26 Marzo 2025

Barómetro IPP UNAB: Economía chilena mejora en febrero, pero persisten dudas sobre la solidez de su recuperación

Según el Instituto de Políticas Públicas de la Universidad Andrés Bello, el Índice Económico IPP UNAB llegó hasta los 17,4 puntos en febrero (+7,4 en comparación con el mes anterior), alza impulsada principalmente por un notable desempeño de los subíndices de situación macroeconómica (+11,4 puntos) y de expectativas (+10 puntos). Sin embargo, la alta cantidad de variables que aún se posicionan en el cuadrante “bien, pero empeorando” alerta sobre la existencia de ciertos desafíos locales y externos que podrían dificultar la recuperación de la economía nacional.

El nuevo informe del Barómetro de la Economía Chilena que presenta de manera mensual el Instituto UNAB de Políticas Públicas reportó que, en febrero, se generaron doce cambios dentro de las 24 variables que monitorea el instrumento: ocho fueron en sentido positivo –IMACEC, incertidumbre económica, confianza empresarial, confianza de los consumidores, dólar, precio del cobre, saldo en cuentas corrientes y depósitos a plazo e índice de avisos laborales en internet- y cuatro en dirección negativa -remuneraciones reales, deudores morosos, exportaciones y spread soberano-. Estos movimientos, según el reporte, evidenciarían un avance en la situación económica del país, aunque todavía con incertidumbre sobre su consolidación en el mediano plazo.

Así, de los indicadores que componen el Barómetro, el 29,2% (sin variación respecto a enero) se ubicaron en el cuadrante más favorable “bien y mejorando”, correspondientes al IMACEC, la incertidumbre económica, la confianza de los consumidores, el precio del cobre, la creación de empleos, el IPSA y la tasa de informalidad laboral. En tanto, en la zona “bien, pero empeorando” se localizaron el 37,4% (+8,2 puntos), incluyendo a la inflación, las remuneraciones reales, la deuda neta del gobierno central, los deudores morosos, la participación laboral, las exportaciones, el riesgo, la participación laboral femenina y la tasa promedio ponderado de créditos de consumo. Un 29,2% (+12,5 puntos) se posicionó en el área “mal, pero mejorando”, dentro de las cuales se encuentran el desempleo, la tasa promedio de créditos hipotecarios, la confianza empresarial, el dólar, el saldo en cuentas corrientes y depósitos a plazo, la tasa de ocupación y el índice de avisos laborales de internet. Finalmente, un 4,2% de las variables (-20,8 puntos) se localizaron en el peor cuadrante “mal y empeorando”, correspondiente a la inversión extranjera directa.

Índice Económico IPP UNAB y subíndices

En el segundo mes del año, el informe de la Universidad Andrés Bello reveló que el Índice Económico IPP UNAB mejoró su posición, y pasó de ubicarse en el cuadrante “bien, pero empeorando” a la zona “bien y mejorando”, área en la que también se ubicaron los tres subíndices que lo componen. De esta manera, en febrero el Índice IPP UNAB consignó un valor de 17,4 puntos, 7,4 puntos por sobre a lo registrado en enero.

Subíndice de expectativas

Este subíndice, en primer lugar, experimentó un cambio de cuadrante, pasando de estar “bien, pero empeorando” a encontrarse “bien y mejorando” debido a un aumento de 10 puntos en su valor entre enero y febrero de este año. Dentro de él, se produjeron cuatro cambios de cuadrantes, de los cuales tres son positivos y uno negativo. El primer movimiento favorable se registró en la confianza de los consumidores, la cual pasó de “mal y empeorando” a “bien y mejorando” producto de que el índice pasó desde los 41,9 puntos a los 43,3, cifra por encima del promedio los tres meses anteriores, empujado por una mejora en los subíndices de expectativas (+2,9 puntos) y en el de trabajo (+1,3 punto).

De forma similar, la confianza empresarial también experimentó un cambio favorable al pasar de estar “mal y empeorando” a “mal, pero mejorando” debido a un aumento de 4,7 puntos, hasta lograr los 46,5. Si bien las expectativas siguen siendo pesimistas, esta mejora considerable se produce por un aumento en todos los sectores, como la minería, comercio, industria y construcción. La incertidumbre económica, asimismo, también tuvo un cambio positivo desde “bien, pero empeorando” a “bien y mejorando”, a causa de una caída en este índice desde los 137,2 puntos en diciembre de 2024 a los 128,5 en enero de 2025. A doce meses, también tuvo una variación negativa de 5%, situación que denota un escenario levemente más seguro para la economía chilena.

Por último, el único cambio negativo en este subíndice se produjo en

el spread soberano o riesgo país, el cual alcanzó los 122 puntos base promedio en el mes de enero 2025, por encima de su valor en el mes anterior que fue de 118 puntos.

Subíndice de situación de los consumidores

El subíndice de situación de los consumidores, por su parte, marcó 8,4 puntos (+0,2 puntos) en febrero, y pasó desde el área “bien, pero empeorando” a “bien y mejorando”. En él, se generaron cuatro cambios de cuadrante: dos positivos y dos negativos.

