrera de Ingeniería Civil Eléctrica e investigador del Centro de Transformación Energética (CTE) UNAB y Cristián Duarte, académico investigador de la Facultad de Ciencias de la Vida.
Respecto de estos proyectos, la vicerrectora de Investigación y Doctorado de la Universidad Andrés Bello, Carolina Torrealba, señaló: “Vivimos en un mundo cada vez más presionado por desafíos de gran envergadura, y UNAB ha tomado la responsabilidad de construir conocimiento pertinente y relevante para contribuir a solucionar estos desafíos, para impactar nuestro entorno inmediato”. La vicerrectora además puntualizó:
Cada uno de los proyectos adjudicados tiene inmersa la misión de aportar a la comprensión y solución de los problemas más apremiantes que tiene nuestra sociedad, como lo es generar tecnologías para una salud de calidad y equitativa para la población, la descarbonización de nuestra matriz energética y la generación de fuentes de agua limpia y ambientalmente sostenibles.
Soluciones con impacto en salud
El proyecto que lidera Carla Taramasco, directora del ITiSB, unidad perteneciente a la Facultad de Ingeniería UNAB, consiste en el desarrollo de una plataforma de apoyo diagnóstico para la identificación de enfermedades neurológicas pediátricas de base genética.
La Dra. Taramasco y su equipo elaboran un modelo de machine learning para pronosticar patologías neuropediátricas de base genética, según los signos y síntomas del paciente que sean ingresados a una aplicación móvil y web. Esta plataforma servirá de apoyo a los médicos tratantes en la identificación de la enfermedad, entregando recomendaciones, derivaciones a genetistas clínicos y sugerencias de exámenes para confirmar el diagnóstico.
Las enfermedades poco frecuentes son un grupo heterogéneo y amplio de condiciones que en conjunto afectarían entre un 3,5 a un 8% de la población mundial y se estima que la mayoría de ellas serían causadas por variantes patogénicas en un gen.
“La aparición de complicaciones a futuro puede evitarse y/o retrasarse si se diagnostican y tratan precozmente. Resulta de vital importancia la realización de un diagnóstico molecular, el cual puede evitar otras intervenciones diagnósticas innecesarias, permitir el acceso apropiado a recursos en salud, disminuir la incertidumbre y permitir una consejería genética adecuada a los pacientes y sus familiares”, agrega.
Por su parte, el proyecto del Dr. Rodolfo Paredes, académico investigador de la Facultad de Ciencias de la Vida consiste en el desarrollo de un implante derivado de uretra bovina como dispositivo biomédico para el tratamiento de personas afectadas por la estrechez uretral. “Una patología poco conocida, pero que produce un gran problema en la calidad de vida de las personas”, afirma el profesor.
Se trata de una enfermedad que afecta principalmente a hombres y aunque el diagnóstico es más frecuente en la población mayor a 65 años, la edad de inicio bordea los 45 años. La gran variedad de tratamientos de mínima invasión que actualmente existen requiere de un gran número de procedimientos hasta la resolución definitiva del cuadro, lo que se traduce en costos elevados para la salud pública, y lamentablemente, con un alto porcentaje de recurrencia de la patología. A juicio del Dr. Paredes, esto muestra la necesidad de nuevas estrategias de resolución:
En esta iniciativa planteamos generar dispositivos médicos biodegradables que nos permitan incrementar el diámetro de la uretra, generando una nueva forma de tratamiento permanente y que disminuya las complicaciones asociadas a esta cirugía.
Soluciones con impacto ambiental
En el ámbito de la electromovilidad, el académico investigador del CTE UNAB y director de Ingeniería Civil Industrial, Luca Tarisciotti, participa en el desarrollo de un nuevo cargador rápido transformerless para vehículos eléctricos con capacidad vehicle-to-everything. La institución principal de este proyecto es la USACH.
Asimismo, el profesor investigador del Departamento de Ecología y Biodiversidad de UNAB, Cristian Duarte, trabaja en un proyecto que tiene a la Universidad Técnica Federico Santa María como institución principal. La iniciativa consiste en la evaluación y modelación de impactos ambientales de plantas desalinizadoras por osmosis inversa (ro), además de la entrega de propuestas para minimizar sus impactos.
IDeA de I+D
El concurso IDeA I+D es parte del programa FONDEF de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo, ANID. La convocatoria del 2023 tuvo como fin apoyar con fondos el desarrollo de proyectos de investigación aplicada y de desarrollo tecnológico, que requieran ciclos largos en sus etapas de investigación para la validación de tecnologías a nivel de prototipo a pequeña escala, acorde a la envergadura de su ámbito de aplicación.
Los proyectos desarrollan tecnologías, productos, servicios y/o procesos fundamentados sobre resultados previos, y recibirán un financiamiento máximo de 200 millones de pesos y un plazo de dos años para su avance.