26 Septiembre 2023

Barómetro IPP UNAB: La economía chilena se consolida en terreno positivo, aunque con variables del mercado laboral en retroceso

Un nuevo informe del Instituto de Políticas Públicas de la Universidad Andrés Bello concluyó que la situación de la economía se encuentra en su mejor estado desde enero de 2021 según las mediciones del Barómetro de la Economía Chilena. Destaca, sin embargo, que la tasa de desempleo y la creación de empleo se encuentran “Mal y Empeorando”, reflejando la difícil situación dentro del mercado laboral en cuanto a la correspondencia entre los puestos de empleo disponibles y las personas que se encuentran buscando trabajo.

El último reporte del Barómetro de la Economía Chilena del Instituto UNAB de Políticas Públicas reveló que, para el mes de septiembre, 7 de los 20 indicadores que lo componen tuvieron cambios de cuadrante, donde 4 fueron negativos y 3 positivos. De esta manera, el cuadrante más positivo del Barómetro “bien y mejorando” concentró el 40% (8) de las variables – una variable más que la versión anterior – reuniendo a las remuneraciones reales, la incertidumbre económica, la tasa promedio de créditos hipotecarios, la participación laboral, el spread soberano, el IPSA, la brecha de participación laboral de género y la inversión extranjera directa.

Dentro de otra área que muestra variables mejorando aunque en un estado negativo, correspondiente al cuadrante “mal, pero mejorando”, se concentra el 30% de las variables – 5% menos que en la versión de agosto – correspondientes a la inflación, el IMACEC, la confianza empresarial, la confianza de los consumidores, las exportaciones y el saldo en cuentas corrientes y depósitos a plazo.

Por otra parte, un 15% de los indicadores se posicionó en el área “bien, pero empeorando”, aumentando en una la cantidad de variables en esta área respecto a la versión anterior y concentrando a la deuda neta del gobierno central, los deudores morosos y el precio del cobre. Por último, el 15% restante de las variables se ubicó en la zona “mal y empeorando”, correspondientes a la tasa de desempleo, la creación de empleos y el valor del dólar.

Movimientos de septiembre

Siete variables tuvieron algún cambio de cuadrante para la nueva versión del Barómetro, correspondientes a la tasa de desempleo, los deudores morosos, el precio del cobre, la creación de empleo, la participación laboral, las exportaciones y la inversión extranjera directa.

Cambios negativos

Entre los cambios negativos, primero se destaca el cambio de la tasa de desempleo, que pasó de “mal, peor mejorando” a “mal y empeorando” debido a un aumento desde 8,5% en el trimestre móvil abril-mayo-junio a 8,8% en el trimestre móvil actual. Luego, la cantidad de personas deudoras morosas reportada por la CMF también tuvo un cambio negativo, pasando de “bien y mejorando” a “bien, pero empeorando”, debido a un aumento entre mayo y junio de 15,7 mil personas en deuda morosa. De todas formas, si se compara la cantidad de personas morosas entre junio 2023 y junio 2019 (pre pandemia), existe una disminución de 16% en este porcentaje, por tanto, estas cifras se mantienen aún en un estado positivo al tomar como referencia los valores históricos de la serie.

El precio del cobre pasó de “bien y mejorando” a “bien, pero empeorando” debido a una caída del precio publicado por el Banco Central en comparación con el promedio de los 3 meses previos, que alcanzó los US$4,77 la libra, esto en línea con las constantes caídas de su precio en respuesta a las cifras negativas de la economía china. Si bien hubo un repunte de su precio debido a la reacción por la cifra positiva de inflación en China, esta mejora en el desempeño se revirtió durante el día siguiente.

La creación de empleo también tuvo un cambio desfavorable, desde “mal, pero mejorando” a “mal y empeorando”, debido a una caída en la cantidad de empleos creados que este trimestre llegó a 178,7 mil, menor a lo que se creaba el trimestre inmediatamente anterior, y en 2019 en el mismo periodo.

Cambios positivos

Dentro de los cambios positivos, la participación laboral pasó del cuadrante “bien, pero empeorando” a “bien y mejorando”, con una tasa que alcanzó los 60,9% y 19,3 mil personas que entraron a la fuerza laboral en este trimestre. La inversión extranjera directa también se movilizó hacia el cuadrante “bien y mejorando”, pero desde el área “mal y empeorando”, variable que llegó a US$2.817 millones, la mayor cifra durante el año 2023, y mayor al promedio de este mismo periodo que alcanzó los US$1.634.

Por último, las exportaciones también tuvieron un cambio positivo, desde “mal y empeorando” hacia “mal, pero mejorando”, con un aumento entre junio y agosto de 541,9 millones de dólares, y dejando un total de US$7.936 millones FOB para este último periodo. Aun así, al realizar la comparación a 12 meses, las exportaciones disminuyeron en 1,2%, anotando el quinto mes de caídas en esta variable.

Las otras variables

El nuevo informe del Instituto UNAB de Políticas Públicas también ahondó en otros indicadores que, si bien no experimentaron cambios de cuadrante, actualizaron sus valores para esta versión del Barómetro.

