21 Octubre 2024

Barómetro IPP UNAB: Tercer trimestre cierra con una economía estancada y sin indicios de recuperación en el corto plazo

Según un nuevo reporte del Instituto de Políticas Públicas de la Universidad Andrés Bello, el 58,3% de los 24 indicadores que estudia el Barómetro de la Economía Chilena mostró un desempeño positivo en septiembre, mientras que el 41,7% tuvo un comportamiento negativo. Este escenario reflejaría, según el informe, una actividad económica que continúa enfrentando desafíos significativos para recuperar el dinamismo y encaminarse en la senda del crecimiento.

El informe del Barómetro de la Economía Chilena que presenta de manera mensual el Instituto UNAB de Políticas Públicas reportó que, en septiembre, se generaron diez cambios de cuadrantes: cuatro fueron positivos -IMACEC, tasa de créditos hipotecarios, IPSA y tasa de informalidad- y seis negativos -desempleo, deudores morosos, creación de empleos, exportaciones, tasa de ocupación y tasa de créditos de consumo promedio-, situación que revelaría un evidente estancamiento en el desempeño de la economía del país durante tercer trimestre del año.

Así, de los 24 indicadores que componen el Barómetro, el 16,7% se ubicó en el cuadrante más favorable “bien y mejorando”, correspondientes a las remuneraciones reales, el IMACEC, el IPSA y la tasa de informalidad laboral. En tanto, en la zona “bien, pero empeorando” se localizaron el 41,7%, incluyendo a la inflación, la deuda neta del gobierno central, la incertidumbre económica, los deudores morosos, el precio del cobre, la participación laboral, la creación de empleos, el riesgo país, la participación laboral femenina y la tasa promedio de créditos de consumo. Un 8,3% se posicionó en el área “mal, pero mejorando”, dentro de las cuales se encuentran la tasa de créditos hipotecarios y la confianza empresarial. Finalmente, un 33,3% de las variables se localizaron en el peor cuadrante del instrumento “mal y empeorando”, correspondientes al desempleo, la confianza de los consumidores, el dólar, las exportaciones, el saldo en cuentas corrientes y depósitos a plazo, la inversión extranjera directa, la tasa de ocupación y el índice de avisos laborales en internet.

Así, el informe del Instituto UNAB de Políticas Públicas concluyó que el 58,3% de las variables se encuentran en un estado positivo –mejorando o empeorando–, mientras que el 41,7% restante está en un estado negativo.

Revisa el barómetro del mes pasado en este enlace

Evolución de los subíndices

El Índice Económico IPP UNAB no mostró grandes variaciones respecto al mes anterior, manteniéndose en el área positiva y experimentando un aumento de 1 punto porcentual en septiembre. Sin embargo, al analizar los subíndices de expectativas, de los consumidores y de situación macroeconómica, sí se observaron variaciones significativas en septiembre.

El subíndice de expectativas, en primer lugar, alcanzó un valor de 19,3 puntos (+0,1 punto en comparación a agosto). Dentro de él, se produjo un cambio de cuadrante en sentido positivo desde “bien, pero empeorando” a “bien y mejorando”: el IPSA. El indicador alcanzó un valor de 6.351,3 en su apertura el día 12 de septiembre, por encima del promedio del valor los tres meses anteriores, viéndose reforzado además por el recorte de 50 puntos base de la Fed y por el estímulo monetario anunciado por China, haciendo que este llegara a 6.449,9 puntos el 23 de septiembre.

El subíndice de situación de los consumidores fue el que experimentó mayores cambios, contabilizando siete en total: dos positivos y cinco negativos. En septiembre alcanzó los 7,2 puntos porcentuales (-0,5 puntos). Dentro de los movimientos favorables, la tasa de créditos hipotecarios pasó de estar “mal y empeorando” a “mal, pero mejorando”, al anotar un valor promedio en agosto de 4,97%, por debajo del 5,03% en promedio en julio a causa de una caída en las tasas largas en EE. UU. Asimismo, la tasa de informalidad disminuyó a un 27,6%, versus el 28,2% encontrado en el trimestre móvil anterior, por lo que el total de personas ocupadas informales asciende a 2,5 millones, mientras que en el trimestre móvil anterior el total era de 2,6 millones. Así, este indicador pasó de estar “mal y empeorando” a “bien y mejorando”.