Entre los positivos, se encuentran el saldo en cuentas corrientes y depósitos a plazo, variable que tuvo un cambio desde “mal y empeorando” a “mal, pero mejorando”, debido a que la variación a doce meses del valor real de los saldos -controlados por población mayor de 18 años- fue de -5,5%, menor a la que se encontró en promedio los tres meses anteriores. El Índice de Avisos Laborales de Internet también se movió favorablemente desde la zona “mal y empeorando” a “mal, pero mejorando”, debido a una mejora en el indicador que alcanzó los 72,2 puntos en enero de 2025, por encima del promedio de los tres meses anteriores y llegando su valor más alto desde abril de 2024.

Respecto a los cambios negativos, las remuneraciones reales y los deudores morosos se movieron desde el área “bien y mejorando” a la zona “bien, pero empeorando”. En el caso de las primeras, el índice entregado por el INE muestra una variación a doce meses de 3% en diciembre de 2024, por debajo del crecimiento a doce meses del mismo en los tres meses anteriores, aunque aún en un terreno positivo donde el crecimiento de los salarios supera al avance de la inflación. Por último, los deudores morosos también tuvieron un cambio negativo producto de un leve aumento en el porcentaje de personas totales deudoras morosas reportadas por la CMF -controlada por el total de personas mayores de 18 años-, alcanzando en la actualidad a las 649,3 mil personas, lo que representa un 4,2%.

Subíndice de situación macroeconómica

Por último, la situación macroeconómica fue la que mostró el cambio favorable más significativo dentro de los tres subíndices, al alcanzar un aumento intermensual de 11,4 puntos, pasando desde los -3 puntos a los 8,4 en febrero. Lo anterior, implicó que este subíndice saltara desde el peor cuadrante del Barómetro “mal y empeorando” hasta el más favorable “bien y mejorando”. En este subíndice se produjeron cuatro cambios de cuadrante, donde tres son positivos -IMACEC, dólar y precio del cobre- y uno negativo -las exportaciones-.

Dentro de los cambios favorables, el IMACEC se movilizó desde un estado “mal, pero mejorando” a encontrarse “bien y mejorando”, trayectoria que se produce por una variación de un 6,6% en este indicador, y que se posicionó por encima de las expectativas del mercado. Al analizar por actividad, la producción de bienes creció un 13,3% de forma anual, a causa del rendimiento de la actividad frutícola, la extracción del cobre y del litio. El comercio, por su parte, aumentó en un 10,6% a doce meses, con una mayor contribución del comercio mayorista y minorista. Por su parte, los servicios también crecieron en un 2%, debido a un aumento en el servicio de transporte asociados. Cabe destacar que, si bien el incremento es alentador, esta variación sorpresiva se explica en gran parte por un efecto calendario positivo y por la contribución del comercio y la minería, por lo que este resultado se debe ponderar con cautela debido a la volatilidad presente en él.

Otro rendimiento positivo se observó en el dólar, el cual pasó de estar “mal y empeorando” a “mal, pero mejorando” dado que alcanzó un valor de $961 el 12 de febrero, por debajo su valor promedio los tres meses anteriores. Asimismo, el precio del cobre pasó desde un estado “bien, pero empeorando” a “bien y mejorando”, movimiento generado por un aumento a los 4,23 dólares por libra el 12 de febrero de 2025, precio por encima del promedio del mismo día los tres meses anteriores. Entre las razones de este aumento se ponderaron variables internacionales como los posibles aranceles de EE. UU. que incentivaron un aumento de la compra en el presente por posibles alzas de los precios en el futuro y por una menor oferta en el mercado de metales.

Por último, la única variable que presentó un cambio negativo dentro de este subíndice fueron las exportaciones, las cuales pasaron desde el cuadrante “bien y mejorando” al “bien, pero empeorando”. Este movimiento se produjo debido a que la variación anual del valor alcanzado en términos reales (ajustado por Consumer Price Index) fue menor a la variación promedio de los tres meses anteriores, aunque -en términos nominales- las exportaciones alcanzaron un valor de 10.431 millones de dólares en enero de 2025, marcando un total histórico en un solo mes desde que existen registros. Los aportes en esta área se generaron por el sector frutícola y la minería.

Conclusiones

El informe del Instituto de Políticas de la Universidad Andrés Bello concluyó que la distribución de las variables al interior del Barómetro de la Economía Chilena refleja una mejora en la situación económica del país durante febrero, con un menor número de indicadores en la zona más crítica y un avance en los subíndices que se posicionan todos en la zona más positiva del instrumento “bien y mejorando”.

Sin embargo, la concentración de un 37,4% de las variables en el cuadrante “bien, pero empeorando” sugiere que la recuperación aún enfrenta desafíos y alerta sobre la necesidad de evaluar si esta tendencia favorable se consolidará en los próximos meses o si bien responde a factores transitorios.

De esta manera, si bien el informe del Instituto UNAB de Políticas Públicas evidenció avances en la economía chilena durante el mes de febrero, la sostenibilidad de su recuperación dependerá de la evolución de factores tanto externos como internos y de la capacidad de la misma para enfrentar un escenario aún incierto y frágil. En esa línea, Gonzalo Valdés, subdirector del Instituto UNAB de Políticas Públicas, explica que “los últimos datos reflejan una incipiente recuperación de la economía nacional, pero toda la expectativa por un mejor cumplimiento de la regla fiscal en materia de deuda pública y reducción del gasto podría verse frustrada por la guerra comercial y la fisura entre la Unión Europea y Estados Unidos. En ese sentido, hacemos un llamado a que las autoridades trabajen en un plan de contingencia en caso de que se impongan tarifas excesivas a nuestras exportaciones, situación que nos obligaría a buscar nuevos destinos comerciales”.