Dentro del cuadrante más positivo del Barómetro, se mantuvo el índice de remuneraciones reales, indicador que tuvo una variación positiva a doce meses de 2,8%, mostrando nuevamente una recuperación del poder adquisitivo de las familias en línea con la caída de la inflación. La incertidumbre económica también se mantuvo en esta área, con una caída de 32% en el índice a 12 meses, luego, la tasa promedio de créditos hipotecarios continuó en esta zona con un valor de 4,2% en agosto de 2023 y el spread soberano, indicador que llegó a 128 puntos base promedio para agosto, se posicionó también en este cuadrante. Al igual que las anteriores, la brecha en la tasa de participación laboral se mantuvo en esta área, con un cambio significativo en la cantidad de mujeres que entran a la fuerza laboral, pero sin cambios en la cantidad de hombres.

En el cuadrante “bien, pero empeorando” se mantuvo la deuda pública del gobierno central como porcentaje del PIB, valor que se actualizó para el primer trimestre de 2023 y alcanzó un valor de 20,4%, mayor el porcentaje alcanzado el mismo periodo en 2022 la deuda neta alcanzaba el 19,5% del PIB.

Las variables de inflación, IMACEC, confianza empresarial y de consumidores y el saldo en cuentas corrientes y depósitos a plazo, se mantuvieron dentro del cuadrante “mal, pero mejorando”.

En principio, la inflación llegó a 5,3% a doce meses, continuando con su tendencia a la baja que mantiene desde noviembre de 2022. El IMACEC tuvo un crecimiento en julio de 1,8% comparado con el mismo mes en 2022, y el saldo en cuentas corrientes y depósitos a plazo disminuyó, controlando por inflación y personas mayores de 17 años.

Por otra parte, la confianza empresarial tuvo un aumento de 2,14 puntos en agosto, mayor a lo encontrado en julio, pero aún posicionando a las expectativas empresariales en un terreno pesimista. Adicional a esto, la confianza en los consumidores llegó a 40,1, mayor a lo observado el mismo mes el año anterior, con un aumento en los subíndices de situación económica actual, expectativas económicas y de inversiones, sin embargo, con una caída de 4,1 puntos en la confianza respecto al subíndice de trabajo.

Por último, el cuadrante más negativo “mal y empeorando”, mantuvo al dólar, el cual alcanzó un valor de $892 por dólar al 11 de septiembre de 2023, mayor a lo encontrado en agosto donde la divisa llegaba a $851 por dólar. Entre las principales razones se encuentra el bajo IPC de Chile, lo que aumenta las expectativas de una reducción de tasas más agresiva por parte del Banco Central, y que, por tanto, reduce las brechas de tasas esperadas con Estados Unidos, haciendo más atractiva la moneda estadounidense. Además, el escenario negativo en la economía china incrementó el alza en el dólar vía caídas en el precio del cobre.

Conclusiones

El Índice Económico IPP UNAB -el cual se calcula en base al estado de los 20 indicadores que componen el Barómetro de la Economía Chilena- , posicionando al Índice Económico IPP UNAB en el cuadrante “bien y mejorando” durante el mes de septiembre.

Para esta versión del Barómetro, la situación económica se posiciona en su mejor estado desde enero de 2021, tomando en consideración ambas temporalidades de la herramienta, tanto la comparación a tres meses como la con el largo plazo.

Aún dentro de este contexto positivo, se destaca lo que sucede con el mercado laboral el cual presenta dificultades debido a la imposibilidad de equilibrar la fuerza laboral con la cantidad de empleos disponibles, completamente en línea con una tasa de desempleo que se encuentra en aumento. Esto además se relaciona con la disminución en el subíndice de trabajo de la confianza de los consumidores, que respecto a 2022, tuvo una caída de 4,1 puntos.

La investigadora del Instituto UNAB de Políticas Públicas, Francisca Espinoza, destaca los resultados positivos mostrado por el Barómetro para el mes de septiembre señalando que “los resultados muestran que la economía se está consolidando dentro de un estado positivo y de normalidad, lo que revela que los esfuerzos realizados por diversas instituciones para controlar variables económicas desajustadas, como el Banco Central, han tenido efecto. Esto también significa un respiro para las familias, que han resentido dentro de sus presupuestos los efectos de una economía sobrecalentada y que se tuvieron que ajustar fuertemente en su camino al equilibrio”.

Asimismo, Francisca Espinoza advirtió que “si bien las noticias son positivas, el mercado laboral aún no se logra ajustar completamente. La tasa de desempleo va en aumento y la creación de empleos no logra compensar la cantidad de desocupados. Más aún, si hoy quisiéramos tener la misma tasa de desempleo que existía previo a la pandemia (7,5% junio 2019), deberían crearse 121 mil empleos más de los creados en este trimestre móvil. La variación negativa en el subíndice de trabajo de la confianza de consumidores muestra que esta también es una preocupación de la ciudadanía. Así, los esfuerzos deberían dirigirse a incentivar la creación de empleos formales por parte de las empresas, asegurando estabilidad y certidumbre para llevar a cabo nuevos proyectos”.