En sentido negativo, en tanto, se desenvolvió el desempleo que llegó a un 8,7% -880,3 mil personas desocupadas- y cambió de estar “mal, pero mejorando” a “mal y empeorando”. Luego, la creación de empleos pasó de estar “bien y mejorando” a “bien, pero empeorando”, debido a que el total de empleos creados fue de 228,8 mil, por debajo del promedio de los trimestres móviles anteriores (305 mil) y por debajo aun controlando por fuerza laboral. La tasa de ocupación, por su parte, pasó de “bien, pero empeorando” a “mal y empeorando” al llegar a un 56,5%, aunque el cambio no resulta ser significativo respecto a la tasa del trimestre móvil anterior (56,9%). Desde el área “bien y mejorando” al sector “bien, pero empeorando” se movilizaron los deudores morosos a causa de un aumento de 20 mil personas que se consideran dentro de esta categoría. Por último, la tasa de créditos de consumo promedio ponderado alcanzó un 18%, por lo que pasó de ubicarse en “bien y mejorando” a “bien, pero empeorando”.

El subíndice de situación macroeconómica, por último, experimentó un aumento de 4,4 puntos porcentuales al pasar de un valor de -2,3 puntos en agosto a 2,2 puntos en septiembre, ascenso impulsado por dos cambios: en sentido positivo se movió el IMACEC -que pasó de “bien, pero empeorando” a “bien y mejorando”-, mientras que las exportaciones lo hicieron en dirección negativa -desde “bien y mejorando” a “mal y empeorando”-.

El IMACEC, en primer lugar, alcanzó una variación anual de 4,2% y pasó de “mal y empeorando” a “bien y mejorando”. Este cambio favorable se produjo por una variación positiva en la producción de bienes (3,4%), en la industria manufacturera (7,8%), en el comercio (4,9%) y en los servicios (5,3%), aunque estas cifras deben tomarse con cautela debido a que la variación del promedio móvil a tres meses del IMACEC desestacionalizado es de -0,4%.

Luego, las exportaciones presentaron un cambio negativo -de “bien y mejorando” a “mal y empeorando”- al pasar de un valor de 8.344 millones de dólares a 8.012 millones, lo que controlando por CPI, lleva una variación interanual de -1,2% en el total de exportaciones

Conclusiones

Para el mes de septiembre, el informe del Instituto de Políticas Públicas de la Universidad Andrés Bello refleja nuevamente un panorama negativo para la economía nacional, confirmando su estancamiento al cierre del tercer trimestre de 2024 y poniendo en duda la capacidad de recuperación de la misma en el corto plazo.

A modo de síntesis, Gonzalo Valdés, subdirector del Instituto UNAB de Políticas Públicas, concluye que “el Índice Económico IPP UNAB muestra un estancamiento económico consistente con el bajo crecimiento proyecto por el Banco Central para la próxima década, de solo un 1,8%. Por lo mismo, llama la atención la recientemente anunciada expansión del gasto público de 2,7%”.

En esa línea, el subdirector del IPP UNAB comenta, tras el anuncio gubernamental del presupuesto 2025, que “esta expansión será financiada con deuda, con el inevitable aumento del endeudamiento del Estado y el creciente gasto en el servicio de la deuda. En 1990 el servicio de la deuda representaba el 6,6% del gasto público y después de 20 años el país logró bajar ese gasto a solo 1,3%. Sin embargo, el año pasado llegamos a 7,3% del gasto, casi el doble de lo gastado en la Policía de Investigaciones. Urge pensar en reducir y optimizar el gasto público, especialmente teniendo en cuenta que las tasas a las que se endeudaba el país han subido”.

 

Informe completo en este enlace